EI pritner contactado español

ffiG $&N el otoño de 1 954justo cuando Franciávivía la oleada de OV-Nls más importantede su historia, el diarioMadrid propuso a

Fernando Sesma firmar una serie deartículos sobre la controvertida polé-mica de los extraterrestres. Así nació"Los platillos volantes vienen de otrosmundos", una sección periodística de31 capítulos que fue ganando popula-ridad día a día. De hecho, en esos ar-tículos radicó la base para que a lospocos días se formara el primer nú-cleo de interesados en el tema OVNIsurgido en la capital de España.

El Café Gijón y el Gambrinus seconvirtieron así en los primeros es-cenarios de una tertulia clandestinasobre este misterio, a la que irían lle-gando personajes como el dramatur-go Buero Vallejo, el escritor AlfonsoPaso o elcomisario de policía Dioni-sio Garrido. Ese grupo decidió unbuen día constituirse en asociación yasí nació Ia histórica Sociedad deAmigos de /os Visitantes del Espacio'BURU',la primera de estas caracte-

rísticas en nuestro país, y en la queSesma adoptaría el indiscutible rolde líder.

Una jugada del destino hizo que lafundación de este grupo de aficiona-dos coincidiera con uno de los suce-sos más extraños acaecidos aquelaño de 1954. En la noche del 17 deNoviembre, el enfermero AlbertoSanmartín recibía, según su relato,una piedra del espacio con nuevesignos grabados de manos de unpresunto ser extraterrestre en undescampado de la Ciudad Universi-taria. El suceso, que acaparó nume-rosas páginas del diario El Alcázar,no pasó desapercibido para Sesma,que se enfervorizó con la idea de po-der establecer contactos con seresde otros mundos.

A partir de entonces, se dedicó apasear por la madrileña Casa de Cam-po intentando buscar "un paso entredos mundos". Fueron cientos las soli-tarias caminatas a la búsqueda de unaprueba contundente, que pronto de-sembocaron en la recepción de caftasen su buzón, supuestamente redacta-das por extraterrestres, y con conteni-dos mayormente absurdos.

LLEGA SATIAN(D

En '1962 se iniciaba el más surrea-lista de aquellos contactos. Una vozdesagradable, al otro lado del hilotelefónico, y que se identificaba co-mo Saliano (un presunto alienígenaprocedente del planeta Auco, quesupuestamente gira alrededor de laestrella AIfa de Centauro) le anuncia-ba el inicio de un contacto. De he-cho, después de la llamada comen-zaron a llegar cartas con mensajes

"Ummo, otroplaneta

habitado" fueel primer libro

de Sesmasobre este

asunto. En lopágina

siguiente,retrsto de

Saliano y la"EollenaAlegre".

Por IKER JI§IÉNIZ trÍIIARI

Fernando SesrnaManzano nac¡ó enCeuta en I9O8, aunquese trasladó siendo muyjoven a Madrid dondetrabajó corrrofuncionario deCorreos y Telégrafos.Sin embargo, suauténtica vocac¡ón nofue nunca esa.Prirnero fue lacriptografía,luego -afinales de 1953- elesoter¡s-o y, pocosmeses más tarde, elen¡gma de los OVNls.

de tipo simbólico y barrocos dibujos.Fiel a la máxima de "creerlo todomientras no se demuestre lo contra-rio", Sesma dejó a un lado los inicia-les temores que le hacían sospecharque estaba siendo víctima de unabroma y se sumergió a fondo en elestudio de aquellos mensajes en losque se describía, a grosso modo, unmundo que nada tenía que envidiaral utópico Edén. Fue en esa épocacuando tendrían lugar hechos real-mente curiosos en el sótano de "LaBallena Alegre" (salón ubicado en losbajos del Café Lyon de Madrid) quehicieron exaltar la fe hasta de losmás incrédulos con respecto al con-tacto de Sesma.

Años después, Sesma volvería areconsiderar la hipótesis de la bromaproducida por algún miembro de lapropia tedulia, fijando sus sospechasen un pintor japonés y una astróloga.Tras otro ataque de ira, quemó la in-mensa mayoría de los mensajes deSaliano en el propio Café Lyon.

DEII 98 AL H¡IBLA

Una mañana de principios de 1966,de nuevo a través del teléfono deSesma, iba a comenzar una de lastramas más longevas y desconcer-tantes de nuestra ufología: el asuntoUmmo. Una voz con acento extraña-mente metálico se presentó a él -estavez como Deii 98-, diciéndole queprocedía del planeta Ummo, astroque giraría alrededor de la estrella\Nolf 424. A los pocos días, una in-gente cantidad de material comen-zaría a llegar al domicilio deSesma y a los de otros com-ponentes de la tertulia, amodo de presentación del"otro planeta habitado",un tÍtulo que el ya popular"profesor" -alias con elque empezó a llamársele-otorgó a la primera obrapublicada sobre los ummi-tas y en la que compilaba lainformación que había llega-do entonces hasta sus manos.Eran gruesos informes de carác-ter científico y técnico que no desti-

laban sombra de mesianismo y quedescribían de un modo aséptico có-mo era el mundo hermano que se su-pone existe a14,6 años-luz.

La trama de los ummitas, sin em-bargo, se acabó escapando del con-trol de Sesma a raÍz de los avista-mientos y pruebas que fueron arro-jando los supuestos extraterrestres yque hicieron intervenir a otros mu-chos investigadores. Finalmente,convencido de haber sido víctima deuna broma de proporciones monu-mentales, Fernando Sesma acabó re-negando de Ummo y de práctica-mente cualquier actividad contactis-ta, permaneciendo sus últimos quin-ce años en el más absoluto olvidohasta que, en la noche del 11 deMarzo de 1982, falleció en el mismodomicilio donde se sucedieron du-rante más de una década hechosclave que forjaron la historia del con-tact smo españo

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"MÁS ALLÁ DE LA CIENCIA"es una publicación de J. C.

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,eñSAIÁ DE LAOEIOA,está contohda porh O.J. D'

ffid in Sa¡ -lOril de 1997 - D. L.: M.3.482-1989.

CONTACTADOSONSIDERADOS producto de mitos y leyendas sin funda-mento por los historiadores clás¡cos, hoy pocas personasmedianamente racionales y no cond¡cionadas por sus cre-enc¡as religiosas dudan de que los dioses de las ant¡guasmitologías*existieron realmente. Dioses que.hace *jl9:.d.'

años se pasearon [or todo el mundo y cuyos nombres, hechos históri-cos y portentosas iacultades Se rcferencian en multitud de tradiciones.Hindúés, japoneses, ch¡nos, malayos, sumer¡os, celtas, gr¡egos, ¡udíos,romanoé, e'gipcios, incas, mayas, aztecas... nos rccuerdan a los diosesque vin¡eroñ á U Tierra desde el Cosmos. Miles de dioses. Hasta tribusáfr¡canas actuales como las de los dogones de Malí recuedan aún a Sus

dioses procedentes de Sirio. Otros hablan de las Pléyades, de Orión, deotros planetas de nuestro prop¡o Sistema Solar... ¿Alguien p¡ensa en Ser¡oque tódos esos puebtos se inventaron las historias que narran? ¿O, másbien, se equivocaron sólo en una cosa: en cneer que aquellqs Seres, taniupériores'a ellos, eran n'd¡oses"? Esta hipótesis, durante décadas moti-vo de rechifla, es hoy, S¡n embargo, la única rac¡onalmente coherente.Cualquler otra explicác¡ón es infinitamente más fantasiosa, desde la afir-macién de que son personaies imaginar¡os hasta que se t[1tó de algunacuttura de d propiaiierra que, aisláda del resto de las civilizaciones delplaneta -teoria intraterrestré incluida-, se desarrolló tanto que las demásbonsideraron a Sus habitantes Seles "no humanos" (¿de qué otra mane-ra expl¡car que los tomasen por "dioses"?).

Nó. ttoy'sabemos que la Tierra no es el centro del universo y queéste no gií.a a Su alred'edor, que el hombre no ha sido creado "a ima-gen y simejanza de Dios" porque la idea de un Dios antropomorfoéstá-definitivamente supeiada, que Ia humanidad no procede deunos únicos padres -Adán y Eva- y que en modo-alguno estamosSolos en la inmensidad del c-osmos. E! sentido común -ya Sabe' am¡-go lector, el menos común de |os sent¡dos- Sug¡ere qu-e debe haberñl¡llones y millones de civilizaciones en las m¡les de millones de ga-laxias exístentes de quién Sabe cuántos universos d¡St¡ntos, unasávolutivamente máS avanzadas que la nuestra' otras más atrasadas.Y, siendo esto asín ¿qué ¡mp¡de que a¡gunas de esas civilizacionesnbs hayan visitado én el pasado y nos estén visitando en el presen-le? ¿y qué impide que algunos dé esos seres se estén comun¡candocon-terr;stres telepaticañrente, incluso desde sus propios planetas?Absolutamente nada.

Otra cosa eS, sin embargo, la veracidad de las historias que cuentanquienes hoy +omo igualmente ocurrió en el pasado- d.icen contactarcon extratérrestres. -Porque, entre ellos, hay aprovechados, sinver-güenzas, fantoches e incíuso enfermos mentales de todo tipo. Perolambién personas honestas y d¡gnas de crédito. Confiamos en que subuen criierio, al leer este monog-ráfico, le ayude a Separar el grano deta paia. En cuanto a nuestra op¡nión, la refleiamos alfinaldel mismo.