1 1 Intro- ducción E l pasado 11 de marzo, varios terremotos destructivos, de entre 7.2 y 9.0 MW sacudie- ron la costa noreste de Japón, provocando un tsunami con olas de hasta diez metros que alcanzó la ciudad de Sendai, donde el agua arrasó todo a su paso, incluyendo casas, coches, barcos y granjas y edicios, etc. También en el noreste del país, las autoridades declararon emergencia nuclear después de que la central nuclear de Fukushima Daiichi fuese dañada por el sismo. En la sala de control de su reactor número 1, se registraba esta noche un nivel de radioactividad de 1000 veces superior a lo normal. Gracias a este suceso, el mundo está buscando diferentes maneras de ayudar a Japón. Es así como surgieron algunos pósters e imágenes de promoción de ayuda, algunos de ellos para el Comité Internacional de la Cruz Roja pero todos, con un mensaje de solidaridad y ayuda. En este trabajo, mediante una guía teórica de los temas que se abordaron a lo largo del cuatrimestre en la materia, se relacionaran diez diferentes piezas, las cuales serán ana- lizadas según diferentes teorías de distintos autores, además de ir marcando relaciones entre una pieza y otra, ya que, por más que tengan diferentes formas de presentar la información, todas tratan de un mismo tema, de aquel hecho que marcó un antes y un después en la historia de Japón. Recursos Teóricos T eoría semiótica de PeirceL a semiótica de Peirce tiene una perspectiva losóca pues constituye una teoría de la realidad y del conocimiento que podemos tener de ella por el medio exclusivo del que disponemos los signos. La semiósis es u na experiencia que hace cada uno en todo momento de la vida, mi entras que la semiótica constutituye la teoría de esa experiencia, cuyos componentes formales con el representamen, el objeto, y el interpretante. El signo en Peirce recibe el nombre de representamen. Éste es la ‘cualidad material’ que está en lugar de otra cosa, su objeto, de modo que despierta en la mente de alguien un signo equivalente o más desarrollado al que se denomina interpretante, que aclara lo que signica el representamen y que a su vez representa al mismo objeto. Para que algo sea signo, el mismo tiene que tener cualidades que sirvan para distinguir - lo. También debe tener un objeto, y un interpretante. Y por último, la relación semiótica debe ser triádica, comportar un representamen que debe ser reconocido como el signo de un objeto a trabés de un interpretante. Se pueden distinguir tres tipos de interpretantes. El primero, el inmediato es pensado como concepto o signicado que comporta todo signo independientemente de su con - texto y de las circunstancias de su enunciación. El segundo, el dinámico, trata del efecto particular
