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Las ideas principales
1. Las emociones positivas nos ayudan a gozar de la vida, mientras que las emociones
negativas nos avisan que algo anda mal. Son para servirnos, no controlarnos.
Romanos 12:15 “Gozaos con los que se gozan: llorad con los que lloran.”
2. El temor es el miedo o la inquietud ante una situación peligrosa. La ansiedad es una
inquietud causada por la incertidumbre. Una persona temerosa o ansiosa tienda a huir
frente a un conflicto o ceder cuando no debe. El temor y la ansiedad se vencen con
confianza en Dios.
Isaías 41:10 “No temas, porque yo estoy contigo, no te desalientes porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré,
ciertamente te ayudaré, sí, te sostendré con la diestra de mi justicia.”
3. El orgullo es un sentimiento elevado de tu propio valor o dignidad. En un conflicto, el orgullo causa que
uno no acepte su responsabilidad. El orgullo quiera ganar a toda costa. El opuesto al orgullo es la
cordura y la gratitud.
Romanos 12:3 “Ninguno tenga más alto concepto de sí que el que debe tener, sino piense de sí con cordura.”
4. El enojo es una reacción a la frustración, al dolor o al temor. El enojo es pecado cuando controla a la
persona. Calmarse no resuelve el problema, pero ayuda a la persona para que pueda pensar mejor y
actuar de una manera positiva. La respuesta al problema del enojo es el dominio propio.
Eclesiastés 7:9 “No te apresures en tu espíritu a enojarte; porque el enojo reposa en el seno de los necios.”
CAPÍTULO VI LAS EMOCIONES
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LAS EMOCIONES
Las emociones son parte del ser humano. El amor, el gozo, la sorpresa,
el asombro....¡cuántas emociones hay que llenan nuestras vidas con sentido! En
su libro, Depression, a Stubborn Darkness (Depresión, una oscuridad tenaz), El
autor Edward Welch dice que para muchas personas que sufren de depresión, el
dolor más grande es la falta de emoción. “..la vida es unidimensional, gris y fría.
Nada sostiene el interés. Es apenas un zombi andando. Todo es sin color o
vida, todo es cansancio..” 15 (traducción mía) ¡Qué triste no poder sentir las
emociones!
Nos gozamos con el nacimiento de un bebé. Nos sentimos asombrados con una bella puesta de sol. Las
emociones positivas hacen posible disfrutar de la vida. Las emociones negativas también nos sirven. Son como
señales de aviso que algo anda mal. Dios nos dio las emociones tanto para gozar de la vida como para
protegernos del peligro. Las emociones nos sirven, pero no deben controlarnos.
El temor y la ansiedad
El temor es el miedo ante una situación peligrosa. Es lo que sentimos cuando nos enfrentamos con un
peligro o lo que percibimos como un peligro. Nos ayuda a responder rápidamente ante situaciones adversas — a
hacer algo para evitar el peligro o el dolor. Es una emoción que tiene muchos efectos en el cuerpo. Según
“wikipedia”: “El miedo produce cambios fisiológicos inmediatos: se incrementa el metabolismo celular, aumenta la
presión arterial, la glucosa en sangre y la actividad cerebral, así como la coagulación sanguínea. El sistema
inmunológico se detiene (al igual que toda función no esencial), la sangre fluye a los músculos mayores
(especialmente a las extremidades inferiores, en preparación para la huida) y el corazón bombea sangre a gran
velocidad para llevar hormonas a las células (especialmente adrenalina). También se producen importantes
modificaciones faciales: agrandamiento de los ojos para mejorar la visión, dilatación de las pupilas para facilitar la
admisión de luz, la frente se arruga y los labios se estiran horizontalmente.”
El temor tiene un propósito, pero llega a ser destructivo cuando nos quedamos atrapados por la cosa que
tememos. La situación o el enemigo llega a ser el centro de nuestros pensamientos. Magnificamos el peligro.
Controlados por el temor, actuamos en maneras que nos hacen daño tanto a nosotros mismos como a otros.
Muy relacionado al temor es la ansiedad -- una inquietud causada por la incertidumbre. Lo sentimos
cuando estamos indecisos ante una decisión, o en un momento de inseguridad cuando no nos sentimos en control
de la situación. La ansiedad puede venir cuando una experiencia del presente nos hace recordar una experiencia
desagradable del pasado. A veces la ansiedad viene por contagio — aprendido del ejemplo de otros. La ansiedad
puede llegar a ser un hábito.
Una diferencia entre el temor y la ansiedad es su efecto en el cuerpo. En contraste con el temor,
físicamente, la ansiedad quita energía del cuerpo. Nos sentimos congelados. Es difícil hacer algo para cambiar
nuestra situación. Reaccionamos a un conflicto como víctimas porque pensamos que no hay nada que podamos
hacer para resolver el problema. O, nos hundimos en la culpa, convencidos que debemos poder controlar lo que,
en verdad no está bajo nuestro control.
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15. Welch, Edward T, Depression, A Stubborn Darkness, Punch Press, Winston-Salem, NC,2004, páginas 24-25.
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El temor y la ansiedad afectan los conflictos, porque en vez de buscar resolución, ellos nos motivan a
buscar una manera de escapar. A veces alguien literalmente huye — dejando atrás la situación o la persona con
quien tiene un conflicto. A veces uno huye emocionalmente. Proverbios 12:25 dice “La ansiedad en el corazón del
hombre lo deprime....” La ansiedad puede transformarse en depresión, cargando todos los problemas adentro.
El orgullo
Hay un sentido de satisfacción al terminar bien un trabajo. lograr una meta o ver un ser querido lograr sus
metas es agradable. Dios mismo mostró satisfacción en su propio trabajo. Cinco veces Dios miró lo que él había
creado y vio que “era bueno.” Y por fin, reconoció que su creación era “bueno en gran manera”. (Génesis 1:10, 12,
21, 25, 31) No está mal sentirse complacido cuando algo le sale bien.
El orgullo negativo es un sentimiento elevado de su propio valor o dignidad. Es un
problema porque nos causa demandar nuestros derechos o deseos a costa de los derechos
de otros. Tiene muchas manifestaciones. En algunos, el orgullo se manifiesta como la
soberbia. La soberbio se le hace difícil aceptar la culpa cuando está equivocado. En otros,
el orgullo se manifiesta como el deseo de controlar a otras personas. Puede mostrarse en la
avaricia y la codicia. Puede ser la pereza, cuando no hace su parte en los quehaceres o
tareas, esperando ser servido y no servir. El orgullo tiene celos que demanda exclusividad
en las relaciones con otros.
La trampa del orgullo es que es muy difícil identificarlo en su propia vida. El mismo
orgullo nos miente, y nos dice que tenemos la razón, o que en verdad somos bastante humildes, o que la gente no
nos entiende. ¡Qué engañoso es el orgullo!
El enojo
Dios nos dio las emociones para nuestro bien -- incluyendo el enojo. El enojo es una emoción común en
todos — a cristianos y a no cristianos, a gente con carácter fuerte y a los más tímidos. El enojo tiene su lado
bueno. Es una advertencia que algo anda mal. Nos ayuda a identificar problemas y nos motiva a la acción. Como
el enojo es una emoción que libra adrenalina al cuerpo, en un momento de peligro, el enojo hace posible actos de
fuerza que puede salvar vidas.
En general, el enojo es una reacción a la frustración, al dolor o al temor. Muchas cosas causan la
frustración: un deseo bloqueado, una promesa no cumplida, expectaciones no alcanzadas, una injusticia real o
percibida, estar sobrecargado o desorganizado, o una crisis fuera de control. El dolor puede ser físico, emocional, y
muchas veces procede de un sentimiento de culpa. ¿ Puede recordar, por ejemplo, una vez que haya golpeado su
dedo con un martillo? Además del dolor del dedo, ¿qué sentía? ¡Enojo! Alguien le ofende con un apodo. La
palabra le duele. La reacción normal es el enojo.
Todos tenemos emociones. Debemos usar las emociones para ayudarnos, pero no debemos ser
controlados por ellas. Las emociones positivas nos ayudan a gozar de la vida. Pero el deseo de sentir buenas
emociones no debe instarnos a buscar el placer en lugares equivocados. Adicciones ilustran el peligro de buscar
las buenas emociones a cualquier costo.
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Las emociones negativas sirven como señales de aviso y nos ayudan en un momento de peligro. Nos
advierten que estamos en peligro, y que debemos buscar la ayuda de Dios. Pero las emociones negativas pueden
guiarnos a caminos equivocados, haciéndonos daño a nosotros mismos o a otros.
Usamos bien las emociones cuando mantenemos la misma actitud de
Cristo: obediencia y sumisión. El fruto del Espíritu (amor, gozo, paz, paciencia,
benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza. Gálatas 5:22-23) es la
evidencia de que estamos siendo guiados por el Espíritu. Gálatas 5:24-26
“Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y
deseos. Si vivimos por el Espíritu, andemos también por el Espíritu. No nos
hagamos vanagloriosos, irritándonos unos a otros, envidiándonos unos a
otros.”
Alguien que sigue a Cristo tiene una perspectiva distinta frente a los problemas y conflictos. Su meta no es de
ganar, sino de glorificar a Cristo. No es conseguir sus derechos, sino buscar el bien de otros. No anda con temor y
ansiedad, porque confía en Dios. El resultado es estar más y más centrado en Cristo y en cómo servir a otros.
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Las ideas principales
• Las emociones positivas nos ayudan a gozar de la vida.
• Las emociones negativas nos avisan que algo anda mal.
• Las emociones son para servirnos, no controlarnos.
Materiales necesarios: • Fotocopia del estudio bíblico para cada alumno (pagina 135)
• Una fotocopia para cada alumno de la hoja “El termómetro de emociones” (pagina 136)
La lección: Introducción al tema:
Repase con los alumnos las lecciones pasadas.
• ¿Qué es un conflicto? (El conflicto es una diferencia de opinión o propósito que frustra el deseo de alguien.)
Hemos visto algunas alternativas positivas.
• ¿Cuál es la alternativa responsable? (tomar responsabilidad por sus decisiones)
• ¿Cuál es la alternativa de honor? (pasar por alto las ofensas pequeñas)
• ¿Cuál es la alternativa de gozo? (ver los propósitos de Dios en medio de los conflictos)
Actividad: El espejo de emociones
Que cada persona escoja una pareja. Que se paren cara a cara, algunas pulgadas de distancia entre ellos. Por
turno, que imiten los movimientos de su pareja como si fuera el reflejo de un espejo. El líder dice una emoción y la
pareja expresa la emoción con su cara y sus movimientos. (enojo, tristeza, duda, preocupación, gozo, sorpresa,
etc.) Las emociones son buenas e importantes. Dicen que para muchas personas que sufren de depresión, el
dolor más grande es la falta de emoción. Los que han sufrido la depresión dicen que: “..la vida es unidimensional,
Lección 17 Las emociones
Versículo clave: Romanos 12:15 “Gozaos con los que se gozan: llorad con los que lloran.”
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gris y frío. Nada sostiene el interés. Es apenas un zombi caminando. Todo es sin color o vida y cansancio..” 16
¡Qué triste no poder sentir las emociones! Las emociones positivas hacen posible disfrutar la vida. Las emociones
negativas sirven como señales de aviso de que algo anda mal.
Dé a cada alumno la fotocopia de “El termómetro de las emociones”.
Pida que tracen una línea de cada frase a dónde pondrían la emoción que corresponde. No todas las personas son
afectadas igualmente por las emociones y no todas las situaciones nos afectan de la misma manera. ¿Cuál
situación te provocará la reacción más fuerte? ¿Por qué? Piense otra vez en el termómetro. ¿Qué cosa no le
provocaría una reacción muy grande? Ya, si se repitiera 5 o 6 veces en seguida la misma cosa, ¿cambiaría tu
respuesta?
Actividad opcional: Dé a cada alumno una hoja en blanco. Díganles que van a dibujar una cara que represente las emociones que
sentirían en las siguientes situaciones, una cara para cada situación. (Puede cambiar las situaciones para que sean
apropiadas para su clase. Las siguientes solamente son ejemplos.)
1. Acabas de ganar un concurso
2. Tu equipo favorito perdió el campeonato
3. Estás peleando con tu mejor amigo
4. Tus amigos te sorprendieron con una fiesta en tu cumpleaños
5. Acabas de perder algo valioso
6. Acabas de encontrar la cosa valiosa que perdiste en el #5
En el transcurso de un día, podemos experimentar emociones muy diversas. Podemos ir de felices a tristes a
enojados en un abrir y cerrar de ojos.
Entregue un estudio bíblico a cada alumno
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16. Welch, Edward T, Depresion, A Stubborn Darkness, Winston-Salem: Punch Press, 2004, paginas 24-25.
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1. ¿Cuál emoción debe penetrar nuestra relación con Dios? Según Filipenses 3:1, “gozaos en el Señor”. Dios quiere que nuestra relación con él sea una de gozo.
2. ¿Cuáles emociones debemos compartir con otros? Romanos 12:15 nos habla de emociones compartidas. Gozaos con los que se gozan: llorad con los que
lloran”. Hay un lugar para expresar las emociones. Son importantes. Debemos sentir el dolor y el gozo de otros.
Dios nos dio las emociones para que gocemos de la vida y compadezcamos los unos con los otros.
3. ¿Dónde nacen los conflictos?
Santiago 4:1 (de los pasiones) Las emociones no controlados provocan y empeoran los conflictos.
La Biblia habla del corazón como la sede de las emociones. Los deseos no son necesariamente malos en sí,
pero cuando los deseos buenos toman un lugar demasiado grande en nuestros corazones, nos metemos en
problemas. Con manos abiertas debemos presentar nuestros deseos más profundos a Dios. Las emociones
deben ayudarnos, no controlarnos.
4. ¿Qué es la relación entre el corazón y las palabras? Según Mateo 12:33-37, las dificultades sacan a la luz, por medio de las palabras, lo que tenemos en el
corazón.
Aplicación:
Piensen en un conflicto que están enfrentando ahora mismo, o uno que les ha
pasado. ¿Sus emociones les ayudaron o les controlaron?
Estudio bíblico – guía del maestro
Lección 17: Las emociones
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Romanos 12:15 “Gozaos con los que se gozan: llorad con los que lloran.”
Las emociones son parte de la experiencia humana. Cada vida tiene una medida de alegría y tristeza.
1. Según Filipenses 3:1, ¿cuál emoción debe penetrar nuestra relación con Dios? _________________________
2. Romanos 12:15 nos habla de emociones compartidas. ¿Cuáles emociones debemos compartir con otros?
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Dios nos dio las emociones para que gocemos de la vida y compadezcamos los unos con los otros.
3. Santiago 4:1 dice que los conflictos nacen, ¿dónde? _______________________________________________
La Biblia habla del corazón como la sede de las emociones. Los deseos no son necesariamente malos en sí,
pero cuando los deseos buenos toman un lugar demasiado grande en nuestros corazones, nos metemos en
problemas.
4. Según Mateo 12:33-37, ¿qué es la relación entre el corazón y las palabras? ____________________________
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Las dificultades sacan a la luz lo que tenemos en el corazón.
Las emociones no controladas provocan y empeoran los conflictos.
Las emociones deben ayudarnos, no controlarnos.
Estudio bíblico – alumnos
Las emociones
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El termómetro de emociones
Traza una línea de cada frase al termómetro para mostrar cómo se siente cuando:
1. Alguien hace burla de mí
2. Alguien me quita el lugar en la fila 3. Alguien habla
mal de mí 4. Alguien maltrata
a otra persona en mi presencia
5. Pierdo un juego
FURIOSO ENOJADO DISGUSTADO FRUSTRADO INDIFERENTE TRANQUILO
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Las ideas principales
• El temor es el miedo o la inquietud ante una situación peligrosa.
• La ansiedad es una inquietud causada por la incertidumbre.
Una persona temerosa o ansiosa tiende a huir frente a un conflicto o ceder cuando no es
correcto hacerlo.
• El temor y la ansiedad se vencen con confianza en Dios.
Materiales necesarios: Fotocopia de la hoja “Las fobias” para cada alumno. (Hay dos por página, página 142)
Fotocopia de la hoja ¡Cómo vencer el temor y la ansiedad! Para cada alumno (página 143)
La lección: Introducción al tema:
Entregue una fotocopia de “Las fobias” a cada alumno
Dicen que el 5% de la población mundial padece algún tipo de fobia.
Una el nombre de estas fobias comunes con su definición.
Las respuestas son:
Acrofobia: El miedo a las alturas
Emetofobia: El miedo de al vómito o a vomitar
Carcinofobia: El miedo a contraer el cáncer
Brontofobia: El miedo a rayos y truenos de las tormentos
Necrofobia: El miedo a la muerte
Lección 18 ¡Cómo vencer el temor y la ansiedad!
Versículo clave: Isaías 41:10: “No temas, porque yo estoy contigo, no te desalientes, porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré, ciertamente te ayudaré, sí te sostendré con la diestra de mi justicia...”
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Agorafobia: El miedo de multitudes o lugares abiertos
Aracnofobia: El miedo de arañas
Sociofobia: El miedo de ser juzgado negativamente en situaciones sociales
Aerofobia: El miedo de viajar en avión
Claustrofobia: El miedo a quedar confinado a espacios cerrados
1. El temor es el miedo o inquietud ante una situación
peligrosa.
El temor es lo que sentimos cuando enfrentamos lo que
percibimos como un peligro. Nos ayuda a responder
rápidamente ante situaciones adversas. Es una emoción que
tiene muchos efectos en el cuerpo.
El miedo hace que:
a. el sistema inmunológico se detenga (para poner todas sus
fuerzas en defensa)
b. la sangre fluya a los músculos mayores (para poder huir)
c. el corazón bombee sangre a gran velocidad (para llevar
adrenalina al cuerpo)
d. se agrandan los ojos para mejorar la visión
2. El temor nos sirve en un tiempo de peligro
Pero es destructivo cuando nos quedamos fijos en la cosa que tememos.
La situación o el enemigo llega a ser el centro de nuestros pensamientos y magnificamos el peligro.
Controlado por el temor, actuamos de maneras que nos hacen daño a nosotros mismos o a otros.
3. Muy relacionado al temor está la ansiedad
La ansiedad es una inquietud causado por la incertidumbre. Lo sentimos cuando estamos indecisos ante una
decisión, o en un momento de inseguridad cuando no estamos en control de la situación. La ansiedad puede
venir de experiencias del pasado o ser aprendida del ejemplo de otros. El temor y la ansiedad son semejantes
porque son sentimientos de inseguridad o incertidumbre. Son sumamente incómodos.
Una diferencia entre el temor y la ansiedad es su efecto en el cuerpo. Al contraste del temor, la ansiedad quita
energías del cuerpo. Nos sentimos congelados. Es difícil hacer algo para cambiar nuestra situación.
Reaccionamos a un conflicto como víctimas. Pensamos que no hay nada que podamos hacer para resolver el
problema. O, nos hundimos en la culpa, pensando que debemos poder controlar lo que, en verdad, no está
bajo nuestro control.
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4. El temor y la ansiedad afectan los conflictos
• En vez de buscar resolución, el temor y la ansiedad nos motivan a buscar una manera de escapar. A veces
alguien literalmente huye — dejando atrás la situación o persona con quien tiene un conflicto. A veces uno
huye emocionalmente. No habla ni reacciona. Proverbios 12:25 dice “La ansiedad en el corazón del hombre
lo deprime....” La ansiedad puede transformarse en depresión, cargando todos sus problemas adentro. Como
el temor y la ansiedad son tan difíciles de soportar, muchas veces se disfrazan como enojo. El enojo permite
que la persona reaccione, pero generalmente es con una explosión que hace daño a la persona misma o a
otros.
La ansiedad y el temor son emociones. No es de provecho culparse por sentirse ansioso o con temor. Son
importantes señales de peligro. No podemos controlarlos por voluntad nuestra. Lo importante es lo que
hacemos cuando nos damos cuenta que la ansiedad (o el temor) está entrando al corazón. Como dice el
refrán, “no podemos evitar que el pájaro vuele sobre la cabeza, pero, sí podemos evitar que haga un nido en
nuestro cabello”.
Entregue una hoja “¡Cómo vencer el temor y la ansiedad!” a cada
alumno.
¿Qué debes hacer cuando el temor o la ansiedad quiere apoderarse de ti?
No temas decirle a Dios lo que sientes. Salmo 77 es un salmo de angustia convertido
en confianza. El salmista expresó sus emociones a Dios. Después de expresar toda
su ansiedad, él reconoció la grandeza y suficiencia de Dios. (Si hay tiempo, tome el
tiempo para leer todo el salmo. Pregunte a sus alumnos cuáles versículos les
impactan.)
“¿Qué dios es grande como nuestro Dios? Tú eres el Dios que hace maravillas;
hiciste notorio en los pueblos tu poder.” Salmo 77:13b-14
1. Ora. Dile a Dios lo que sientes, y expresa tu confianza a Dios y reconoce que él está en control de tu situación.
2. Memoriza algunos pasajes bíblicos acerca de la ansiedad y el temor. Aplíquelos a tu situación y aférrate a
sus promesas. Por ejemplo:
1 Pedro 5:6-7 “Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte cuando fuere tiempo:
echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros”.
Isaías 41:10 “No temas, porque yo estoy contigo, no te desalientes, porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré,
ciertamente te ayudaré, sí, te sostendré con la diestra de mi justicia”.
3. Medita en lo que es verdad y positivo. Muchas veces la ansiedad es el temor a lo que “tal vez viene” en vez
de un enfoque en lo que es verdad o real. Pensamos las mismas cosas vez tras vez.
Filipenses 4:8 (versión: Biblia de las Américas) “Por lo demás hermanos, todo o que es verdadero, todo lo
digno, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo honorable, si hay alguna virtud o algo que merece
elogio, en esto meditad”.
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4. Piensa en otros recursos que tienes a tu alcance. ¿Tienes un bueno amigo/amiga con quien puedes
conversar? ¿Puedes escuchar música que levanta tu ánimo? Haz algo positivo, por pequeño que sea, para
enfrentar la causa de tu ansiedad
5. Reconoce que al fin y al cabo Dios es el juez. Él es más grande que tus problemas, y más poderoso que tus
enemigos. Él está presente en los momentos cuando lo necesitas.
Isaías 57:15,18 “Porque así dice el Alto y Sublime que vive para siempre, cuyo nombre es Santo; habito en
lo alto y santo, y también con el contrito y humilde de espíritu, para vivificar el corazón de los contritos... He
visto sus caminos, pero lo sanaré; lo guiaré y le daré consuelo a él y a los que con él lloran, poniendo
alabanza en los labios. Paz, paz al que está lejos y al que está cerca — dice el Señor — y yo lo sanaré.”
Aplicación: La ansiedad y el temor hacen que todo aparezca oscuro. Es como tratar de llevar en la espalda una carga que es
demasiada pesada. No se puede. El Señor te está diciendo: Echa toda tu ansiedad sobre mí. Porque yo tengo
cuidado de ti. Con confianza en Dios, vas a recibir luz para seguir adelante aunque sea solamente para el siguiente
paso. Vas a tener la fuerza para llevar la carga, porque no la cargarás sólo. Dios es más grande que tu
problema. Él te ama y viene a tu defensa. Cristo vino a darte luz en las tinieblas y fuerza para seguir
adelante.
Lean “Dios es más grande”.
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Cuando honro a Dios en un conflicto
muestro al mundo cuán grande es él.
Más grande que el problema
más grande que el dolor
Dios es más grande.
No quiere decir que no me duele,
no quiere decir que “no importa”.
Quiere decir que Dios puede usar lo malo
para hacer algo que es bueno.
Cuando hago lo que es bueno a otros
yo muestro al mundo que Dios es bueno,
mejor que el problema
mejor que el dolor
Dios es el mejor.
No quiere decir que no me duele,
no quiere decir que “no importa”.
Quiere decir que Dios puede usar lo malo
para hacer algo que es bueno.
Cuando aprendo actuar como Jesús
muestro al mundo que Dios está en mi.
No importa el problema
no importa el dolor
Dios está en mi.
No quiere decir que no me duele,
No quiere decir que “no importa”.
Quiere decir que Dios puede usar lo malo
Para hacer algo que es bueno.
Por Luke McKeeth
DIOS ES MÁS GRANDE
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LAS FOBIAS Dicen que el 5% de la población mundial padece algún tipo de fobia. Une el nombre de estas fobias comunes con
su definición.
Acrofobia El miedo a la muerte
Emetofobia El miedo a quedar confinado a espacios cerrados
Carcinofobia El miedo de al vómito o a vomitar
Brontofobia El miedo a contraer el cáncer
Necrofobia El miedo a las alturas
Agorafobia El miedo de viajar en avión
Aracnofobia El miedo de multitudes o lugares abiertos
Sociofobia El miedo de arañas
Claustrofobia El miedo a rayos y truenos de las tormentos
Aerofobia El miedo de ser juzgado negativamente en situaciones
sociales
____________________________________________________________________________________________
LAS FOBIAS Dicen que el 5% de la población mundial padece algún tipo de fobia. Une el nombre de estas fobias comunes con
su definición.
Acrofobia El miedo a la muerte
Emetofobia El miedo a quedar confinado a espacios cerrados
Carcinofobia El miedo de al vómito o a vomitar
Brontofobia El miedo a contraer el cáncer
Necrofobia El miedo a las alturas
Agorafobia El miedo de viajar en avión
Aracnofobia El miedo de multitudes o lugares abiertos
Sociofobia El miedo de arañas
Claustrofobia El miedo a rayos y truenos de las tormentos
Aerofobia El miedo de ser juzgado negativamente en situaciones
sociales
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Salmo 77:13b-14 “¿Qué dios es grande como nuestro Dios?
Tú eres el Dios que hace maravillas; hiciste notorio en los pueblos tu poder”.
No temas decirle a Dios lo que sientes. Salmo 77 es un salmo de angustia
convertido en confianza. El salmista expresó sus emociones a Dios. Después de
expresar toda su ansiedad, él reconoció la grandeza y suficiencia de Dios.
1. Ora. Dile a Dios lo que sientes, y expresa tu confianza a Dios y reconoce que él
está en control de tu situación.
2. Memoriza algunos pasajes bíblicos acerca de la ansiedad y el temor.
Aplícalos a tu situación y aférrate a sus promesas
1 Pedro 5:6-7 - ____________________________________________________
_________________________________________________________________________________________
Isaías 41:10 - _____________________________________________________________________________
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3. Medita en lo que es verdad y positivo.
Muchas veces la ansiedad es el temor a lo que “tal vez viene” en vez de un enfoque en lo que es verdad o real.
Pensamos las mismas cosas vez tras vez. En cambio, debemos meditar en lo que es verdad y positivo.
Filipenses 4:8 - ____________________________________________________________________________
_________________________________________________________________________________________
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4. Piensa en otros recursos que tienes a tu alcance. ¿Tienes un bueno amigo/amiga con quien puedes
conversar? ¿Puedes escuchar música que levanta tu ánimo? Haz algo positivo, por pequeño que sea, para
enfrentar la causa de tu ansiedad.
5. Reconoce que al fin y al cabo Dios es el juez. Él es más grande que tus problemas, y más poderoso que tus
enemigos. Él está presente en los momentos cuando lo necesitas.
• Isaías 57:15, 18 “Porque así dice el Alto y Sublime que vive para siempre, cuyo nombre es Santo; habito en lo
alto y santo, y también con el contrito y humilde de espíritu, para vivificar el corazón de los contritos. He visto
sus caminos, pero lo sanaré; lo guiaré y le daré consuelo a él y a los que con él lloran, poniendo alabanza en
los labios. Paz, paz al que está lejos y al que está cerca — dice el Señor — y yo lo sanaré”.
Estudio bíblico – alumnos
¡Cómo vencer el temor y la ansiedad!
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Las ideas principales
El orgullo es un sentimiento elevado de su propio valor o dignidad.
En un conflicto, el orgullo causa que uno no acepte su responsabilidad.
El orgulloso quiere ganar a cualquier precio.
La respuesta al orgullo es la cordura y la gratitud.
Materiales necesarios: Materiales para hacer una tarjeta de gratitud según su gusto.
Fotocopia del Salmo 100 para cada alumno (página 148) (opcional)
• Fotocopia del estudio bíblico para cada alumno. (página 149)
La lección:
Entregue un estudio bíblico a cada alumno
Lección 19 El orgullo
Versículo clave: Romanos 12:3: “No tenga más alto concepto de sí
que el que debe tener sino piense de sí con cordura.”
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1. En tu opinión ¿hay tal cosa como un orgullo sano? ¿Por qué sí o no?
El orgullo negativo es un sentimiento elevado de su propia valor o dignidad. El orgullo tiene muchas
manifestaciones.
Soberbia
Es difícil aceptar que esté equivocado.
El deseo de controlar a otras personas.
La avaricia y la codicia.
La pereza.
Los celos que demandan exclusividad en las relaciones con otros.
2. Generalmente, la Biblia usa la palabra orgullo en un sentido
negativo. Al mismo tiempo sabemos que no está mal sentirse satisfecho el haber hecho algo bueno. ¿Qué palabras se
repiten en los siguientes versículos que muestran el agrado que Dios mismo sintió en la creación? (Génesis 1:10
12, 21, 25, 31) (bueno)
3. Según Salmo 10:4, ¿qué es la actitud de una
persona orgullosa? Describe la actitud del orgulloso ante Dios: “El malo, por su altivez, no busca a Dios; no
hay Dios en ninguno de sus pensamientos”.
4. ¿Qué dice Proverbios 6:17 (y 21:4) acerca
del orgullo? No hay ninguna duda de la actitud de Dios en cuanto al orgullo. Es el primero en la lista de las siete cosas que Dios
aborrece. Proverbios 6:17 y Proverbios 21:4 dicen: “altivez de ojos, y orgullo de corazón, y pensamiento de
impíos, son pecado”. La trampa del orgullo es que es muy difícil identificarlo en nuestra propia vida. El mismo
orgullo nos miente, y nos dice que tenemos la razón, o que en verdad somos bastante humildes, o que la gente no
nos entiende”.
5. El orgullo es peligroso. • Santiago 4:6 dice que “Dios resiste a los soberbios”. El orgulloso no encuentra el apoyo de Dios. En
Proverbios 16:18, ¿qué le pasa al orgulloso? (destrucción, caídas)
El orgullo daña relaciones con otros y es la fuente de muchos conflictos. La persona orgullosa excusa la mala
conducta. Rehúsa tomar responsabilidad por sus acciones. El orgulloso no ve el valor de otros.
Estudio bíblico – guía del maestro
Lección 19: El orgullo
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6. Según Romanos 12:3, en vez del orgullo, debemos pensar de
nosotros mismos con cordura
La cordura lleva la idea de buen juicio.
La cordura nos recuerda que no somos el centro del universo.
La cordura da a Dios la preeminencia. Reconoce que lo que tienes - sea en habilidades, capacidades o
posesiones viene de la mano del creador.
7. Según 1 Corintios 10:24, en vez de tener la ego-céntrica
perspectiva del orgullo, ¿qué debemos hacer?
Ninguno busque su propio bien, sino el del otro.”
La cordura cambia el amor egocéntrico del orgullo para el amor a otros.
Empieza a ver lo bueno en, y las necesidades de, otras personas.”
8. El remedio para el orgullo A. La cordura
▪ Romanos 12:3 nos da el remedio para el orgullo: “...no tenga más alto concepto de sí que el que debe tener
sino piense de sí con cordura...”
▪ La cordura lleva la idea de buen juicio.
▪ La cordura nos recuerda que no somos el centro del universo.
▪ La cordura da a Dios la preeminencia. Reconoce que lo que tienes - sea en habilidades, capacidades o
posesiones vienen de la mano del creador.
▪ I Corintios 10:24 dice:“Ninguno busque su propio bien, sino el del otro”.
B- La gratitud
▪ Cuando uno se apoya en sus propios méritos, su valor como persona
sube o baja según sus logros. Por eso, para mantener un buen concepto
de sí mismo tiene que constantemente confirmar su valor o caer en la
depresión.
▪ La persona con cordura reconoce su valor infinito, pero sabe que la fuente
de su valor es Dios.
▪ La gratitud a Dios combate el orgullo.
▪ La cordura también ve la contribución de otros y muestra gratitud.
147
Aplicación: Hay dos ejercicios productivos para alguien que quiere combatir el orgullo. Y como el orgullo es difícil de identificar
en sí mismo, sería bueno hacer los ejercicios como un “profilaxis”. En cuanto sea posible, todos los días, busca la
oportunidad:
(1) de hacer algo para otra persona (y mejor si es sin que se den cuenta.)
(2) de expresar tu gratitud primeramente a Dios, pero también a una persona que es una bendición en tu vida.
(Si hay tiempo provea materiales y deje a los estudiantes hacer una tarjeta de gratitud para alguien. Que usen su
creatividad para hacer algo a su propio gusto.)
El amor busca el bien de la otra persona y la gratitud reconoce el bien que otros le han hecho. Son buenas
maneras de recordarse que “yo” no soy el centro del universo.
Terminen la clase mostrando gratitud a Dios leyendo o cantando juntos el Salmo 100.
148
Salmo 100
“Cantad alegres a Dios, habitantes de toda la tierra,
servid a Jehová con alegría;
venid ante su presencia con regocijo.
Entrad por su puertas con acción de gracias,
por su atrios con alabanza,
alabadle, bendecid su nombre.
Porque Jehová es bueno:
para siempre es su misericordia,
y su verdad por todas las generaciones.
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Romanos 12:3: “No tenga más alto concepto de sí que el que debe tener sino piense de sí con cordura.”
1. En tu opinión, ¿hay tal cosa como un orgullo sano? ¿Por qué sí o no? ________________________________
_________________________________________________________________________________________
2. Generalmente, la Biblia usa la palabra orgullo en un sentido negativo. Al mismo tiempo sabemos que no está
mal sentirse satisfecho por haber hecho algo bueno. ¿Qué palabras se repiten en los siguientes versículos que
muestran el agrado que Dios mismo sintió en la creación? (Génesis 1:10 12, 21, 25, 31)
_________________________________________________________________________________________
3. El orgullo negativo es un sentimiento elevado de su propia valor o dignidad. Según Salmo 10:4, ¿qué es la actitud de una persona orgullosa?____________________________________________ ______________________________________________________________________
4. ¿Qué dice Proverbios 6:17 (y 21:4) acerca del orgullo? __________________________
______________________________________________________________________
______________________________________________________________________
5. El orgullo es peligroso. Santiago 4:6 dice que “Dios resiste a los soberbios.” El orgulloso
no encuentra el apoyo de Dios. En Proverbios 16:18 , ¿qué le pasa al orgulloso?
_______________________________________________________________________
_________________________________________________________________________________________
El orgullo daña relaciones con otros y es la fuente de muchos conflictos. La persona orgullosa excusa la mala
conducta. Rehúsa tomar responsabilidad por sus acciones. El orgulloso no ve el valor de otros.
6. Según Romanos 12:3, en vez del orgullo, debemos pensar de nosotros mismos con ______________________
_________________________________________________________________________________________
La cordura lleva la idea de buen juicio. La cordura nos recuerda que no somos el centro del universo. La
cordura da a Dios la preeminencia. Reconoce que lo que tiene - sea en habilidades, capacidades o posesiones,
viene de la mano del creador.
7. Según 1 Corintios 10:24, en vez de tener el ego-céntrico perspectiva del orgullo, ¿qué debemos hacer? ______
_________________________________________________________________________________________
La persona con cordura reconoce su valor infinito, pero sabe que la fuente de su valor es Dios. La gratitud a
Dios combate el orgullo. La cordura también ve la contribución de otros y muestra gratitud. Anota algo por lo
cual puedes dar gracias a Dios, y una manera en lo cual otra persona ha sido una bendición en tu vida.
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Estudio bíblico – alumnos
El orgullo
150
Las ideas principales
• El enojo es una reacción a la frustración, el dolor o el temor.
• El enojo es pecado cuando nos controla.
• El calmarse no resuelve el problema pero ayuda a la persona para que pueda pensar mejor y
actuar en una manera positiva.
• La respuesta al problema del enojo es el dominio propio.
Materiales necesarios: • Una fotocopia de la silueta del cuerpo para cada alumno. O puede pedir que cada uno dibuja uno en su propio
papel (página 155).
• Una pizarra o cartulina para anotar los puntos importantes de la lección.
• Fotocopia para cada alumno de Las emociones (página 154).
La lección: Introducción al tema:
Repase las lecciones acerca de las emociones.
¿Para qué sirven las emociones? (Las buenas emociones nos ayudan a disfrutar la vida, las emociones
negativas son avisos de peligro o que algo anda mal)
¿Cuál es el resultado en un conflicto de ser controlado por el temor y la ansiedad? (la tendencia de huir o ceder
cuando no es bueno)
¿Cómo se puede vencer el temor y la ansiedad? (con confianza en Dios)
¿Qué son algunos de las manifestaciones del orgullo? (soberbia, es difícil aceptar que esté equivocado, el
deseo de controlar a otras personas, la avaricia y la codicia, la pereza, y los celos que demandan exclusividad
en las relaciones con otros.)
¿Cuál es el remedio para el orgullo? (La cordura y la gratitud)
Lección 20 El enojo
Versículo clave: Eclesiastés 7:9 “No te apresures en tu espíritu a enojarte; porque el enojo reposa en el seno de los necios.”
151
1. ¿Qué es el enojo? a. En general, el enojo es una reacción a la frustración, el dolor, o la injusticia. Tanto el orgullo como el temor
pueden disfrazarse como enojo. Muchas cosas nos frustran:
▪ una promesa no cumplida,
▪ expectaciones no alcanzadas,
▪ una injusticia real o percibida,
▪ estar sobrecargado o desorganizado,
▪ una crisis fuera de control.
b. El dolor puede ser físico, emocional, o dolor que viene al sentirse culpable. ¿ Puedes recordar, por ejemplo, una
vez te has golpeado tu dedo con un martillo? Además del dolor en el dedo, ¿qué sentías? Enojo. Alguien te
ofende con un apodo. La palabra te duele y la reacción normal es el enojo. Alguien te enfrenta en un error. No
es solamente pena que sientes. Es enojo.
2. El enojo tiene cuatro etapas. a. Una acumulación de frustración, dolor, o temor. Hay una medida en la cual aguantamos la frustración.
Generalmente no explotamos de un solo.
▪ Eventos externos—Ejemplo: puede ser que te afecten más las cosas cuando otros te estén viendo, o al
final de una serie de frustraciones pequeñas.
▪ Eventos internos—Ejemplo: puede ser que te afecten más las cosas por los recuerdos de algo que te
haya pasado hace mucho tiempo, o cuando estés muy cansado.
b. Una chispa o detonador—un evento que prende fuego al enojo. El detonador es el evento que le hace explotar.
c. La erupción—la expresión del enojo.
d. Las consecuencias—los resultados de la expresión del enojo.
Entregue a cada alumno una copia de la silueta de la persona
(Enséñales la silueta o pida que lo dibujen en la otra cara de la hoja que tienen.) Pídales que marquen dónde
sienten el enojo. ¿Qué partes de su cuerpo están siendo afectadas por el enojo? Una persona experimenta el
enojo en todo su cuerpo:
• el cerebro—ideas dan vueltas y vueltas en la mente. • el corazón--palpita • los dientes—se rechinan • la boca—tiene ganas de gritar • as manos—en puños • la frente—arrugas • el estomago—se retuerce • los pies—tiene ganas de dar patadas o pisotear
Estudio bíblico – guía del maestro
Lección 20: El enojo
152
Como el temor, el enojo es una emoción que libra adrenalina al cuerpo. En un momento de peligro, la adrenalina
hace posible actos de fuerza que pueden salvar vidas. El enojo es una reacción física, pero somos responsables
por la manera en que expresamos el enojo. Estar en lo correcto no justifica dar rienda suelta al enojo. Prov. 29:11
dice: “El necio da rienda suelta a toda su ira, mas el sabio al fin la sosiega.”.
Analiza tu propio enojo.
1. ¿Qué cosa o cosas tienden a hacerte sentir enojado?
2. ¿Cómo te afecta el enojo físicamente?--¿Dónde sientes el enojo en tu cuerpo?
“Sé que estoy enojado cuando ________________________________________________________________”
3. ¿Cómo afecta tus pensamientos?—Cuando te sientes enojado, ¿qué pasa por tu mente? “Cuando siento
enojado me dan ganas de ___________________________________________________________________”
4. ¿Cómo afecta tu vida?
¿Cuáles de tus acciones aumentan los problemas? ________________________________________________
¿Qué consecuencias tuvieron estas acciones? ___________________________________________________
Entrega a los alumnos una fotocopia de LAS EMOCIONES. Repasa con ellos las repuestas negativas al conflicto. (Puedes referirte a la loma resbaladiza en la página 116)
● El temor — tiende a reaccionar para evitar el conflicto
• Negar—fingir que no hay conflicto — tiende a guardar rencor
• Huir — literalmente o emocionalmente
• Ceder — para evitar el conflicto, uno puede darse por vencido cuando no es apropiado —
llegar a ser una victima.
● El orgullo — tiende a hacer lo que sea necesario para ganar
• Negar—su responsabilidad en el conflicto
• Manipular—hacer lo que puede para controlar a la otra persona
• Exigir—demandar sus derechos, no pensar en el bien de la otra persona
● Tanto el temor como el orgullo pueden disfrazarse como el enojo.
El enojo—tiende a descontrolarse y atacar con violencia
• Social (Ej. Excluir a la otra persona)
• Verbal (Ej. Amenazar, burlar, chismear, gritar, humillar)
• Física (Ej. Pegar, empujar, golpear, tropezar, chocar)
3. ¿Está bien enojarnos, o no?
Efesios 4 contiene dos versículos algo paradójicos. El versículo 26 parece darnos permiso a enojarnos:
“Airaos, pero no pequéis...” pero solo cinco versículos después, en el versículo 31, nos dice: “quítense de
vosotros toda amargura, enojo, ira...” Entonces, ¿está bien enojarnos, o no? ¿Hay una manera en la cual
las dos cosas pueden estar correctas al mismo tiempo?
Una respuesta se encuentra en Eclesiastés 7:9: “No te apresures en tu espíritu a enojarte; porque el enojo
reposa en el seno de los necios.” Este versículo tiene algunas frases muy útiles en un momento de enojo:
a. no te apresures — respira. Un momento de espera te da tiempo a controlarte, pedir ayuda a Dios y
pensar.
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b. el enojo reposa -- El enojo surge por nuestros cuerpos como una alarma clamando: “¡Cuidado!
¡Peligro!” Libra adrenalina al cuerpo y nos motiva a acción. La energía que el cuerpo produce en
respuesta al enojo puede ser positiva o destructiva. Hay que hacer caso al enojo. Esta señal de
alarma tiene un propósito. Dejarlo adentro causa depresión, amargura o enfermedades. El enojo no
debe tomar residencia (reposar) en nuestros corazones.
c. el enojo reposa en el seno de los necios. El enojo no controlado es necio. Explotando afuera, daña
físicamente o emocionalmente a uno mismo o a otros. El enojo es pecado cuando nos controla.
Proverbios 29:22 dice “El hombre iracundo levanta contiendas, y el furioso muchas veces peca...”
• Proverbios 14:17 “El que fácilmente se enoja hará locuras...”
4. Algunas maneras de ayudar a poner el enojo bajo control:
Calmarse no resuelve el problema, pero ayuda a la persona para que pueda pensar mejor y actuar de una
manera positiva. La respuesta al problema del enojo es el dominio propio. El enojo es una reacción del cuerpo
a situaciones amenazantes. Si nos controla, el resultado es pecado. Controlado, la energía librada por el
cuerpo en un momento de enojo ayuda a uno a atacar problemas no a personas, buscar soluciones y bendecir
a otros.
Busca la ayuda de Dios. Salmo 37:7 “Guardar silencio ante Jehová, espera en él.” No responde a la situación
bajo el control del enojo.
No escojas como amigo a la persona que es controlado por el enojo. Proverbios 22:24-25 “No te entremetas
con el iracundo, ni te acompañes con el hombre de enojos, no sea que aprendas sus maneras y tomes lazo
para tu alma.” Deseamos ser buen ejemplo para nuestros amigos, pero si tus amigos tienen problemas con el
enojo y están infectándote con ese mal, es tiempo de buscarte nuevos amigos. Hay
algo de verdad en el dicho que dice: “Dígame con quien andas, y te digo quien eres”.
Controla tu lengua. Santiago 1:19-20 “Por esto, mis amados hermanos, todo hombre
sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse, porque la ira del hombre no
obra la justicia de Dios.” (Prov. 13:3; Col 3:8) Muchas veces al escuchar bien a la otra
persona, nos damos cuenta que no hay, en verdad, un motivo para el enojo.
Descarga algo de emoción, buscando una manera de hacerlo que no hace daño a otra
persona ni a sus pertenencias. Haz de antemano una lista de cosas positivas que te
ayudan a calmarte. (contar a 10, respirar profundo, buscar un lugar tranquilo, dormir,
correr.....) Descargar tu enojo no es la misma cosa como resolver el problema, pero
puede ayudarte a regresar a enfrentar el problema con más control. (Puede ser que pegando al perro te ayude
a descargar la emoción, pero esa no es la idea. Busca algo positivo que te ayudará a pensar con calma.)
Aplicación:
Usa la energía que sientes para atacar el problema de una manera positiva. Un pacificador busca un camino de
resolución donde parece que no hay uno. Describe en palabras lo que sientes. Escribe tus pensamientos y
sentimientos. Descubre lo que está causando el enojo — frustración, temor, dolor (¿Con qué o con quién estoy
enojado? ¿Por qué estoy enojado?) Piensa de una manera positiva de responder al problema. ¿Hay algo que
puede cambiar para mejorar las cosas y hacerte sentir mejor? Examina lo que te dicen las Escrituras, y examínate
a ti mismo. Busca consejo de alguien de confianza, lee libros que te ayuden. Empieza a orar específicamente
para la persona que es el enfoque de tu enojo. Hay muchas personas que han transformado su enojo en algo muy
positivo. Han llegado a ser campeones de causas buenas, han usado sus recursos para resolver problemas y
aliviar el sufrimiento.
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Querido(a) Maestro(a), Considerada por muchos de ser la mejor gimnasta de todos los tiempos, Nadia Comaneci, ganó 9 medallas en las olimpiadas de 1976 y 1980. Cinco de las medallas eran de oro. En una entrevista, ella dijo: “Trabajo duro lo ha hecho fácil. Eso es mi secreto. Es por eso que gano”. Michael Jordan, el súper-estrella ya retirado de baloncesto es un atleta dotado, pero su éxito fue acompañado de entrenamiento intenso y riguroso. Lo que es verdad en el campo de los deportes, es verdad en el campo de las relaciones. No aprendemos a ser pacificadores de un día al otro. Requiere esfuerzo y práctica para controlar las emociones y usarlas para hacer lo bueno en vez de vengarnos. Es necesario aprender a escuchar con el propósito de entender a la otra persona. No es natural dar la razón al otro en vez de siempre defenderse. Sabemos que tenemos la ayuda y bendición de Dios en la tarea de ser personas de paz, pero la Biblia dice claramente que el crecimiento espiritual requiere trabajo. En 2 Timoteo 2:1 Pablo anima a Timoteo: “esfuérzate en la gracia que es en Cristo Jesús.” Sí, gozamos de la gracia de Dios, y sí, la vida cristiana requiere esfuerzo. Para ayudar a tus estudiantes en el camino de paz, dales oportunidades de practicar los principios que estás enseñando. Si estás usando Creando una cultura de paz en la “clase de Biblia” por ejemplo, pon mucho empeño en aplicarla cuando hay un conflicto en la hora de enseñar la matemática. Enseña tus alumnos a ver que la paz es para todo aspecto de la vida. No es simplemente otra materia. En la lección #1 de esta sección “¿Qué es un conflicto?” tus alumnos llenaron algunos formularios acerca del conflicto. Estas páginas pueden servir de guía para dramas improvisadas o conversaciones de grupo. Como dijo Nadie Comaneci acerca de su éxito, es el trabajo duro de aplicar los principios que va a hacer más “fácil” el camino de paz.