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BREVE HISTORIA DE LA VIDA COTIDIANA

DE LOS PUEBLOS

DEL PRÓXIMO ORIENTE ANTIGUO

Historia de la vida cotidiana: volumen 1

Lucía Avial Chicharro

Colección: Breve Historiawww.brevehistoria.com

Título: Breve historia de la vida cotidiana de los pueblos del Próximo Oriente Antiguo. Historia de la vida cotidiana: volumen 1Autor: © Lucía Avial ChicharroDirector de la colección: Luis E. Íñigo Fernández

Copyright de la presente edición: © 2020 Ediciones Nowtilus, S.L. Camino de los Vinateros, 40, local 90, 28030 Madridwww.nowtilus.com

Elaboración de textos: Santos Rodríguez

Diseño y realización de cubierta: Universo Cultura y OcioImagen de portada: Composición a partir del relieve Caballero llevando a su caballo junto a un arroyo, c. 704-681 a. C. (alabastro de yeso) del período neoasirio. Museo de Arte Metropolitano de Nueva York

Cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública o transformación de esta obra solo puede ser realizada con la autori-zación de sus titulares, salvo excepción prevista por la ley. Diríjase a CEDRO (Centro Español de Derechos Reprográficos) si necesita foto-copiar o escanear algún fragmento de esta obra (www.conlicencia.com; 91 702 19 70 / 93 272 04 47).

ISBN edición impresa: 978-84-1305-125-3ISBN impresión bajo demanda: 978-84-1305-126-0ISBN edición digital: 978-84-1305-127-7Fecha de edición: noviembre 2020

Impreso en EspañaImprime: Grupo AkomaDepósito legal: M-25848-2020

A los dos amores de mi vida, Carla y Nacho. Y a mis padres, siempre.

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Índice

Introducción ........................................................ 15Fuentes históricas y arqueológicas ................... 16Geografía de Mesopotamia, Anatolia y el Levante sirio ............................... 17Breve introducción histórica ........................... 21

Capítulo 1. Breve excursus histórico ......................... 23Historia de Sumer y Akkad ............................. 23El origen de Babilonia, Asiria y Hatti .............. 30

Babilonia .................................................... 30Asiria .......................................................... 30Hatti .......................................................... 32

Desarrollo histórico de Babilonia, Asiria y Hatti .................................................. 35

Babilonia .................................................... 35Asiria .......................................................... 37Hatti .......................................................... 40Ebla ............................................................ 47

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Capítulo 2. La vida cotidiana en Sumer ............... 51El origen del urbanismo: las ciudades ........... 52La administración: instituciones públicas y Gobierno .................. 54La mujer, el hombre y el niño sumerio: la sociedad ........................ 57El origen de la agricultura: economía y comercio del mundo sumerio ...... 66El origen de la escritura y de las ciencias ........ 72El arte en el mundo sumerio .......................... 79La medicina en Sumer ................................... 80El calendario ................................................. 82La religión ..................................................... 83La noción de la muerte .................................. 97El Ejército y la guerra .................................... 100El ocio ........................................................... 105

Capítulo 3. La vida cotidiana en Akkad ................. 109La administración en el mundo acadio: instituciones públicas y ciudades .................... 110La mujer, el hombre y el niño acadio: la sociedad ........................... 112Economía y comercio del mundo acadio ........ 116La escritura y las ciencias ............................... 118Las artes en el mundo acadio ......................... 120La religión y los dioses ................................... 121El Ejército y la guerra .................................... 124

Capítulo 4. La vida cotidiana en Ebla .................. 129El urbanismo en Ebla .................................... 132La administración y las instituciones públicas .... 133La mujer, el hombre y el niño eblaíta: la sociedad .......................... 138Economía y comercio del mundo eblaíta ....... 140

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Breve historia de la vida cotidiana de los pueblos del Próximo Oriente Antiguo

El calendario en Ebla .................................... 141La escritura y las ciencias .............................. 142La religión y los dioses .................................. 144La noción de la muerte ................................. 146El Ejército .................................................... 148

Capítulo 5. La vida cotidiana en Babilonia ........... 151El urbanismo en Babilonia ........................... 151La Administración y las instituciones públicas ............................ 155La mujer, el hombre y el niño babilonio: la sociedad ..................... 159Economía y comercio del mundo babilonio ...................................... 163La escritura y la ciencia ................................. 167La medicina en Babilonia ............................. 167Las artes en Babilonia ................................... 169La religión y los dioses .................................. 172El Ejército ..................................................... 177El ocio .......................................................... 178

Capítulo 6. La vida cotidiana en el Imperio hitita ... 181Las ciudades ................................................. 183La Administración y las instituciones públicas ............................ 185La mujer, el hombre y el niño hitita: la sociedad ........................... 189 Economía y comercio del mundo hitita ........ 196La escritura ................................................... 198Las artes en el mundo hitita .......................... 199La medicina hitita ........................................ 201La religión y los dioses .................................. 202El mundo de la muerte ................................. 211El Ejército .................................................... 214

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Capítulo 7. La vida cotidiana en Asiria ................. 219El urbanismo asirio ....................................... 219La Administración y las instituciones públicas ............................... 222La mujer, el hombre y el niño asirio: la sociedad ........................... 226Economía y comercio del mundo asirio ........ 228La escritura y las ciencias .............................. 232Las artes en Asiria ......................................... 235La religión y los dioses .................................. 238La noción de la muerte ................................. 240El ejército ..................................................... 240

Capítulo 8. Breve excursus histórico .................. 249La problemática de los Pueblos del Mar ....... 249Ugarit .......................................................... 255Época neohitita ............................................ 257El Levante: los fenicios ................................. 258El Levante: los reinos de Israel y Judá ........... 259El Imperio persa ........................................... 261

Capítulo 9. La vida cotidiana en Ugarit, las ciudades fenicias e Israel ................................. 265

La vida cotidiana de Ugarit .......................... 266La vida cotidiana de los fenicios ................... 276La vida cotidiana de los reinos de Israel y Judá ... 283

Capítulo 10. La vida cotidiana en el Imperio persa ... 289Las ciudades persas ....................................... 290La Administración y las instituciones públicas ............................ 294La mujer, el hombre y el niño persa: la sociedad ........................... 297Economía y comercio del mundo persa ........ 299

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Introducción

Breve historia de la vida cotidiana de los pueblos del Próximo Oriente Antiguo trata de ser un acercamiento para todo aquel lector interesado en el día a día de estas culturas, tan diferentes entre sí, pero sumamente fasci-nantes. Precisamente por ser un acercamiento, se ha tratado de forma sucinta la historia y la cotidianidad de estos pueblos con el objetivo de fomentar la curio-sidad del lector para que, a través de nuestra bibliogra-fía, pueda complementar sus conocimientos sobre el Próximo Oriente Antiguo.

En esta región nos encontramos con las primeras cuatro grandes civilizaciones históricas, correspondien-tes a los territorios de Egipto, Mesopotamia, Fenicia y Palestina. Y, en cada una de estas zonas surgieron diferentes culturas que crecieron y avanzaron a lo largo de la historia, como ocurrió con Sumer, Akkad, Babilonia o Asiria en Mesopotamia, Ebla en Siria o

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Breve excursus histórico

HISTORIA DE SUMER Y AKKAD

A lo largo del iv milenio a. C., la civilización de El Obeid se vio sucedida por la cultura de Uruk (3800-3200 a. C.) y, a partir de este momento, comenzaron a surgir las características propias del mundo sumerio, es decir, la arquitectura monumental, el cilindro-sello, el trabajo del metal, la agricultura irrigada y la escritura. El período de la cultura de Uruk supuso un momento crucial para la evolución del Próximo Oriente Antiguo, ya que dio comienzo al Sumer histó-rico como tal. Esta etapa recibió su nombre gracias a Uruk, una ciudad situada en el curso bajo del Éufrates, cuyos rasgos culturales encontramos por todo el terri-torio de Mesopotamia y que fue considerada una de las más importantes de todo Sumer. Tras Uruk, encon-tramos la cultura de Yemdet Nasr (3100-2900 a. C.),

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La vida cotidiana en Sumer

Tras el breve recorrido histórico que hemos realizado a lo largo del capítulo anterior, la primera cultura cuya vida cotidiana conoceremos es la de Sumer, surgida sobre mediados o finales del iii milenio a. C. en el territorio de la Baja Mesopotamia, delimitado por los ríos Tigris y Éufrates. La cultura sumeria fue una de las primeras civilizaciones que aparecieron en el Próximo Oriente Antiguo, por lo que su influencia en la historia de esta región no dejó de estar presente, como iremos viendo durante nuestro viaje por este libro. Realizaremos este recorrido a través de los períodos históricos conocidos como Uruk (fechado sobre el 3300-3000 a. C.), el Dinástico Arcaico (momento en el que se difundió la cultura de Uruk por toda Mesopotamia) y el período de Ur III, pero omitiremos el momento en el que Sumer quedó bajo dominio de Akkad. Por tanto, conoceremos la vida cotidiana del mundo sumerio en

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de esta ciudad son el mejor ejemplo. El urbanismo de las ciudades era bastante simple, las calles eran estre-chas, muy sinuosas y no contaban con un trazado regular. Tampoco tenían sistemas de pavimentación o de drenaje, por lo cual la higiene debía ser mínima. Las casas se levantaban con adobes, con una sola planta dividida en varias habitaciones agrupadas en torno a un patio abierto. Sin embargo, las familias más acomo-dadas podían tener casas de dos plantas, en cuya parte baja había una sala de recepción, cocina, alojamientos para los sirvientes e, incluso, un pequeño altar domés-tico. En los tiempos más antiguos habitualmente se enterraba a los fallecidos bajo el suelo de las casas, pero muy pronto comenzaron a surgir necrópolis en las que se realizaron estos enterramientos.

Vista general de Uruk. Esta ciudad desempeñó un papel muy importante dentro de los orígenes de la civilización

sumeria, por lo que se convirtió en el hogar de personajes míticos como Gilgamesh. Fuente: Wikimmedia Commons.

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un número indeterminado de leyes, de las cuales unas 37 se conservan de manera parcial o total. Con todos estos artículos se trataba de legislar adecuadamente para la sociedad, estableciendo normas para numerosos aspectos de la vida cotidiana. Ambos ejemplos nos muestran lo importante que fue para los sumerios la justicia y la legislación, ejercidas por el monarca.

Código de Lipit-Ishtar. Este código legislativo es uno de los más antiguos conservados en Sumer. Fue elaborado por el monarca Lipit-Ishtar sobre el año 1860 a. C., y se componía de un prólogo, un epílogo y un número

indeterminado de artículos. Fuente: Wikimmedia Commons.

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Lista Real Sumeria (Ashmolean Museum). La Lista Real Sumeria, conservada en varios prismas de arcilla, nos muestra el nombre de todos los monarcas sumerios,

comenzando por la ciudad de Eridu. Fuente: Wikimmedia Commons.

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sistema de signos, dotados de valor fonético unido a su significado ideográfico originario. De esta forma, la escritura pasó a tener un marcado valor silábico que permitía escribir palabras sin tener en cuenta su primi-tivo significado conceptual, aunque un cierto número de conceptos continuaron escribiéndose de manera ideo-gráfica. Con el paso del tiempo, acabó prevaleciendo el valor silábico sobre el ideográfico. Y de esta forma, surgió la escritura cuneiforme, llamada así precisa-mente por el aspecto de cuña de sus trazos.

Tablilla con pictogramas protocuneiformes (Museo del Louvre), fechado en el iv milenio a. C. La escritura surgió de la necesidad de organizar la economía y la

administración. Por ello, surgió un sistema de registro de tipo pictográfico con determinados símbolos para reflejar productos y cantidades. Fuente: Wikimmedia Commons.

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La literatura sumeria nos ha transmitido también la figura de Gilgamesh, un monarca excepcional que había descendido directamente desde el cielo para gobernar la ciudad de Uruk. Se convirtió en un gobernante ejemplar y en un auténtico héroe nacional, con marcadas características divinas, cuyas aventuras se reflejaron en el denominado Poema de Gilgamesh. Dentro del relato, nos encontramos con nuestro protagonista, Gilgamesh, rey de Uruk e hijo del rey-sacerdote Lugalbanda y de la diosa Ninsun, por lo

Matrimonio de Inanna y Dumuzi. En el poema El viaje de Inanna a los infiernos, la diosa Inanna bajó al reino de los muertos, dirigido por Ereshkigal, con la idea de gobernar

allí también. Sin embargo, tras su muerte y posterior resurrección, fue sustituida por su marido Dumuzi, que ocupó su sitio en el inframundo. Fuente: Wikimmedia

Commons.

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modelar el ladrillo durante el día siguiendo una deter-minada liturgia para secarlo mientras pasaba la noche en el templo. Al día siguiente, se realizaba una solemne procesión hasta el templo y se rompía el molde del ladrillo con el objetivo de enseñarlo a continuación al pueblo. Una vez que se realizaba todo este ritual, el ladrillo se colocaba en el emplazamiento del futuro templo, que se comenzaba a construir. Podemos observar este ritual en la denominada Estela votiva de Ur-Nanshe, en el que vemos a este rey participando en la construcción del templo de Ningirsu en Lagash.

Estela votiva de Ur-Nanshe (Museo del Louvre). En esta representación, se encuentra el rey Ur-Nanshe participando

en la construcción del templo de Ningirsu (Lagash), un acto lleno de religiosidad. Fuente: Wikimmedia Commons.

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los primeros gobernantes de esta ciudad y que han sido interpretados como las primeras evidencias de la existencia de sacrificios humanos. La mayor parte de los cuerpos interpretados como sacrificios han aparecido dentro de los llamados pozos de la muerte, junto a ofrendas funerarias. Entre las víctimas se ha comprobado que predominaban las mujeres jóvenes y los ancianos, con poca presencia de niños pequeños u hombres adultos, lo que ha reforzado la hipótesis de los sacrificios humanos. Sin embargo, este tema es

Cráneo y ajuar funerario procedente del Cementerio Real de Ur. Durante las excavaciones del Cementerio Real de

Ur, el investigador Leonard Woolley encontró una serie de estructuras o pozos de la muerte, en las que creyó encontrar

las víctimas de una serie de sacrificios humanos.

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El impacto de la guerra no quedaba limitado únicamente al campo de batalla, también hay que considerar que las guerras afectaban a la vida y al trabajo de quienes no se encontraban directamente involucrados con el desarrollo bélico en sí. Mientras que quienes formaban parte de las tropas eran hombres adultos, los que se quedaban eran sobre todo las muje-res, los niños y los ancianos. Para este último grupo, la guerra acarreaba cambios drásticos en su día a día, y se veían obligados a redistribuir su esfuerzo laboral para llevar a cabo las tareas que los hombres habían dejado vacantes.

Estela de los Buitres (Museo del Louvre). Elaborada por Eannatum de Lagash (2455-2424 a. C.), nos muestra en la parte

superior a la infantería sumeria, mientras que en la inferior se presentaba la infantería ligera y los carros de combate.

Fuente: Wikimmedia Commons.

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Esta imagen contrasta enormemente con otra célebre escena del mismo poema, en el que Enkidu se civiliza gracias a las artes amatorias de la cortesana Shámkat. Por ello, la imagen de la prostituta debió de contar con una doble dicotomía, ya que el sexo se consideraba civilizador (no hay más que ver el cambio de Enkidu en el Poema de Gilgamesh), pero, a la vez, como algo sumamente impuro debido a las constantes relaciones con diversos hombres. Quizás precisamente gracias a sus características positivas, las leyes sume-rias reconocieron unos ciertos derechos a las prosti-tutas, como el poder recibir una especie de pensión alimenticia cuando tenían hijos con algún hombre. En este caso, y si la esposa legítima no había tenido

Juego Real de Ur (Museo Británico). Encontrado en el Cementerio Real de Ur, este juego consistía en un tablero

de madera, con fichas blancas y negras y unos dados. Fuente: Wikimmedia Commons.

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Representación de una diosa, posiblemente Ishtar o Inanna (Museo Británico). El panteón divino acadio mostró un

fuerte sincretismo entre sus propios dioses y los sumerios. Tal es el caso de Ishtar, equivalente a la Inanna sumeria,

convertida en diosa de la fertilidad, del amor y de la guerra. Fuente: Wikimmedia Commons.

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Estela de la victoria de Naram-Sin. Esta pieza supone la mejor forma de conocer al Ejército acadio y la figura del

rey Naram-Sin, representado a mayor tamaño que el resto de los personajes. Fuente: Wikimmedia Commons.

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La vida cotidiana en Ebla

La ciudad de Ebla fue una importante ciudad Estado situada en la Siria septentrional, que tuvo su máximo apogeo sobre el 3000 a. C. y los años 2400 y 2250 a. C. Actualmente, es conocida como Tell Mardikh y ha alcanzado fama mundial por los impresionantes archivos allí encontrados, con más de 20 000 tablillas escritas en sumerio y en eblaíta. Aunque la mayoría de estas tablillas trataban sobre asuntos económicos principalmente, otras tantas lo hacen sobre la vida cultural, económica y política, por lo cual se han convertido en nuestra mejor fuente para conocer el día a día de los eblaítas.

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LA ADMINISTRACIÓN Y LAS INSTITUCIONES PÚBLICAS

Parece que Ebla fue gobernada por una aristocracia de comerciantes, la cual elegía a uno de ellos para que ejerciese de monarca, por lo que la monarquía tenía un carácter electivo. Sin embargo, con el rey Ibrium y su hijo Ibbi-Sipish, este sistema electivo cambió al introducirse una monarquía absoluta de tipo heredi-tario. Los primeros monarcas eblaítas, denominados en, no poseían títulos especiales ni contaban con atributos destacables (como sí ocurría con los reyes mesopotámicos), quizás debido al carácter electivo

Vista actual de la ciudad de Ebla. Se encontraba dividida en una ciudad baja y otra alta o acrópolis. En la ciudad

baja se encontraban las residencias de la población, mientras que la acrópolis albergó los palacios y los templos.


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Gobernante de Ebla. Durante las primeras etapas de su historia, Ebla se encontraba gobernada por una monarquía electiva, cuyo carácter cambió tras la llegada al trono del

rey Ibrium. Fuente: Wikimmedia Commons.

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de todos porque se consideraba que era el represen-tante de las divinidades. Fue tal su vinculación con el mundo divino que, en los primeros tiempos de Ebla, se adoró a los monarcas tras su muerte, deificándolos. También estaban los sacerdotes, dedicados al culto y al cuidado de las divinidades de los templos donde oficiaban. Junto a ellos, también tenemos el pashistu o profeta, que adivinaba la voluntad de los dioses

Placa identificada con Ishtar y dedicada por el rey Ibbit-Lim. Entre los dioses eblaítas encontramos la presencia

de divinidades autóctonas y otras extranjeras, procedentes del mundo mesopotámico o hurrita.


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La vida cotidiana en Babilonia

La siguiente civilización a la que nos acercaremos es Babilonia, cuyo centro fue esta ciudad surgida en Mesopotamia que se convirtió en una de las más importantes de toda la Antigüedad. Como en el caso de los acadios, muchos aspectos de su día a día fueron similares a los de los sumerios, por lo que trataremos de no repetir para hacer énfasis en las novedades de su cultura.

EL URBANISMO EN BABILONIA

La principal ciudad de este período fue, obviamente, Babilonia. Su extraordinaria situación geográfica (situada en la ribera izquierda del río Éufrates) le permitía controlar toda la circulación fluvial, lo que garantizaba el acceso al sistema de canales ubicado

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en la llanura meridional. Babilonia contaba con una superficie total de casi mil hectáreas, aunque su entramado urbanístico ocupabas unas 375 hectáreas aproximadamente.

La principal fuente escrita para conocer la ciudad de Babilonia y su urbanismo es un grupo de cinco tablillas de arcilla conocida conocidas como Tintir. Este documento, conocido gracias a unas copias tardías del original del siglo xii a. C., contiene una descripción detallada del urbanismo babilónico, por lo que sabemos que la ciudad se encontraba rodeada por una doble muralla, una situada en la parte interior (llamada Imgur-Enlil o ‘El dios Enlil ha mostrado su favor’) y otra en la exterior (Nimit-Enlil o ‘Muralla de Enlil’). En estas murallas se abrían ocho puertas, conocidas como Zababa, Marduk, Ishtar, Enlil, del Rey, Adad y Shamash. La ciudad presentaba un plano cuadriculado con un entramado ortogonal, dividido

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en dos sectores que separaba el Éufrates (aunque se encontraban unidos gracias a un puente de seis pilares en forma de nave). En cuanto a las calles, se ha podido localizar la llamada Ay-ibur-sabû (‘El arrogante que no pase›), la vía procesional que partía de la Puerta de Ishtar y llegaba al barrio central o Eridu, tras pasar por delante del palacio real.

Babilonia tuvo tres complejos palaciegos, al menos durante el reinado de Nabucodonosor II. Estos complejos fueron el palacio sur, ubicado dentro del muro Imgur-Enlil, el gran palacio y el palacio de verano, situado a unos dos kilómetros de la ciudad y protegido por el muro exterior que rodeaba Babilonia.

El espacio reservado para el culto era bastante considerable, puesto que la ciudad contaba con 43 templos principales, a los que se les sumaba diversas capillas y altares de pequeño tamaño. El auténtico corazón religioso de Babilonia se situaba en el barrio

Vista del actual yacimiento de Babilonia. Situada en el margen izquierdo del Éufrates, controlaba una superficie

de casi mil hectáreas, de las que 375 se encontraban urbanizadas. Fuente: Wikimmedia Commons.

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de Eridu, ya que allí estaban los principales santuarios, Esagil y Etemenanki. El Esagil era el templo dedicado al dios Marduk, principal divinidad babilónica, mien-tras que el Etemenanki era el gran zigurat de la ciudad, levantado en una gran explanada rectangular. Este edificio es el que ha pasado a la historia con el nombre de Torre de Babel, sin embargo, no fue el único. El primer zigurat construido en Babilonia se remonta al reinado de Hammurabi, quien heredó las tradiciones constructivas de los sumerios.

Murallas de Babilonia. La ciudad se encontraba rodeada por una doble muralla (interior y exterior), en la que

se abrían ocho puertas de acceso. Fuente: Wikimmedia Commons.

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Kudurru de Enlil-nadin-apli (1103-1100 a. C.). Los kudurrus fueron monumentos creados para delimitar las fronteras, a los que se les grababa una inscripción,

acompañada de símbolos y signos, con carácter protector.

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Código de Hammurabi (Museo del Louvre). La estela de Hammurabi, principal código de leyes de Babilonia, fue encontrada en Susa, ya que el rey de Elam Shutruk-

Nakhunte la llevó a su ciudad como botín de guerra en el año 1200 antes de Cristo.

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Puerta de Ishtar (Museo de Pérgamo de Berlín). Construida en el año 575 a. C. por el rey Nabucodonosor II, la Puerta de Ishtar fue uno de los accesos a la ciudad de Babilonia.

Fotografías cortesía de Catherine Roesch e Ignacio Carracedo Justo.

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La vida cotidiana en el Imperio hitita

El Imperio hitita se desarrolló principalmente en Anatolia, correspondiente al territorio de la actual Turquía. Su historia se basaba en la alternancia de diver-sos períodos de poder y control con etapas de decadencia, lo que ha permitido que pueda dividirse entre Reino Antiguo (1650-1400 a. C.), Reino Medio (que abarca gran parte del siglo xv a. C.) y Reino Nuevo (1400-1200 a. C.). Dentro de esta periodización podemos encajar también la Anatolia prehitita (antes del Reino Antiguo y que comprendía el período de las colonias asirias y los reinados de Pithana y Anitta en Kussara,) así como el período de decadencia final que se produjo tras la destrucción de Hattusas y la dispersión de los hititas.

La zona nuclear del Imperio hitita (llamado País de Hatti) se hallaba en la zona del río Kizil Irmak, donde se ubicaba la capital Hattusas. Por la zona sur

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limitaba con el reino de Kizzuwadna y al norte con las tribus gasgas. En cambio, por el oeste tenía a Arzawa y al este el reino de Mitanni. En sus momentos de máxima expansión, los hititas llegaron hasta la zona de Palestina, donde limitaban con Egipto y con el Imperio asirio, y luego consiguieron incorporar la isla de Chipre a su dominio. Los investigadores actua-les han diferenciado los territorios que estaban bajo control directo de Hattusas de los que estaban más lejos, pertenecientes a entidades políticas conquista-das, teóricamente sujetas al poder central, pero inte-gradas de un modo diferente.

Los hititas alcanzaron gran perfección técnica y cultural en muchos aspectos de su vida cotidiana, como la aplicación de la escritura cuneiforme a su idioma, el

Daga de bronce del rey Anitta hallada en Kultepe (Museo de las Civilizaciones Anatólicas, Ankara). El rey Anitta,

gobernante de Kussara, fue considerado ya por los propios hititas como uno de los fundadores de su Imperio. Fuente:

Wikimmedia Commons.

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torres y poternas con bóvedas de piedra, que se utili-zaban como vía de escape. Las puertas fueron también un elemento muy importante, puesto que mostraban los signos de identidad de la ciudad. En Hattusas se han conservado la Puerta del Rey, la del León y la de la Esfinge, cuya parte exterior estaba flanqueada por figuras monumentales que permitían mostrar el poder de los reyes y dioses hititas, los cuales protegían las propias puertas con su presencia.

Puerta del León, de Hattusas. La Puerta del León era uno de los accesos monumentales a Hattusas. Se encontraba

flanqueada por dos leones, situados a los laterales del arco de la puerta, quienes protegían la entrada a la ciudad.


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tallados con una excelente técnica y con la que se trataba de transmitir una cierta ideología imperial. También dentro de la escultura fueron muy importantes los bajorrelieves, en su mayoría de gran tamaño y esculpidos en lugares relevantes, como los santuarios o templos.

En muchos monumentos del arte hitita encon-tramos la representación de divinidades, entre las que destacaba el dios de la tormenta, acompañado del rey y de los principales dignatarios, mostrando el mundo simbólico hitita. El mejor ejemplo es el santuario rupestre de Yazilikaya, cercano a Hattusas. Este templo contaba con dos patios que separaban los principales edificios. En la cámara A encontramos dos procesiones de dioses, presididos por los dioses Teshub y Khebat, mientras que en la cámara B, considerada

Santuario de Yazilikaya, representación de los dioses del inframundo. En este santuario rupestre, vinculado con la figura del rey Tudhaliya IV, se encontraron una serie de interesantes representaciones grabadas en la roca, en las

que figuran los principales dioses del mundo hitita. Fuente: Wikimmedia Commons.

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configurado y perduró hasta la época neohitita. En su cúspide, encontramos a la diosa del Sol, llamada Ištanu, y al dios de las tormentas o Tarhunt (también conocido como Teshub), que formaban la principal pareja divina y ejercían de soberanos de todas las divinidades. Entre los hijos de esta pareja encontramos a Tappinu, Telepinu (dios de la agricultura y personificación de los cultivos), Nerik, Inara y Zip-landa. Otros dioses importantes fueron Pirwa, Hašammili, Kamrušepa, Kašku (el dios de la luna) y Kuzanišu.

La mayor parte de la información que tenemos sobre los dioses procede de los textos mitológicos. Entre ellos, tenemos a los mugawar, textos insertados dentro de rituales mágicos con los que se trataba de evocar a desaparecidas deidades, las cuales contribuían a la fertilidad del mundo. También destacaba la historia de la lucha entre el dios de las tormentas y el dragón Illuyanka, que se relacionaba con el antiguo festival

El dios de la tormenta, Tarhunt, y su hijo Sarruma matando al dragón Illuyanka (Museo de las Civilizaciones

Anatolias, Ankara). Este relieve muestra una escena del mito hitita de Tarhunt, quien debe acabar con Illuyanka, un monstruo en forma de dragón. Cada festival de Año

Nuevo, se conmemoraba la victoria de Tarhunt narrándose su historia. Fuente: Wikimmedia Commons.

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Vaso A de İnandıktepe-Hüseyindede. En las imágenes de este vaso cerámica encontramos la imagen de un templo y

un altar (derecha) y una mujer con incensario, acompañada de dos sacerdotes (izquierda). Fuente: Wikimmedia

Commons.

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realizaba: se elaboraban dos estatuillas, una de arcilla (representando a los hititas) y otra de madera (corres-pondiente a los enemigos):

Hemos hecho dos estatuillas, una de cedro y otra de arcilla. En la de cedro hemos puesto el nombre del enemigo de Su Majestad, y en la de arcilla hemos puesto el nombre de Hismi-Sarrumma.

Relaciones internacionales en el Próximo Oriente antiguo, 1600-1100 a. C

Liverani

Carro de guerra hitita (Museo de las Civilizaciones Anatolias, Ankara). El Ejército hitita se encontraba

formado por unidades de infantería y de carros ligeros de guerra que formaron el grueso de tropas y permitieron

extender sus conquistas territoriales. Fuente: Wikimmedia Commons.

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La vida cotidiana en Asiria

La ciudad de Assur, que dio origen a Asiria, había sido desde comienzos del ii milenio a. C. una próspera ciudad Estado del valle del Tigris que se situaba en un importante cruce de las rutas de caravanas que conec-taban el Cercano Oriente de este a oeste y de norte a sur. Desde esta ciudad comenzó el Imperio asirio, cuyo día a día vamos a conocer a continuación.

EL URBANISMO ASIRIO

La corte se encontraba instalada en los palacios de las capi-tales principales (Assur, Nínive, Khala o Korshabad), por lo que su presencia las convertía en la sede del Gobierno. La mejor forma de conocer el urbanismo asirio es acercándonos a cualquiera de estas ciudades.

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del envío de soldados y excedentes a la capital. De él, dependían las autoridades municipales: el alcalde (asistido por los notables de su ciudad), el inspector de pueblos (intermediario entre el municipio y la provincia) y el inspector de guarniciones. Los restantes territorios contaban con una serie de funcionarios de confianza del rey (los qepu) y con visires, encargados ambos de la administración de esta parte del imperio. Todas estas zonas formaban parte de la Mât Aššur, el Imperio asirio, a la que se sumaban los reinos-clientes, que conservaban cierta autonomía tras su

Relieve de Assurnasirpal II con un oficial (Museo Británico). Los reyes asirios concentraban en su persona todos los

poderes estatales, aunque para ejercer su dominio contaba con un complejo aparato administrativo.

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reunido en asociaciones, se dedicaba al intercambio de productos.

La llegada de las mercancías y las caravanas comerciales a una ciudad asiria se regía a través de una serie de obligaciones, marcadas por el propio Estado. Nada más llegar a la ciudad debían acudir al palacio local, en el que se inspeccionaban las mercancías para cobrar las tasas correspondientes. Una vez cumplido este trámite, se dirigían al mercado, donde vendían los productos, ,los cuales eran muy diversos, ya que llegaban desde materias primas o manufacturadas hasta esclavos, caballos, ganado o metales preciosos.

Junto al comercio, otro factor que favoreció la prosperidad de la economía asiria fue la creación de un sistema normalizado de metales preciosos o de piedra,

Peso en forma de pato, elaborado con basalto (Museo Británico). Esta figura representa a un pato dormido con una

inscripción en su lomo donde se informa de su peso (unas 30 minas o 15 kilogramos), y fue utilizado como peso en

los intercambios comerciales. Fotografía cortesía de Ignacio Carracedo Justo.

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Assurbanipal, ubicada en Nínive. Aunque recibió el nombre de este monarca, lo cierto es que Assurbanipal no fue su fundador, sino que debemos dicha iniciativa a Sargón II. La biblioteca fue descubierta a mediados del siglo xix, entre las ruinas del palacio real. Se encon-traron unos 30 000 fragmentos de tablillas, las cuales contenían todo el saber literario y científico de la época. Entre ellas, apareció el famoso Poema de Gilgamesh (que al lector le resultará familiar) y otros muchos textos, entre los que abundaban los relacionados con el mundo sobrenatural, el estudio de los fenómenos meteorológi-cos y astronómicos, himnos, oraciones, crónicas y listas de reyes y textos literarios.

Sello cilíndrico del rey Asarhaddón (Museo Británico). Aunque los textos encontramos en Asiria, transcribían la

lengua asiria, utilizaron la escritura cuneiforme, aparecida en el mundo sumerio. Fotografía cortesía de Ignacio Carracedo

Justo.

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Si algo destacó en esta etapa, fueron los relieves que adornaban los palacios y los templos. Fue Assurnasirpal II quien decidió cambiar la tradicional decoración pictórica de los antiguos palacios por una serie de relieves en los que se mostraba la vida cotidiana. Con ello, puso las bases técnicas, temáticas y estilísticas del arte próximo-oriental de los siguientes siglos. De esta forma, a partir de este período se desarrolló todo un amplio repertorio de imágenes, de tipo realista y descriptivo que fueron evolucionando poco a poco. Si tuviésemos que destacar una obra de este momento, La caza de los leones sería el mejor exponente. En esta pieza, vemos cómo al artista no le interesaba solo la figura del rey, sino la del conjunto, por ello destacaba los leones, cuyos más mínimos detalles muestran una naturalidad única.

La mayor parte de los cilindros-sello realizados en este período contaban con formas alargadas y

Leona herida, palacio de Nínive. Esta representación nos muestra a una leona herida con una flecha clavada en la

columna vertebral que le impide incorporarse. Por sus heridas (vemos como incluso arrastra sus patas traseras), ruge de

impotencia.

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principal elemento ofensivo y de desplazamiento del Ejército asirio. Los primeros modelos que se usaron fueron muy similares a los hititas y contaban con unos 6 o 8 radios en cada rueda. A ellos se enganchaban 2 o 3 caballos, en cuyo caso, el central actuaba como guía.

El rey Assurnasirpal II fue el primero que intro-dujo unidades de caballería entre sus tropas, que no tardaron en sustituir a los carros. No cabe duda de que, aparte de ser una medida táctica, también fue una medida económica, ya que los carros necesita-ban varios caballos para poder funcionar, además del gasto de la construcción del vehículo. Al principio, los caballeros asirios se equipaban con armadura, lanza,

Relieve del palacio norte de Nínive (Museo Británico). La caballería sustituyó a los carros guerras durante el reinado del monarca Assurnasirpal II, una medida de carácter económico,

ya que ahorraba los costes de la construcción del vehículo. Fotografía cortesía de Ignacio Carracedo Justo.

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preparados para actuar ante cualquier problema bélico que les surgiese.

El Ejército asirio presentaba habitualmente la misma distribución cuando comenzaba la batalla, la cual consistía en que los honderos y los arqueros conformaban la primera línea con el objetivo de diez-mar las tropas enemigas. A continuación, los carros pesados hostigaban a los enemigos desde todas las direcciones posibles. Con el apoyo de los arqueros, la infantería entraba en juego y terminaba de masacrar a los posibles supervivientes. Acompañándolos, estaban los soldados portaestandartes. Los estandartes milita-res asirios son conocidos actualmente a través de los

Relieve del palacio norte de Nínive (Museo Británico). En esta escena, se puede observar el palacio de la ciudad de

Hamanu en llamas, mientras los soldados asirios aprovechan su victoria para saquearlo. Fotografía cortesía de Ignacio

Carracedo Justo.

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Breve excursus histórico

LA PROBLEMÁTICA DE LOS PUEBLOS DEL MAR

La llegada de los Pueblos del Mar al Mediterráneo oriental implicó un importante cambio dentro de las fuerzas políticas de esta región, dado que trajo una serie de cambios radicales en su geopolítica que condicionaron el desarrollo de las diversas potencias próximo-orientales. Como todo fenómeno histórico, contaron con unos precedentes vinculados con la pira-tería en la Edad del Bronce.

Las amenazas marítimas a las costas fueron una amenaza significativa y constante a lo largo de toda la Edad del Bronce. Por ello, no es extraño encontrar ya a unos precursores de los Pueblos del Mar reflejados en la documentación de las cartas de Amarna y en los archivos hititas, textos que narraban las diversas incur-siones costeras que se producían en sus territorios. La

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La vida cotidiana en Ugarit, las ciudades fenicias e Israel

La zona de Siria-Palestina es una extensa región que cubre la franja costera mediterránea oriental y las tierras interiores que unen la costa con el norte de Mesopotamia. Esta región tuvo un gran protagonismo dentro del desarrollo de las primeras sociedades agrícolas y urbanas, lo que proporcionó una activa documen-tación ya desde finales del iii milenio a. C. En ese período, la ciudad de Ebla tuvo su máximo apogeo y convivió con los poderosos Estados que ya se han mencionado. Con el paso del tiempo, en este mismo lugar se desarrollaron una serie de ciudades Estado o de reinos sumamente importantes. A lo largo de estas páginas, nos centraremos en Ugarit, las ciudades feni-cias y los reinos de Israel y Judá como ejemplos.

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protofenicio). Constituye el primer ejemplo de escri-tura alfabética conocida, datada entre los siglos xiv y xiii a. C. La mayor parte de los textos conservados, escritos en tablillas de barro, eran de tipo administra-tivo, si bien también existían de contenido jurídico, tratados internaciones, cartas y textos religiosos, que reflejaron muchos de los mitos y de los cultos de Ugarit.

Entre los años 1370 y 1350 a. C., el rey Niqmaddu decidió construir un archivo donde se recogiesen los textos más importantes de la tradición mitológica y cultural de la zona. El lugar elegido fue la zona alta de Ugarit, en el edificio que los arqueólogos han llamado Biblioteca del Gran Sacerdote, situado entre los templos de Baal y Dagán. Sin embargo, no

Vista del Estado actual de Ugarit. Situada en la costa mediterránea oriental, Ugarit fue una de las ciudades más

importantes de la Edad del Bronce debido a que controlaba la mayor parte del comercio del Próximo Oriente Antiguo.


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Estela de Baal (Museo del Louvre). Baal fue uno de los principales dioses de Ugarit, por lo que protagoniza la

mayor parte de los mitos conservados. Fuente: Wikimmedia Commons.

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elemento, al que se le unía la roda y el codaste para, a continuación, unirse a cada costado las tracas de aparadura hasta crearse la forma del propio casco. Existían diferentes tipos de barcos, desde el mercante hasta el de guerra, por lo que sus características podían variar. Los barcos de guerra necesitaban de velocidad, sin tener que depender del viento, por eso usaban los remos. De esta forma, eran embarcaciones largas, estrechas y de poco calado. El barco mercante tenía como objetivo el transporte de mercancías y, para ello, utilizaba principalmente la propulsión de vela, mientras que los remos se dejaban para maniobras difíciles o momentos de peligro. La tripulación de

Bajorrelieve de un barco fenicio, Sidón. El comercio marítimo fue muy importante para el mundo fenicio, por lo que se invirtieron grandes cantidades en la construcción

de barcos, controlada por el Estado o las principales familias nobles.

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con Heracles. Su nombre significaba literalmente ‘rey de la ciudad’, denominación que aludía a su estrecha relación con Tiro, entendida la ciudad por antono-masia. Un elemento fundamental dentro del culto de Melkart era la fiesta periódica en su honor que las fuentes griegas definían como egergis, un rito público y solemne celebrado por el propio rey. Parece que en esta fiesta se conmemoraba una experiencia mítica de muerte o desaparición de un protagonista divino,

Relieve fenicio (Museo Británico). Este relieve muestra a una esfinge alada, con rostro humano, una figura mitológica sincrética que muestra los diversos contactos de los fenicios con Egipto y otros pueblos próximo-orientales. Fotografía

cortesía de Ignacio Carracedo Justo.

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Mapa con los reinos de Israel y Judá hacia el año 830 a. C. Fuente: Wikimmedia Commons.

sociedad, por lo que el consejo que formaban dentro de las ciudades comenzó a carecer de relevancia política. La tribu, sin llegar a desaparecer, convivía con el clan, que estaba establecido en las diferentes aldeas, mientras que los altos dignatarios creaban una nueva aristo-cracia, compuesta por los zequenim (ancianos), sarim (jefes), nedibim (notables) y horim (hombres libres).

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usados como soporte de cartas, actas, listas…, fecha-dos entre los siglos viii y vii antes de Cristo.

La caída de Jerusalén, tomada en el 587 a. C. por Nabucodonosor II, rey de Babilonia, puso fin al hebreo como lengua administrativa y política de un Estado libre, por lo que Judá se convirtió en una provincia babilónica.

Crónicas de Nabucodonosor II. En esta crónica se reflejaban los primeros años del reinado de Nabucodonosor II, junto

con la narración de la conquista de Jerusalén.

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La vida cotidiana en el Imperio persa

El Imperio persa se desarrolló entre el 550 a. C., cuando fue fundado por Ciro el Grande, hasta el 636 d. C., momento en que la dinastía sasánida cayó. En cuanto al espacio geográfico, el Imperio persa aqueménida llegó a tener sus fronteras en Egipto y Grecia hacia el oeste y en el río Indo hacia el este. Sin duda alguna, son limites cronológicos y geográficos muy amplios para este libro, pero trataremos de aportar al lector una idea básica acerca del desarrollo de la vida coti-diana dentro del mundo persa, especialmente en época aqueménida, dejando apartada la sasánida, aunque trataremos de incluir a los medos, como precursores del imperio.

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LAS CIUDADES PERSAS

La corte persa se encontraba en movimiento constante a lo largo del año, por lo que los reyes se dedica-ron a embellecer todas sus capitales. De esta forma, vemos cómo la corte real se encontraba en otoño y en invierno en Babilonia, en verano en Ecbatana y en prima-vera en Susa, aunque el tiempo de descanso se pasaba en Pasargada y Persépolis. Por ello, la mejor forma de conocer el urbanismo es a través de sus capitales.

Durante el reinado de Ciro II, en el 547 a. C. dio comienzo la construcción de la ciudad de Pasargada, capital persa situada en la zona norte del territorio, en el valle del río Pulvar. La ciudad se organizaba en torno a un gran jardín de forma rectangular, rodeado

Mapa con el área de aparición del Imperio persa y su momento de máxima expansión. El Imperio persa fue uno de los más grandes del mundo antiguo, dado que alcanzaron el

Indo, Grecia y Egipto.

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por varios edificios de piedra y con un buen número de canales de irrigación. En la zona norte se levantó un pala-cio con un espacio central ocupado por treinta columnas y dos pórticos laterales columnados, y donde se encon-tró la base del trono real. Al suroeste, se encontraba otro palacio que era considerado el lugar donde se celebraban las ceremonias de la corte y las audiencias formales. En los distritos de la ciudad se conservaba uno de los edifi-cios donde se celebraban los rituales de coronación de los monarcas persas, además de la tumba de Ciro II. En una de las entradas situadas al sur de la ciudad se descubrió el relieve más conocido del mundo persa, el llamado Genio de Pasargada, que aparecía alado como un demonio asirio, vestido al estilo elamita y coronado como un faraón.

Aunque Pasargada se convirtió en un importante centro residencial, la construcción de Persépolis por parte de Darío I el Grande relegó sus funciones a las meramente ceremoniales. Persépolis, la nueva ciudad,

Vista de la ciudadela de Pasargada. Construida durante el reinado de Ciro II, Pasargada actuó como capital de Darío II. Sin embargo, la posterior construcción de Persépolis la relegó a funciones ceremoniales. Fuente: Wikimmedia Commons.

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sumamente ágiles y veloces. En el momento en que la infantería enemiga atacaba a la caballería persa, esta se replegaba y daba paso a su infantería ligera, que trataba de rechazarla con jabalinas, hondas y arcos.

Una de las razones de la superioridad persa fue el uso de las tropas a caballo y de los arqueros. Cuando Jerjes I, durante la segunda guerra médica, organizó un desfile de su ejército, Heródoto contó que disponía de 80 000 jinetes, divididos en escuadrones. El escritor griego hizo referencia también a dos cuerpos de élite, formados por 1000 unidades cada uno, dedicados posiblemente al choque de tropas. A estas se sumaban las Inmortales, las cuales eran regimientos de élite que

Detalle de Darío I en el mosaico de la batalla de Issos (Museo Arqueológico de Nápoles). Aunque el Ejército persa fue uno de los más importantes de la Antigüedad, en el año 333 a. C.

fueron derrotados por las tropas del macedonio Alejandro Magno. Fotografía cortesía de Ignacio Carracedo Justo.

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Bibliografía

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bh vida cotid proximo oriente - nowtilus.com

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