areito 11 2014

8
Areíto Zona de la Cultura y de las ideas www.hoy.com.do Editor: Bavegado Diseño: Carla González SÁBADO 11.01.2014 TRUJILLO APRENDIÓ A espiar con los gringos Página 6 El funesto imperio mundial de las corporaciones Pág 2 Robert Dandarov trascendencia y nostalgia Durante nuestra estadía navideña en New York nos reencontrarnos con Dandarov, pintor contemporáneo de Macedonia, en su taller de Brooklyn. Conocíamos su obra desde su primera estadía aquí hace unos 15 años.Pá g i n a 7 En el corazón del herrumbre Despertar de nuevo Mi ilusión del vuelo de regreso se había cumplido, desde mi ventanilla del avión en plan de aterrizaje miraba una tenue llovizna que deshacía el arco iris, en mis tibias manos, atesoraba Ciudad Colonial / Santo Domingo. Pá g i n a 8 Complementariedad de los conocimientos La primera vez que fui a su consulta me recordó que nos habíamos criado en el mismo barrio, el llamado Pantalón en nuestro Santiago natal. La empatía fue mutua. Pá g i n a 4 Richard Wilkinson

Upload: periodico-hoy

Post on 29-Mar-2016

222 views

Category:

Documents


0 download

DESCRIPTION

Areíto sábado 11 de enero, 2013

TRANSCRIPT

Page 1: Areito 11 2014

A re í t o Zona de laCultura y de

las ideas

w w w. h oy.co m .d oEditor: BavegadoDiseño: Carla GonzálezS Á BA D O 11.01 .2 014

TRUJILLO APRENDIÓA espiar con los gringos Página 6

El funesto imperio mundialde las corporaciones Pág 2

Robert Dandarovtrascendencia y nostalgia

Durante nuestra estadíanavideña en New Yorknos reencontrarnos conDandarov, pintorcontemporáneo deMacedonia, en su tallerde Brooklyn. Conocíamossu obra desde suprimera estadía aquíhace unos 15 años.Pá g i n a 7

En el corazón del herrumbre

Despertar de nuevoMi ilusión del vuelo deregreso se habíacumplido, desde miventanilla del avión enplan de aterrizaje mirabauna tenue llovizna quedeshacía el arco iris, enmis tibias manos,atesoraba Ciudad Colonial/ Santo Domingo. Pá g i n a 8

Co m p l e m e nta ri ed a dde los conocimientosLa primera vez quefui a su consulta merecordó que noshabíamos criado en elmismo barrio, elllamado Pantalón ennuestro Santiagonatal. La empatía fuemutua.Pá g i n a 4

Richard Wilkinson

Page 2: Areito 11 2014

2 Sábado 11 de e n e rode 2 014H OY A RE Í TO

Zona

Are

itoZo

na A

reíto

Jorge Luis Borges (escritor argentino)Somos nuestra memoria, somos ese quimérico museode formas inconstantes, ese montón de espejos rotos

LI B RO S

LA GUÍA

MASA CRÍTICA

Este libro tiene como subtítulo“Memorias del PrimerSemanario Internacional de laCrítica Literaria en RepúblicaD o m i n i ca n a”, celebrado enfebrero del 2012, con losauspicios del Ministerio deCultura. El libro abre con laspalabras de apertura delSeminario, a cargo del conocidoliterato y gestor culturalBasilio Belliard. Este discursoes seguido por 19 ponenciaspresentadas por conocidosescritores y críticos literarios.El libro tiene 288 páginas._ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _

EL PECADO ORIGINAL DELSISTEMA DOMINICANO DESEGURIDAD SOCIAL EN SALUD

Bernardo Matías, el autor de estelibro, conoce el monstruo pordentro porque ha vivido en susentrañas. Es el gerente dePlanificación y Evaluación deGestión de Senasa. Además, es unveterano investigador social yescritor de libros. Este texto, de 98páginas, es, en palabras delprologuista Jefrey Lizardo,especialista en economía de laseguridad social dominicana, “eltexto más crítico, valiente y valiososobre la reforma de la seguridadsocial en salud del país”. Es, por lotanto, una lectura obligada paratodos los actores, como se diceahora, que tienen que ver con unade las reformas que máscontroversias ha generado en el paísen los últimos años. Al final del libroMatías ofrece ocho conclusiones quemejorarían el sistema._ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _

PEDRO EL CRUEL

Este es un hermoso libro derelatos, 18 en total, alrededor dela figura de Pedro El Cruel. Historiasque pasaron de la literatura orala la literatura escrita. Su autor,Rafael Peralta Romero, es unveterano periodista, profesoruniversitario y escritor. Este es sulibro número doce, entrenovelas, cuentos, relatos,historias infantiles y poesías.“Pedro El Cruel” tiene 111 páginasque se leen de un tirón.

LOS ESPEJOS DE DUARTE

Este es un libro para el deleiteintelectual. Lo escribió el sacerdotejesuita Pablo Mella, teólogo yprofesor universitario. Esta obra es,en realidad, un análisis decontenido que, desde unametodología específica, analiza demanera crítica las principalesimágenes que se han construidode Juan Pablo Duarte. El libro tiene439 páginas y está prologado porRaymundo González, conocidohistoriador y ensayista.

EL RUGIDO DEL LEÓN. LOSEXCESOS DEL PODER

Esta es la cuarta edición dellibro más crítico que se hapublicado sobre el ejercicio delpoder de Leonel Fernández. Suautor es el conocido periodista yescritor Miguel Guerrero. Unaobra que se ha vendido comopan caliente. Esta versióncontiene un texto del doctorPedro Catrain y otro delintelectual boricua NéstorD u p rey.

El funesto imperio mundialde las corporaciones

L os buenos deseos de un añofeliz son rituales. No pasande ser simples deseos, puesno consiguen cambiar el

curso del mundo donde los super-poderosos siguen su estrategia dedominación global. Sobre esto ne-cesitamos pensar y hasta rezar,pues las consecuencias económi-cas, sociales, culturales, espiritua-les y para el futuro de la especie y dela naturaleza pueden ser nefastas.

Muchos como J. Stiglitz y P. Krug-man esperaban que el legado de lacrisis de 2008 sería un gran debatesobre qué tipo de sociedad quere-mos construir. Se equivocaron demedio a medio. La discusión no sedio. Al contrario, la lógica que pro-vocó la crisis ha sido retomada conmás furor. Richard Wilkinson, unode los mayores especialistas sobre eltema desigualdad, estuvo más aten-to y dijo hace ya tiempo en una en-trevista al periódico Die Zeit de Ale-mania: “la pregunta fundamental esésta: ¿queremos o no queremosrealmente vivir según el principio deque el más fuerte se apropia de casitodo y el más débil se queda atrás?

Los super-ricos y super-podero-sos decidieron que quieren vivir se-gún el principio darwinista del másfuerte, y que los más débiles seaguanten. Pero comenta Wilkin-son: «creo que todos tenemos ne-cesidad de mayor cooperación yreciprocidad, pues la personas de-sean una mayor igualdad social».Este deseo es negado intenciona-damente por esos epulones.

Por lo general, la lógica capitalistaes feroz: una empresa se come a otra(eufemísticamente se dice que se fu-sionaron). Cuando se llega a un pun-to en que sólo quedan algunas gran-des, cambian de lógica: en vez deguerrear, hacen entre sí una alianzade lobos y se comportan mutuamen-te como corderos. Así articuladas de-tentan más poder, acumulan conmás seguridad para sí y para sus ac-cionistas, sin tener en cuenta paranada el bien de la sociedad.

La influencia política y econó-mica que ejercen sobre los gobier-nos, la mayoría de ellos mucho másdébiles que ellas, es extremada-mente coercitiva, interfiriendo enel precio de las commodities, en lareducción de las inversiones socia-les, en la salud, educación, trans-porte y seguridad. Los miles de per-sonas que ocupan las calles en elmundo y en Brasil intuyeron esadominación de un nuevo tipo deimperio, cuyo lema es: «la avariciaes buena» (greed is good) y «devo-remos lo que podamos devorar».

Hay excelentes estudios sobre ladominación del mundo por partede las grandes corporaciones mul-

tilaterales. Es conocido el de DavidKorten Cuando las corporacionesrigen el mundo (When the Corpo-rations rule the World). Pero hacíafalta un estudio de síntesis, y ésteha sido realizado por la Escuela Po-litécnica Federal Suiza (ETH), enZurich, en 2011, que se cuenta en-tre los más respetados centros deinvestigación, compitiendo con elMIT. El documento ha implicado agrandes nombres, es corto, no másde 10 páginas, y otras 26 sobre sumetodología, para mostrar la totaltransparencia de los resultados. Hasido resumido por el Prof. de eco-nomía de la PUC-SP Ladislau Do-wbor en su página web (http://do-wbor.org). Nos basamos en él.

De entre los 30 millones de cor-poraciones existentes, el ETH se-leccionó 43 mil para estudiar mejorsu lógica de funcionamiento. El es-quema simplificado se articula así:hay un pequeño núcleo financierocentral que tiene dos lados: de unlado están las corporaciones quecomponen el núcleo y del otro,aquellas que son controladas porél. Tal articulación crea una red decontrol corporativo global. Ese pe-queño núcleo (core) constituyeuna super-entidad (super entity).De él emanan los controles en red,lo que facilita la reducción de loscostos, la protección de los riesgos,el aumento de la confianza y, lo quees principal, la definición de las lí-neas de la economía global que de-ben ser fortalecidas y dónde.

Ese pequeño núcleo, fundamen-talmente de grandes bancos, deten-ta la mayor parte de las participa-ciones en las otras corporaciones. Lacúpula controla el 80% de toda la redde corporaciones. Son apenas 737actores, presentes en 147 grandesempresas. Ahí están el DeutscheBank, el J.P. Morgan Chase, el UBS, elSantander, el Goldman Sachs, elBNP Paribas (entre otros muchos).Al final menos del 1% de las empre-sas controla el 40% de toda red.

Este dato nos permite entenderahora la indignación de los Occu-pies y de otros que acusan al 1% delas empresas de hacer lo que quie-ren con los recursos procedentesdel sudor del 99% de la población.Ellos no trabajan ni producen na-da. Solamente hacen más dinerocon el dinero lanzado en el mer-cado de la especulación.

Fue esta absurda voracidad deacumular ilimitadamente la quegestó la crisis sistémica de 2008. Es-ta lógica profundiza cada vez másla desigualdad y hace más difícil lasalida de la crisis. ¿Cuánto de in-humanidad aguanta el estómagode los pueblos? Todo tiene su límitey la economía no lo es todo.

LA HISTORIA

1876 NACIÓ EL 12 DEENERO. Jack London,

novelista estadounidense, autor deobras como “El Lobo de Mar“,“Colmillo Blanco” o “La llamada dela selva”._

1976 MURIÓ EL 12 DEE N E RO. Agatha Christie,

escritora británica de novelaspolicíacas conocida mundialmentecomo “La reina del crimen”. Entresus múltiples obras podemosdestacar “Diez negritos”.

1896 NACIÓ EL 14 DE ENERO. John DosPassos, novelista y periodista

estadounidense. “Manhattan Transfer” fue lanovela que le dio fama y relevancia mundial._

1982 MURIÓ EL16 DE

ENERO. Ramón J. Sender,escritor español, autor deobras tan conocidascomo “Requiem por uncampesino español” o“Crónica del Alba”.

Leonardo Boff

1943 NACIÓ EL 11 DE ENERO.Eduardo Mendoza, escritor

español, autor de novelas como ”Sinnoticias de Gurb“, “Una comedia ligera“,“La verdad sobre el caso Savolta”, “Ellaberinto de las aceitunas” o “La ciudadde los prodigios”._

1957 FALLECIÓ EL 11 DE ENERO.Gabriela Mistral, poetisa

chilena. Su nombre real era Lucila de María del PerpetuoSocorro Godoy Alcayaga. Fue una de las principales figuras de laliteratura latinoamericana, es la primera persona enLatinoamérica en ganar el Premio Nobel de Literatura (1945).

Page 3: Areito 11 2014

A RE Í TO 3Sábado 11 de e n e rode 2 014 H OY

(Segunda parte)

Debo confesar que cuando leíaPastoral Americana yo tam-bién me enamoré del Sueco yme imaginaba diciéndole aloído, Seymour, mi amor, llé-vame a ese tu paraíso inex-

pugnable y protégeme, y ámame como teamo a ti.

Pero, en realidad, ¿qué acontecía con lafigura del Sueco? Sabemos que en determi-nadas circunstancias los pueblos se refugianen el seno de sus héroes en busca de so-brevivir, en busca de consuelo y esperanzapara sus espíritus atribulados. Por aquellosdías la comunidad judía sufría las calami-dades que trae toda guerra, pero ellos es-taban sufriendo por partida doble: estabansiendo perseguidos y cazados como si hu-biesen sido monstruos peligrosos a los quehabía que aniquilar. Y el Sueco no era másque un pretexto para sobrevivir, era una es-pecie de superhombre que atesoraba en símismo las ansias de supervivencia y perfec-ción de la comunidad.

Era una celebridad sin serlo, era un héroesobre el cual la comunidad judía de la zona seaferraba para darle sentido a sus vidas en me-dio del sinsentido que era la existencia deaquellos años, en medio de la Segunda GuerraMundial, y en una época en que a diario lasfamilias recibían los insolentes telegramas queinformaban de la caída de otra víctima.

Veamos un detalle de este aspecto. Cito:creo que la mejor explicación del ascenso delSueco, su conversión en el Apolo domésticode los judíos de Weequahic, estriba en laguerra contra los alemanes y japoneses y lostemores que suscitaba. Cuando el Sueco semostraba indómito en el terreno del juego, lasuperficie sin sentido de la vida aportabauna clase de sostén excéntrico e ilusorio, lafeliz liberación en el seno de una inocenciasueca para quienes vivían con el temor deque no volverían a ver jamás a sus hijos, her-manos o maridos.

Contrario a Óscar, de quien el narradornos hace saber que era inseguro, fruto de sugordura y fealdad, el Sueco era un hombreque derrochaba seguridad y aplomo. Era unindividuo que se sentaba orgulloso en el ex-celso altar de los elegidos y daba la impre-sión de ser un dios. Pero sabemos que hastalos dioses caen.

El estiloSegún los doctores de la literatura, estilo

no es más que la manera en que el escritorelige las palabras y organiza el lenguaje.

Es la forma en que cuenta la historia. Se-gún Mario Vargas Llosa, para mí el más ex-traordinario teórico de la literatura en espa-ñol, dependiendo de la forma en que se useel lenguaje una novela tendrá poder de per-suasión o será una farsa o una caricatura.Esto es, que el escritor logrará o no una man-comunidad con el lector. Es cierto que el es-

tilo tiene muchos aspectos, pero el uso dellenguaje es uno de sus aspectos fundamen-t a l e s.

En el caso de La breve y maravillosa vidade Óscar Wao nos encontramos con un es-tilo festivo, sensorial, jacarandoso, en el cualabundan las expresiones extraídas del len-guaje oral, de la calle, de la sala de los apar-tamentos, de las paradas del autobús, deltren, del lugar de trabajo. Como dice MarioVargas Llosa al referirse al estilo de GarcíaMárquez en Cien años de soledad y El amoren los tiempos del cólera, encontramos enJunot Díaz un estilo nada intelectualizado,libre de amaneramientos, desprovisto de ri-gidez. Es un lenguaje desenfadado y a vecesurticante, cargado de expresiones que es-candalizan a los mojigatos. Algunos ejem-plos para ilustrar: Oh, sin duda intimaronbastante, pero, ¿se besaron en el carro enalgún momento? ¿Le metió la mano por de-bajo de la falda? ¿Le hizo cosquillas en el clí-toris con los dedos? ¿ Se le tiró ella encima ydijo su nombre con voz gutural? ¿Le acaricióel pelo mientras que ella se lo mamaba? ¿Lle-garon a rapar?

En este pasaje encontramos lo que algu-nos entendidos llaman realismo sucio, mo-dalidad estilística en que el autor recurre aun nivel de lengua que a veces roza la es-catología.

Sigamos viendo algunas de las salidas es-tilísticas de Junot Díaz en esta novela: “¿Yqué decir de ese cabrón de Kennedy? Fue élquien dio luz verde para el asesinato de Tru-jillo en 1961 y pidió que la CIA llevara armas ala isla. Mala movida, capitán. Lo que a losexpertos en inteligencia se les pasó decirle aKennedy fue algo que todo dominicano,desde el jabao más rico de Mao hasta el máspobre güey en El Buey, del francomacorisa-no más viejo al carajito en San Francisco, sa-bía: quien matara a Trujillo -y también sufamilia- sufriría un fukú tan terrible que, encomparación, haría parecer un jojote el quele cayó al Almirante”.

Aún en los momentos de mayor drama-tismo y seriedad durante el desarrollo de latrama Junot Díaz no suelta su estilo, se man-tiene fiel a él echando manos a las ocurren-cias, al repentismo, al sarcasmo, a la ironía, alas palabras y términos jocosos, a las expre-siones en inglés.

Por el contrario, el estilo en Pastoral Ame-ricana es adusto, serio, pero sin llegar a serpedante ni endomingado. A diferencia de lasvoces, múltiples, que cuentan la historia enLa breve y maravillosa vida de Óscar Wao,aquí el narrador es uno solo, un hombre quese dedica al oficio de la escritura y al quesuponemos culto. Por lo tanto, su tono re-catado y a veces medio solemne tiene jus-tificación.

Algunos pasajes sostienen mi apreciación:“-¿Dónde está?-Su hija está a salvo y rodeada de gente

que la quiere y lucha por aquello en lo quecree. Su hija está teniendo por fin una ex-periencia del mundo.

-¿Dónde está, maldita sea?-No es una posesión, ¿sabe usted?, no es

una propiedad. Ella ha dejado de ser impo-tente, y usted no posee a Merry como poseesu casa en Old Rimrock, su casa de Deal, supiso en Florida, sus fábricas en Newark yPuerto Rico, sus operarios puertorriqueños,sus Mercedes, sus Jeeps, y sus hermosos tra-jes a medida. ¿Sabe lo que he llegado a com-prender de ustedes, los amables y ricos li-berales que poseen el mundo? Que nada es-tá más alejado de su comprensión que la na-turaleza de la realidad”.

Otro ejemplo: “al lado de Dawn, Sheila erauna máquina de pensar acicalada e imper-sonal, una aguja humana enhebrada con uncerebro, no una mujer a la que él desearatocar ni mucho menos acostarse con ella.Dawn era la mujer que había inspirado lahazaña para la que ni siquiera su carreraatlética con tantos récords batidos apenas lehabía preparado: saltar por encima de supropio padre. La hazaña de enfrentarse a supadre. Y ella la había inspirado porque pa-recía tan espectacular y, sin embargo, habla-ba como todo el mundo”.

Para finalizar lo relativo al estilo, es indis-cutible que Pastoral Americana, con su estilosobrio y a veces conceptualmente cercana ala filosofía, y La breve y maravillosa vida deÓscar Wao, con su estilo desenfadado ycherchoso, son dos textos efectivos. Y hayque convenir que lo más trascendente de unestilo no es su corrección sino su efectividad.Por eso gozamos con Junot Díaz y reflexio-namos con Philip Roth. Por eso ambas no-velas alcanzan altos niveles de persuasión overosimilitud. Por eso nos gustan ambas his-torias, porque tenemos la certeza de que ca-da autor eligió la manera más apropiada pa-ra contarnos su historia. Y la novela, aunquelos doctores de la literatura postulen muchí-simas teorías en torno a ella, no deja de sersimplemente una historia bien contada.

LUIS

R. S

ANTO

SL i

t e ra

t u ra De Pulitzer

a PulitzerPastoral Americana yLa breve y maravillosavida de Óscar Wao

Page 4: Areito 11 2014

4 Sábado 11 de e n e rode 2 014H OY A RE Í TO

Diálogo de saberes.

MU

-KIE

NAD

RIAN

ASA

NG

E n

cu e n

tro s

LA GOTA DE AGUA Y EL OCÉANOLa gota de agua del mar,desprendida y solitaria,en playa inhospitalaria,triste se puso a llorar.El Océano al sentirtan tierna lamentaciónde aquella separación,la piedad le hizo sonreír.-«Hija mía, entre los doshay una sola unidad,y sobre esta inmensidadno hay más grandeza que Dios.«Entre tu cuerpo y el míonunca la extensión verás:nadie medirá jamásla inmensidad del vacío.

Omar Khayyam ( 10 5 0 -1 1 22 )matemático, poeta y astrónomop e rs a

CÁPSUL ASG E N E A L Ó G I CAS

w w w. i d g.o rg.d o /Por Julio González

UNA ESPAILLATA VENEZUELA

(1 de 2)

L a penúltima de las hijas de Fran-cisco Antonio Espaillat Virol(1734-1807), inmigrante francésque trajo el apellido Espaillat al

país, y su esposa Petronila Velilla Sánchez(n. 1767), fue María de los Dolores Espai-llat Velilla, nacida el 5 de diciembre de1797 en Santiago de los Caballeros.

Casó también en Santiago el 29 de di-ciembre de 1818 con José María de RojasRamos, hijo de Carlos de Rojas Valerio yMaría Antonia Ramos Nasario. Había na-cido este el 24 de marzo de 1793 tambiénen Santiago.

Gracias a la acuciosa investigación delabogado, historiador y genealogista JulioGenaro Campillo Pérez, hoy sabemos queeste matrimonio emigró en 1822 a Cara-cas, Venezuela, poco después de haberseiniciado la ocupación haitiana a la parteoriental de la isla de Santo Domingo. Con-sigo llevaron dos hijos nacidos en la hoyRepública Dominicana, así como a variosparientes. Entre estos figuraban la madrede María de los Dolores Espaillat, Petro-nila Velilla Sánchez, su suegra María An-tonia Ramos (1772-1852) y sus cuñadasClotilde y Eulogia Rojas Ramos.

José María de Rojas Ramos falleció el 9de octubre de 1855 en Caracas, y María delos Dolores Espaillat Velilla falleció tam-bién en Caracas el 25 de febrero de 1879.Ambos se encuentran enterrados en elCementerio General del Sur de Caracas,así como una buena parte de sus hijos yotros parientes.

José María de Rojas Ramos y María delos Dolores Espaillat Velilla procrearon a:

- Teófilo Emilio Rojas Espaillat, nacióen Santiago hacia 1820. Emigró con suspadres a Caracas. Falleció a los 35 años el13 de febrero de 1855 en Caracas, soltero ysin descendencia.

- Sofía Elisa Rojas Espaillat, nació el 15de junio de 1821 en Puerto Plata, cuandosus padres vivieron en dicha ciudad. Fa-lleció soltera el 2 de octubre de 1907 enCa ra c a s.

- Arístides Belisario Rojas Espaillat, na-ció el 5 de diciembre de 1826 en Caracas.Doctor en medicina y cirugía graduado enla Universidad de Caracas. Personaje degrandes dotes intelectuales, sobresaliócomo historiador y polígrafo. Amigo per-sonal de José Martí, Libertador de Cuba.Casó el 9 de octubre de 1873 con EmiliaUgarte, quien falleció al año siguiente.Arístides Belisario falleció el 4 de marzo de1894 en Caracas y sus restos fueron tras-ladados al Panteón Nacional.

- José María Rojas Espaillat, nació enCaracas el 1 de septiembre de 1828. Gra-duado de doctor en jurisprudencia y abo-gado en la Universidad Central de Cara-cas. A partir de 1873 residió en París, Fran-cia, donde desempeñó diversas funcionesdiplomáticas representando a Venezuelaen España, Francia, Holanda e Inglaterra,carrera en la cual alcanzó gran renombre,recibiendo de la Santa Sede el título pon-tificio de Marqués de Rojas. Autor de va-rias obras, entre ellas una biografía de Si-món Bolívar y otra de Francisco de Mi-randa. Casó con Soledad Quintero Her-nández con quien procreó siete hijos: Do-lores, quien casó con Calixto Madrid; Leo-poldo (1859-1933), quien casó con su pri-ma hermana Sofía Carraza Rojas, sin des-cendencia; José María, soltero y sin des-cendencia; Teófilo (f. el 16 de octubre de1926), soltero y sin descendencia; Caro-lina, fallecida en París sin descendencia;Julia (f. el 3 de marzo de 1900), quien casócon N. Alexander de nacionalidad belga yAlfredo Rojas Quintero, quien casó conMaría Teresa Villalobos. José María RojasEspaillat falleció en París en noviembre de1907.

- Epaminondas Rojas Espaillat, nacióen Caracas el 8 de marzo de 1830. Fallecióa temprana edad, reposando sus restos enla tumba de sus padres en el CementerioGeneral del Sur de Caracas.

Instituto Dominicano de Genealogía

Antonio Castillo V. es mi médicode cabecera desde hace másde una década. Fui a su con-sulta referida por otro médico,que casualmente también sellama Antonio. La primera vez

que fui a su consulta me recordó que noshabíamos criado en el mismo barrio, el lla-mado Pantalón en nuestro Santiago natal. Laempatía fue mutua.

Fui a su consulta buscando su conoci-miento experto en materia alérgica y asmá-tica, pues es uno de los mejores especialistasen el tema. Me sorprendió que en sus tra-tamientos, basados en principios de la me-dicina académica-ortodoxa, recomienda al-gunas cosas que vienen de otros conoci-mientos. Por ejemplo, es un fanático del la-vado de la nariz con agua tibia salada, unprincipio de la medicina yoga y ayurvédica(Jala Neti). Incluso si desean conocer mássobre esta técnica, solo tienen que visitar,gracias a la magia de la cibernética, el Centrode Estudios Ayurvédicos.

Hace varios años, tuve problemas en elnervio de la mano, producto del uso abusivode la computadora. Tenía un dolor terrible.Como he hecho alergia a la lidocaína, elcomponente principal de la anestesia, el Dr.Castillo no quiso que me operaran. Me re-comendó entonces utilizar la acupuntura.Como niña obediente, busqué referencias.Fui a visitar al doctor Richard Velázquez, ydespués de la quinta sesión el dolor desa-pareció. Estuve visitando al acupunturistapor varios años.

En otra oportunidad, tuve una de mis cri-sis. El Dr. Castillo me dijo: “Mu-Kien, ¿porqué no pruebas con el yoga? He oído decirque los cursos de respiración son muy bue-nos para los asmáticos”. Sus palabras fueronórdenes. Comencé las clases de yoga. Unanota al margen, mi hermana Mu Yien mehabía insistido hasta la saciedad que hicierarespiración yoga, pero no le hacía caso, hastaque me lo recomendó el Dr. Castillo. Cuandosupo de la recomendación, solo me dijo: “Telo dije, pero como lo dijo Castillo, sí le hicistec a s o”. Tuve que callar. Tenía toda la razón.

El “Maestro, Master”, como le llamaba,pues es un hindú que apenas habla español,me enseñó técnicas respiratorias sumamen-te efectivas, que me han ayudado a controlarla tos seca que me produce mi condición deasmática. Incluso me he atrevido a enseñarlela técnica a algunas personas, aún sin co-nocerlas, que en mi presencia desarrollaronciclos desesperantes de tos seca. ¡Milagro! lohicieron varias veces y su tos desapareció.

El año pasado, en un seminario interna-cional en el que participé en México, escu-ché a un médico que se ha dedicado a lamedicina indígena mexicana tradicional ha-ciendo uso de los principios de la homeo-patía. Al finalizar su conferencia, me acerquéa él y sostuvimos una profunda conversa-ción, que sembró el gusanillo de la curio-sidad. Fue el primero que me habló del diá-logo que se está produciendo entre las co-rrientes médicas: las llamadas ortodoxas y lallamada medicina alternativa.

En esta Navidad recibí un regalo del Dr.Castillo, un libro titulado: “El código de cu-ra c i ó n” escrito por los doctores AlexanderLoyd y Ben Johnson. Ellos, al igual que el Dr.Castillo, se formaron en las escuelas médicastradicionales, pero su sentido de curiosidad,el hecho de haber visto a pacientes morirsesin encontrar la paz que buscaban y la im-potencia ante los limitados resultados de lasmedicinas químicas, les obligaron a buscar yexplorar nuevos caminos. Sobre este librohablaremos en próximas entregas.

Producto de mi muy prolongada crisis as-mática recibí otros regalos. Mi hija Aranchame regaló un libro que se llama “El métodoc l e a n”, autoría de Alejandro Junger. Este libroofrece un programa revolucionario para re-generar el cuerpo en 21 días, partiendo sólodel cambio alimenticio. Mi muy queridoamigo Rafael Ovalles también me envió otrolibro para “entretener me” durante el encie-rro: “La enzima prodigiosa. Una forma devida sin enfermarse”, escrito por Hiromi Shi-nya, que ofrece una dieta prodigiosa queayuda o evita enfermedades cardíacas, cán-cer, diabetes y obesidad.

La coincidencia de estos regalos hizo quemi espíritu curioso buscara explicaciones.Comencé a buscar y ¡sorpresa! los libros so-bre el tema abundan que no hay vida hábilpara leer tanta literatura sobre el tema. Mellamó la atención que algunas universidadeshan incorporado ya programas sobre me-dicina natural, un gran paso de avance.

Un pequeño artículo que me llamó laatención fue escrito por Beatriz Duarte Gó-mez, lleva por título: “Medicina occidental yotras alternativas: ¿es posible su comple-mentariedad? Reflexiones conceptuales”.Este artículo hace una interesantísima refle-xión sobre el abordaje intercultural de lossistemas de salud y las políticas públicas. Laautora constata que la medicina académi-ca-ortodoxa utiliza cada vez más la medicinaalternativa y complementaria, pero que elsistema de salud en las sociedades occiden-tales todavía no acepta del todo los princi-pios de la “o t ra” medicina. Señala la autoraque en el 2002, la Organización Mundial dela Salud presentó un estudio a la comunidadmédica internacional en el que afirmabaque las medicinas complementarias o alter-nativas eran cada vez más utilizadas por lospacientes y los médicos. Una de las razonespara este cambio es el temor creciente sobrelos efectos secundarios de las medicinas ela-boradas con elementos químicos. Señalatambién que el aumento de la popularidadde la medicina alternativa o complementa-ria, que ella denomina MAC, es un reflejo delos cambios en las necesidades y valores dela sociedad, pero sobre todo, la búsqueda denuevos paradigmas explicativos, procedi-mentales y terapéuticos. Por estas razones laautora aboga por un diálogo sincero de sa-beres porque en la complementariedad deestos dos mundos, aparentemente antagó-nicos, está la solución y el camino.

Con este artículo iniciamos una serie quecomienza hoy, y no sabemos cuándo termi-nará, pues como estos autores, partiendo demi propia experiencia, yo también estoybuscando nuevos caminos y explicaciones.

¿Acaso en verdad se vive en la tierra?No para siempre en la tierra,solamente un poco aquí.Aunque sea jade, se rompe.Aunque sea oro, se hiende.y el plumaje de quetzal se quiebra.No para siempre en la tierra,solamente un poco aquí"Nezahualcoyotl de Texcoco(1402-1472) rey y poeta azteca

La complementariedadde los conocimientos, 1Dedicado a mi médico de cabecera:Antonio J. Castillo V.

Page 5: Areito 11 2014

A RE Í TO 5Sábado 11 de e n e rode 2 014 H OY

Ester Gimbernat González, doc-tora que profesa en la Univer-sidad de Northern Colorado, en-cuentra varias estéticas “trans -moder nas” en algunos poemasde Ángela Hernández (pp. 101).

Lo que dije acerca de Manuel García Car-tagena se le aplica a ella y a cualquier otrosujeto que adopte este punto de vista.

La estética existe solamente en el discursodel dualismo del signo. En el plano empíricoexiste como ideología etnocéntrica, cuyo bi-narismo –belleza opuesta a fealdad– tienepor estrategia la desvalorización de lo queOccidente no acepta como bello. Cada cul-tura-sociedad reproduce su estereotipo de labelleza y condena, por extraño, estrambó-tico, grosero o bárbaro, lo que es feo. Sujetosaplastados, sociedades aplastadas por el et-nocentrismo. El modelo occidental de be-lleza es eurocéntrico. Según esta concep-ción, negros africanos, chinos, japoneses, in-dios asiáticos y americanos, esquimales, al-binos, polinesios, tribus australianas, ena-nos, mestizos, mulatos, etc., son feos porqueno alcanzan el modelo griego de la Venus deMilo-Apolo y son, por lo tanto, contrahechu-ras de la naturaleza. Así mide Occidente labelleza y esta medida ha pasado a la lite-ratura y las artes. Pero los asiáticos, los afri-canos, los indios de los dos continentes, losesquimales, los polinesios, etc., tienen suconcepto de belleza y fealdad y así anda lahumanidad perdida con estos clichés, inca-paz de trocarlos en forma, ritmo-sentido.

Los poetas y escritores andan perdidos enese binarismo. Los dominicanos y los ibe-roamericanos no son una excepción. Perdi-dos andan, repitiendo como González Gim-bernat, el vocabulario técnico de la teoría li-teraria y artística del neoliberalismo: moder-nidad, posmodernidad, transmodernidad,posnacionalidad, globalización (pp. 104-05),metáforas trasladadas desde lo político-fi-nanciero a la literatura, donde es proverbialla confusión entre modernidad y moderni-zación y la oposición entre países “del pri-mer mundo” y los “s u b d e s a r ro l l a d o s” de laCEPAL. Pero esas son tretas sociopolíticasdel discurso incapaz de pensar el ritmo co-mo forma-sentido y plantarle cara a la me-tafísica del signo. Los miembros más sobre-salientes del partido político del signo sonlos profesores que repiten las ideologías delPoder y difícilmente crean conocimienton u e vo.

Llamo profesores, y especialmente pro-fesores de literatura, a aquellos que repitenmecánicamente –en el aula o en los mediosde comunicación– las nociones de la me-tafísica del signo aprendidas en la univer-sidad o en los libros, sin método, sin estra-tegia ni apuestas políticas de sujeto.

Gimbernat González lee contenido y be-lleza en las autoras dominicanas que ha es-tudiado hasta ahora, no ritmo-sentido, quees, sin darse cuenta, el placer al que alude,pues los miembros del partido del signo vi-ven en la inconciencia rítmica total.

Cuando Manuel Matos Moquete deslindala crítica practicada por Pedro HenríquezUreña y la tacha acertadamente de estar “an -clada en la más antigua y rica tradición oc-cidental hermenéutica, exegética, apasiona-da por la búsqueda del sentido” (p. 115), esmuy posible que Bruno Rosario Candelierhaya sido víctima de una mala lectura al pro-yectar su propia posición teórica al discursode Matos Moquete, quien dice que la críticade Henríquez Ureña es hermenéutica y exe-gética, no que el propio Matos Moquete seahermeneuta o exegeta. Los sicoanalistas lla-man proyección a esta operación practicadapor Bruno. Es un discurso de deseo para su-mar adeptos a su política del signo. Brunopersigue que quien le lea concluya en que sudiscurso posee la verdad y la razón en contrade otros discursos que circulan en la socie-dad y que critican radicalmente el métodoestilístico y el hermenéutico, fundados en lateoría del signo.

Matos Moquete ha trazado el camino quesiguió Henríquez Ureña para convertirse en

el principal crítico literario hispanoamerica-no. Quisiera que todos los analistas de dis-cursos literarios en nuestro país y Américasiguieran ese camino para que transforma-ran el método “hermenéutico, exegético, es-t i l í s t i c o” descrito por Matos Moquete. Peropor un método que privilegie la especifici-dad del discurso, la forma-sentido de la es-critura, el estudio de las ideologías de épocaque reproduce o las que transforma, la pri-macía del sujeto de la escritura por encimade la noción estilística de autor instauradapor Sainte-Beuve y cuyo relente biográfico yclasista siempre se cuela en los análisis ba-sados en la teoría del signo.

La ponencia de Matos Moquete critica elconjunto ideológico que he esbozado y Ro-sario Candelier es incapaz de percibir esto. Elponente describe la crítica de HenríquezUreña, centrada en “resaltar los aportes de lapersona en condición de autor” (p. 127). Se-gún él, en este tipo de crítica “el texto in-teresa menos que el escritor; no goza de au-tonomía; no tiene un estatus independiente.Es solo un producto del talento y la crea-tividad del autor.” (Ibíd.) Pero Matos Moque-te reconoce que el modelo seguido por Hen-ríquez Ureña –el de la primacía del autor–,aunque es categórico como punto de vista,está “lleno de matices, de inflexiones, con-trates de informaciones e ideas que aportandiversas posibilidades de interpretación.”( Ib í d . )

Quizá sea el último párrafo de la ponenciade Matos Moquete el que autoriza a RosarioCandelier a creer que el ponente es un her-meneuta. El ponente niega que los textoscríticos de Henríquez Ureña sean “académi -cos, ni exhibición de su extensa y densa eru-dición, del amplio conocimiento y del do-minio especializado que poseía en múltiplesdisciplinas humanísticas (…) ni se limitan adecir cosas, a emitir juicios sobre obras o aexhibir conocimientos y manejo de métodosde análisis e interpretación de la literatura”.

Matos Moquete los reduce a simples “ensa -yos literarios” (…) que “revelan ante todo alhumanista, al escritor y al pensador, al sabio.La factura de esos escritos es la misma que lade sus ensayos fundamentales.” ( p. 1 2 8 ) .

He aquí el último párrafo: “Son textos li-terarios por sí mismos, ensayos literarios,por el estilo lúdico, ameno, depurado, ele-gante, y por las ideas trascendentes que co-munican sobre los autores y las obras.”(Ibíd.). Es un párrafo conciliador. El ponentereconoció que la noción de autor en el dis-curso de Henríquez Ureña interesa más quela de texto. Esto convierte su análisis literarioen estilístico, es decir, en un primado delcontenido. Por eso Matos Moquete advierteque su estilo es “lúdico, ameno, depurado,e l e g a n t e”. Son indicios de contenido, no deforma-sentido, de ritmo, pues el discurso deHenríquez Ureña es deudor de la teoría delsigno. Matos Moquete realiza una descrip-ción del estilo literario del crítico, pero noespecifica si comparte los adjetivos de taldescr ipción.

Al existir confusión entre los rasgos deldiscurso de Henríquez Ureña y los del ana-lista, Rosario Candelier se aferra a esa ter-minología de la última frase del ponente pa-ra concluir en que es hermeneuta y exegeta.Nada es inocente en el lenguaje, y menos laspalabras en el discurso. La última frase au-toriza a Rosario Candelier a reafirmar suideología: “y por las ideas trascendentes quecomunican sobre los autores y las obras.”Aunque en la doxa se usa el término “tras -c e n d e n t e” como sinónimo de “impor tante”,el peso mayor de esta noción es metafísico yla metafísica vence a quien concilia con ella.La metafísica es ciencia del más allá, de loque no se conoce y es imposible de conocer.Un texto literario es una práctica que está enel más acá. No se juega impunemente conlas palabras. De ahí la recuperación de Ma-tos Moquete emprendida por Rosario Can-d e l i e r.

DIÓ

GEN

ES C

ÉSPE

DES

/D

CESP

EDES

@CL

ARO.

NET

.DO

Apor

te Las ponencias de

Masa CríticaPrimer Seminario Internacional de la Crítica Literaria en [la] RD

Page 6: Areito 11 2014

6 Sábado 11 de e n e rode 2 014H OY A RE Í TO

Trujillo aprendió aespiar con losg ri n go s

Si Trujillo fue hechura de los nor-teamericanos, de ellos aprendióla actividad secreta del espionaje.Pocos dominicanos conocenunos expedientes confidencialesque llevaban los marines en los

que anotaban el más intrascendente detalle dela vida y los movimientos de las personas quelos enfrentaron durante la ocupación militarde 1916-1924.

Están en el Archivo General de la Nación.Cada informe revela que los interventores su-peraban al dictador dominicano con agentesque penetraban inadvertidos a los hogares, re-dacciones de periódicos, parques, restauran-tes, clubes sociales, teatros, puertos, casinos,oficinas eclesiásticas, bufetes de abogados, lajusticia, mítines y viajes.

Por ese Fondo no solo se puede conocer laoposición y el patriotismo de los naciona-listas y de honorables que fueron amigos delos intrusos sino el discurrir del Santo Do-mingo de entonces, lugares emblemáticosya desaparecidos, las calles con sus antiguosnombres y biografías completas de los opo-sitores que con tal vehemencia defendieronla soberanía.

Los informantes conocían por qué deter-minado medio de comunicación no publi-caba específicos artículos, quién los entre-gaba a los editores, cuáles rotativos eran ad-versos o tenían ligera simpatía hacia los ofi-c i a l e s.

Definían hasta el temperamento de cadareportado como contrario a ese gobiernoimpuesto, y describían el origen de vocablospropios del pueblo, como Concho Primo,porque en esos años se usó repetidamentecomo protesta a su presencia la expresión:“¡Viva Concho Primo!” o “¡Las tropas nor-teamericanas están saliendo y Concho Pri-mo está volviendo!”.

Es probable que alcahuetes dominicanosa las órdenes de los norteamericanos fueranlos redactores de estas notas escritas en uninglés de pocas palabras, por algunos por-menores que los norteamericanos no hubie-sen podido establecer.

¿Cómo adivinarían quién era el autor deun escrito anónimo por su estilo? Un infor-me dice: “El Listín Diario recibió tres artí-culos con la palabra ‘Tr initar io’ y no los pu-blicó. A las dos semanas el o la autora losmandó a El Tiempo donde ahora están sa-liendo. El público los está leyendo cuidado-samente bajo el título ‘El plan de la hora’ ”. Enopinión de los americanos ese era el estilo deFrancisco Peynado o de Juan Francisco Sán-chez, quienes según ellos violaban la Ordende Brigada Especial número 69.

Porque buscaban cualquier pretexto parajustificar atropellos. Entre las decenas de re-

portes sobre Fabio Fiallo hay uno en el queparecen motivar su apresamiento. “Fa b i oFiallo, dominicano, de 53 años, un activomiembro del partido Horacista y miembrode la Junta Nacionalista, es de carácter vio-lento. Escritor y poeta, en todo el mundo dehabla hispana son conocidos sus trabajos”.

Agrega que es un mordaz enemigo y queal llegar las fuerzas extranjeras pronunció undiscurso a los pies de la estatua de Colón, enel parque del mismo nombre, en el que lla-mó a la gente a armarse en contra de losamer icanos.

Señala que en la celebración de la SemanaPatriótica en el parque Colón, Elpidia Gau-tier, una prominente muchacha de la socie-dad, recitó un poema compuesto por Fiallo,“Los dos gigantes”, lleno de insultos al go-bernador, al gobernador militar y a la ban-dera estadounidense. Significa que Fiallo yAmérico Lugo eran en ese momento del per-sonal de “Las Noticias” y publicaban artícu-los fieros contra la ocupación.

Y todo esto, se afirma, “culminó con elarresto el 15 de julio” por haber publicadotrabajos de Lugo titulados “La Semana Pa-tr iótica” y “Oídme todos”. En ese mismo in-forme se refieren a una carta de Fiallo a Lugoy Enrique Henríquez acusándolos de tenermiedo por no asumir una actitud más agre-siva contra los marines. La foto de Fabio Fia-llo con uniforme a rayas recorrió el mundo.

“Guerra segura”. Los norteamericanos in-vestigaban los antecedentes de sus perse-guidos, escuchaban todas las charlas y se in-filtraban en reuniones. Es sorprendente co-mo se refieren a asuntos tratados entre dospersonas que consumían un trago en el Clubde Artesanos, el Café Fausto, el Centro deRecreo o el teatro Colón de Santiago, el Ca-sino de la Juventud o algunas residencias fa-miliares. Iniciaron una serie titulada “Qu éescucho en los cafés” que es un modelo de laestrecha vigilancia y gran capacidad de atis-bo de estos gobernantes foráneos. En uno deellos se cuenta todo lo que se comentó acer-ca del arresto de Pelegrín Castillo y las “pre -

s u n t a s” atrocidades cometidas en el Cibao.En este dossier se aprecia la historia de

patriotas cuya actuación en esos momentosno ha sido reconocida. Muchos datos no es-tán firmados, solo dice “reporte de agentes”.Es interesante ver cómo muchos de estosnacionalistas que con tanta valentía defen-dieron la Patria, después fueron connotadostrujillistas, como Arturo Logroño, entreo t ro s.

En una de esas memorias se expresa quedurante el discurso de Arturo Logroño el sá-bado en la noche, Félix Mejía, dueño de unalibrería en la calle Separación, y muy antia-mericano, Rafael Damirón, “el bien conoci-do vagabundo”, Augusto Catrain, “quien tie-ne un cargo en la oficina Meteorológica”, Mi-guel Guerra Parra, “un comerciante español”y Enrique Aguiar, “uno de los asesores delpresidente Cáceres y otros del tipo de Da-m i r ó n”, discutían sobre la situación política.Mejía dijo “que en cada ciudad del país sesembrara la semilla de la revolución” y llamóla atención de la audiencia cuando Logroñoestaba hablando, como el último orador in-v i t a d o”.

Damirón fue atacado y burlado por losinterventores. Siempre se referían a él atri-buyéndole condición de vago y en una re-lación titulada “Boxer group” d e s t a c a ro nque su partido político era “c u a l q u i e ra”mientras a los otros le colocaban “L e g a l i s t a”,“Ho ra c i s t a” o “Ji m e n i s t a”. Además ahí figu-ran con sus edades, ocupaciones, direccio-nes y filiación Américo Lugo, Pedro Peguero,Rafael E. Sanabia, Fabio Fiallo, EnriqueAguiar, Enriquillo Henríquez, José Pérez,Agustín Aristy, Arturo Logroño, AlejandroMencía, Noel Henríquez, Luis C. del Castillo,René Fiallo, Gustavo A. Díaz y Félix Mejía.

Américo Lugo preocupaba sobremanera alos marines. Este hombre, de 55 años, hora-cista, es de carácter excitable, irracional, abo-gado de alta reputación, escritor y poeta. “Es elde mayor propaganda contra la Intervención”,“más que todos los otros agitadores”, indican-do los lugares donde “denuncia abusos y crí-menes cometidos por los americanos”. Citanun encendido pronunciamiento de Lugo amarineros que arribaron al puerto en el barcoargentino “9 de Julio”.

Se ofrecerán otras entregas sobre estos se-cretos métodos de control de los interven-tores, quienes espiaban a Francisco Peynadoen sus domicilios y visitas y escuchaban conatención a Lico Castillo, “quien dijo anoche”que estuvo con una comisión en La Habanay está esperando que se pronuncien los queestán discutiendo la situación en Santo Do-mingo porque “si la propuesta de los comi-sionados no es aceptada, la guerra es cosas e g u ra”.

ÁNG

ELA

PEÑ

A/A .

PE N

A @ .C

O M

. D O

Viaj

e po

r la

his

tori

a

Arturo Logroño Fabio Fiallo en prisión Juan Francisco Sánchez

Félix Evaristo Mejía Gustavo A. Díaz Américo Lugo, joven

Documentos confidenciales de la ocupación

Page 7: Areito 11 2014

A RE Í TO 7Sábado 11 de e n e rode 2 014 H OY

ROBERT DANDAROVTRASCENDENCIA Y NOSTALGIA VISUAL

Durante nuestra estadía navi-deña en New York nos reen-contrarnos con Dandarov,pintor contemporáneo deMacedonia, en su taller deBrooklyn. Conocíamos su

obra desde su primera estadía en RepúblicaDominicana hace unos quince años, invi-tado de la Escuela de Arte y Diseño de Altosde Chavón, de La Romana. Desde entoncessu obra sigue confirmando la maestría y elduende con los que este artista mantieneuna coherencia plástica, tanto en su lengua-je formal como en su discurso conceptual.La panorámica visual de este pintor es el re-sultado de una conjugación de vectores his-tóricos y filosóficos que constituyen unaconvergencia de lecturas en las imágenes enlas que siempre están presentes los códigosmitológicos e históricos que enfrentaron Oc-cidente y Oriente en sus dogmas religiosos yp o l í t i c o s.

Este artista, hijo de Bizancia, tiene un pro-fundo sentido del humor y unas luces crí-ticas agudas que le permiten colocar el diá-logo en los tiempos pasado y presente, cues-tionándolos hacia el futuro con una obrapictórica edificada desde el caballete con re-flexión y meditación sobre la civilización y lacondición humana.

La pintura y el dibujo de Robert Dandarovnacieron frente a los iconos ortodoxos de lasiglesias y monasterios que visitaba desdeadolescente en su tierra nativa de Macedo-nia, país cónclave de la expansión del cris-tianismo en tierras balcánicas.

El imaginario de este pintor se nutrió delas epopeyas de Alejandro el Grande, y detodas las leyendas épicas que enfrentaronOriente y Occidente por imponer al mundosus dogmas, y frente a tan intenso patrimo-nio cultural, él se empapó de lecturas y co-nocimientos para digerir todos los referen-tes, como un alquimista visual, que lo es.

Es así como su pintura tiene un duendeposmoderno que juega o coquetea con elsurrealismo y el expresionismo, dependien-do del sujeto y del momento en que se eje-cuta la obra.

Dandarov refleja su apasionamiento porla civilización humana en sus lienzos, exten-diendo con el óleo un gran dominio de lastécnicas clásicas del dibujo y del tratamientodel pincel; es un artista de inspiración y demaestría con disciplina heredada de losmaestros clásicos de la alta Edad Media y delRenacimiento. La fuerza de su obra consisteen mantener su producción con un trabajopermanente desde el taller, llevando su ca-rrera en coherencia con su pensamiento éti-co y estético. El resultado es notable en elequilibrio constante del trazo y del pincel, esdecir, del dibujo y de la pintura, como si elartista dibujara con el pincel las transparen-cias y las líneas que vienen de un trazo sutil yseguro que se impone como si el dibujo fue-se una primera capa de pintura.

Estamos frente a un pintor actual de tras-cendencia posmoderna que no niega las en-señanzas de Velázquez, de El Greco y de Go-

ya, sin desprenderse de la visión del mundoprofano de Bosch y Brueghel.

En los trabajos más recientes que ha pre-sentado el papel es el receptáculo de sus sue-ños y fantasías, de sus angustias y de susmiedos, siempre presentes en la obra con ungran sentido sicoanalítico y crítico. Adán yEva, según las creencias judía, cristiana ymusulmana, fueron los primeros seres hu-manos (hombre y mujer) que poblaron laTierra. Fueron hechos por Dios (Yahweh enel judaísmo y Alá en el islamismo) en el sextodía de la creación. Según la Biblia y el Corán,Adán fue creado primero, y Dios, al verlo so-lo, decidió que necesitaba una compañeraque fue creada partiendo de una costilla delh o m b re.

En la versión de Robert Dandarov, el ori-gen del mundo se poetiza con el simbolismode un zapato masculino agudo, clavando elmismo en el centro de un lecho, que puedesignificar tanto el sofá del paciente analizadocomo la cama del acto sexual, lenguaje dis-cursivo que pone en evidencia el escenariodramático del amor…

En otra obra observamos un referente vi-sual a Kafka que mantiene todavía la huma-nidad frente a la mística o el misterio delnihilismo y de lo absurdo existencial.

El distanciamiento, la óptica del artista se-para los órganos del cerebro como para evi-denciar que las emociones literalmente vis-cerales no pueden acudir al razonamiento,ni a la retórica. Estamos frente a una imagenvisual reflexiva que existe desde la construc-ción de la civilización grecorromana. Estaserie excepcional de dibujos intervenidos

con pintura funcionan como secuencias re-flexivas y meditativas sobre “la condiciónh u m a n a”, preguntas y cuestionamientoseternos que se mantienen desde la antigüe-dad.

Dandarov es de los que piensan que eltiempo no existe y que la humanidad siguecon sus mismos cuestionamientos espiri-tuales y filosóficos frente a la eternidad, in-sistiendo este artista-personaje, que ni laciencia, ni la tecnología son respuestas almisterio del mundo, en este aspecto él seacoge y respeta la trascendencia de la me-tafísica y de la espiritualidad, ante todo.

Profundamente pacifista, nos dice quemientras haya guerras y conflictos estare-mos dominados por “la barbarie”, y nos ex-tiende con firmes pruebas del conocimientode la historia universal, que en términos decivilización humana desde el punto de vistafilosófico y ético la humanidad no ha avan-zado tanto… Añade, que no es pesimista,pero sí consciente y realista…

Su espíritu profundamente eslavo lo con-duce a expresarse con amplios desplieguespoéticos, sobre todo, cuando habla de la be-lleza y del destino, los dos misterios de laexistencia, nos dice “quien es un intensoamante del arte y de la literatura como pro-puesta de vida y opción de ella misma, porencima de su temperamento de alquimistadel siglo XVI, sabe perfectamente respondera su propio siglo, llevando su pintura actualal escenario de la contemporaneidad, a tra-vés de figuras cinematográficas donde per-sonajes como Madonna heredan de la vo-luptuosidad de las vírgenes renacentistasponiendo en evidencia una feminidad le-gendaria. Es a través del retrato que Dan-darov ejerce la figuración muchas veces hi-perrealista y en otras de un misterioso ro-manticismo sacado de las películas en blan-co y negro de los años 50’s y 60’s.

La nostalgia envuelve indiscutiblementetoda su obra. Nostalgia del que pierde su tie-rra de origen y nostalgia de quien la recuerdacon un sonido de fado o tango detrás de uncristal en una tarde de lluvia. Así es la pinturamás reciente de Dandarov, una cinta cine-matográfica que escenifica y pone a dialogarel pasado con el presente, la ilusión con larealidad, la ternura con la violencia, el ero-tismo con la guerra y el amor con la bar-bar ie.

Cuando salimos de su taller, los vientosdel canal del East River nos sacudieron contanta fuerza que sentimos que salíamos deuna exhibición de pintura contemporánea,donde indiscutiblemente la trascendenciacon garbo y duende de la obra de un artistatotalmente implicado en la trascendencia dela civilización humana y cuestionando lasincidencias del destino individual y colec-tivo era real.

En su obra o a través de esta, entendí o mepermitió reafirmar que todavía en el mundodel arte del siglo XXI, Robert Dandarov es unartista que mantiene la fuerza de la “Gra nP i n t u ra” con un equilibrio exquisito del fon-do y de la forma, de la realidad y del sueño.

DEL

IA B

LAN

COD

e se

ñal a

señ

al

Page 8: Areito 11 2014

8 Sábado 11 de e n e rode 2 014H OY A RE Í TO

CIUDAD COLONIAL /SANTO DOMINGOEN EL CORAZÓN DEL HERRUMBRE, DESPERTAR DE NUEVO

Tenía la ilusión de conseguir en-tre sus páginas una sorpresa, loacariciaba como un niño quedescubre el nuevo esplendordel arco iris, sus matices de lu-ces, “alguna vez sobre el arco

ir is“ reza la canción.Quería que al final de ese juego de pris-

mas, en la dorada cubeta, estuvieran las pá-ginas del libro que había llevado en mi viaje.

Guardadito en la negra mochila trota-mundera, perfumada de piel inocente y dul-ce, así lo tenía. Casi lo olvido, de regreso enpleno avión una corazonada me dice queeso azul, que brilla por la ventana, me su-giere la portada de Ciudad Colonial / SantoDomingo, libro de la autoría de Nelia Bar-letta y Francina Lama Berletta.

Discreto, sin aspaviento de autoras, unsimple diálogo desde el inicio nos orienta,explica y amplía las razones de la existenciadel libro y punto.

Las autoras, conocedoras de la fuerza ab-soluta de las imágenes, recurrieron a exce-lentes artistas para que por sus fotos habla-ran de la cotidianidad en la Ciudad Colonial,lugar donde moramos dolientes y no dolien-tes de un espacio que alguna vez anhelo me-jores consideraciones, todos los otros cuen-tos que a diario me venden, no me los creo,en homenaje a Don León Felipe: “que la cu-na del hombre, la mecen con cuentos” …

Salomé Ureña de Henríquez, fray Antónde Montesinos y Pedro Henríquez Ureña, es-tremecen con sus citas a lo largo de todo ellibro, encuadran pensamientos, hacen lahistoria viva, repleta de contenidos aprecia-b l e s.

Este libro, su esfuerzo sutil y sentido metoca hondo, porque en el mismo las preten-siones alambicadas no existen, porque en elmismo la belleza silente de las imágenes fo-tográficas gritan conservación, piedad y sen-sibilidad.

En el saquito canguro del air bus 300, de-lante de mí estaba el libro, desde las IslasAzores ataqué con fruición las notas inte-riores, escritas como si no quisieran llamar laatención, eran susurros escritos para un te-ma con muchas variaciones, paganinas co-loniales style…

Cuando entre pensamientos y láminasme vi envuelto, me derrumbé a pensar en elherrumbre, según definición de la llamadacapa de óxido que lo cubre todo, esperandoel alba de los mejores corazones, son cora-zones contra el herrumbre y el olvido, bus-cando alegres conciencias despiertas a tantabelleza detenida, cuyos gritos son audiblesen las pupilas.

Volando sobre Puerto Rico, ya casi de re-greso, cada fotografía era una epifanía, vayacoincidencia, en Puerto Rico la fiesta de los

Reyes Magos tiene esa alegría jíbara que bajahacia su ciudad colonial, a golpe de som-breros de pavas, cuatros y tiples de 12 cuer-das largas, música y delirio.

Había terminado el libro, me había su-mergido en ese retrato, en esa vorágine defotos vistosas y alta estética, donde los sue-ños y los deseos de los autores y autoras es-taban consumados como una bella voz co-lectiva de texto y largas visiones, embadur-nadas de paredes pintadas de vegetales he-lechos, sinfonía y trinos de patios húmedos ygatos huérfanos, como los viejos spiritual deNew Orlean (“sometimes i feel like a mot-herless child”)…

Mi ilusión del vuelo de regreso se habíacumplido, desde mi ventanilla del avión enplan de aterrizaje miraba una tenue lloviznaque deshacía el arco iris, en mis tibias ma-nos, atesoraba Ciudad Colonial / Santo Do-m i n g o.

Quizás falte ahora escribir el libro de lospatios, trechos hermosos y coloridos, espa-cios únicos que moran en nuestras mentes yen las velas de nuestros insomnios, hojaslanceadas de números para la suerte quenunca llega, trúcamelos de viejos trazadosde carbón blanquecino, huella de la vida y eltiempo en nuestra Ciudad Colonial.

El libro, justo en el umbral del aire, mellevó al corazón adolorido del herrumbre,para despertar de nuevo, era una noche deepifanía, repleta de estrellas, las Islas Azoresestaban lejos, ahora casi rozo mi mar tur-quesa, sueño en el dulce bostezo con mi Ciu-dad Colonial, mi estación terminus… (CFE)

Nota : Amanda Livoti, Manolo Rodríguez Vi-

dal, Ricardo Briones, Amadeo Anselin, autorde la foto de la portada del libro. Jaime Gue-rra, Nemanja Brankovic, Pancho Rodríguez yRicardo Piantini, son los responsables delcuerpo fotográfico que conforma el libroCiudad Colonial / Santo Domingo.

Editado en el mes de marzo del 2012 porNelia Barletta y Francina Lama Barletta, conprólogo de Hoyts Rogers.CA

RLO

S FR

ANCI

SCO

ELÍ

ASPa

pele

s de

l Tró

pico

Foto de Amadeo Anselin

Foto Manolo Vidal

Catedral de Santo Domingo.

PEDRO SOSA