Cuento para trabajar valores comoel esfuerzo,la amistad y

solidaridad.

Una soleada mañana,un hermoso pajarillo se posó en las ramas de un viejo árbol para limpiar su bello plumaje.

El pajarillo giró la cabeza y oyó al árbol que decía :-¡Que triste estoy! Antes era bonito,daba flores y sombra. Ahora soy un montón de ramas secas. Desde que los dueños de esa casa se fueron, no he probado una gota de agua,si no llueve pronto seguro que moriré.

El pajarito le dijo que le quería ayudar , pero no sabía como.-¿Podrías traerme un chorrito de agua fresca en tu piquito? -Preguntó el árbol.-¡Claro! Es una excelente idea. Voy a pedir ayuda a todos mis amigos.

Todos los días, los pajarillos regaban el árbol, que poco a poco, recobraba su color y sus hojas.

Una familia vino a vivir a la casa y la señora regaba todos los días el árbol.Éste, cada día, estaba más resplandeciente.Como estaba tan bonito, los pajarillos decidieron organizar una fiesta.

Durante la fiesta,el árbol no dejó jugar a los pajarillos en sus ramas.Estos se fueron muy tristes por la actitud del árbol, a quien tanto habían ayudado.

Poco a poco,los pajaritos dejaron de visitar el árbol porque no dejaba que se posaran en sus ramas.Con el peso de sus frutos y hojas, el tronco empezó a inclinarse y la señora de la casa decidió cortarlo.

El árbol empezó a llorar desconsoladamente. Los pajaritos escucharon sus sollozos y acudieron a verlo.Les contó lo que le pasaba y les dijo que estaba arrepentido de su comportamiento. Decidieron ayudarlo otra vez.

Comenzaron a tirar las manzanas y algunas hojas. El árbol se enderezó y la señora decidió no cortarlo.Desde entonces,vivió feliz rodeado de sus amigos los pajarillos, comprendiendo el valor del esfuerzo y la amistad.

 

Cuento adaptado de DENISSE IZTEL TORRES BELTRÁN. Ganadora del concurso internacional de cuentos cortos para la  educación en valores "CIUDAD MORELIA" 2009/10.