... vix prece finita torpor gravis ocupat artus,mollia cinguntur tenui praecordia libro,

in frondem crines, in ramos bracchia crescunt,pes modo tam velox pigris radicibus haeret,

ora cacumen habet: remanet nitor unus in illa. (Ovidi, Metamorfosis, I, 548-552)

… apenas terminado su ruego, un pesado torpor invade sus miembros,una fina corteza recubre su tierno pecho,

los cabellos se convierten en hojas, los brazos en ramas;los pies, antes tan veloces, se clavan al suelo con perezosas raíces;

el rostro desaparece en la copa: todo lo que queda en ella es su brillo.

Mudar presto le hace el ejerciciola vengativa mano de Cupido,que hizo a Apolo consumirse en llorodespués que le enclavó con punta d’oro.

Dafne, con el cabello suelto al viento, A Dafne ya los brazos le crecíansin perdonar al blanco pie corría y en luengos ramos vueltos se mostraban;por áspero camino tan sin tiento en verdes hojas vi que se tornabanque Apolo en la pintura parecía los cabellos qu’el oro escurecían;que, porqu’ella templase el movimiento,con menos ligereza la seguía; de áspera corteza se cubríanél va siguiendo, y ella huye como los tiernos miembros que aún bullendo’staban;quien siente al pecho el odioso plomo. los blancos pies en tierra se hincaban

y en torcidas raíces se volvían.Mas a la fin los brazos le crecíany en sendos ramos vueltos se mostraban; Aquel que fue la causa de tal daño,y los cabellos, que vencer solían a fuerza de llorar, crecer hacíaal oro fino, en hojas se tornaban; este árbol, que con lágrimas regaba.en torcidas raíces s’estendíanlos blancos pies y en tierra se hincaban; ¡Oh miserable estado, oh mal tamaño,llora el amante y busca el ser primero, que con llorarla crezca cada díabesando y abrazando aquel madero. la causa y la razón por que lloraba! (Garcilaso, Égloga III, 149-168) (Garcilaso, Soneto XIII)