ABSTRACTO

NIEVES GRANERO SÁNCHEZ

ABSTRACTO

NIEVES GRANERO SÁNCHEZ

2014

Ilustración de portada: Sangre de árbol Juan Antonio Torrijo, artista plástico Diseño y maquetación de publicación: Nat Gaete Una publicación de Editorial Digital LetrasKiltras Todos los derechos reservados Registro en Safe Creative Código: 1402240229347 Fecha 24-feb-2014 13:58 UTC Licencia: All rights reserved

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OBJETIVOS IRRESUELTOS Cien hojas arrugadas en un cesto de basura decenas de palabras abortadas yacen sin haber visto la luz un pedazo de corazón enterrado entre cartones vasos de yogur restos de comida colillas otra noche escapa sin directrices ni perpetuidades devorando sueños mientras se escurre por la ventana una mirada azul un conductor trasnochado hacer chirriar los neumáticos en una esquina y se oye a todo volumen Bulerías por David Bisbal aparece el camión de la recolección quejosamente, como un animal antediluviano malherido hoy comerás poemas inconclusos...

ENTRE LUCES He vuelto al espanto de los laberintos a las náuseas de los cursos de agua impura me he enfrentado a la muerte con ríos de gusanos transitándome las venas creí verte en la mirada de otras gentes cuando convulsionaba la abstinencia y no quise pero mis ojos no ven más que tus ojos y mis manos buscan tus manos en las noches de soledad y hambre los pies descalzos sucios la ropa raída sentado en el bordillo de la acera hurgo en la bolsa del supermercado que encuentro todos los días a la misma hora junto al colchón soy un desconocido bajo tu balcón un nadie que perturba que estremece a veces causa lástima no pido agua ni cobijo he tocado fondo el lodo me cubre las rodillas no tengo dientes ni lengua gusanos ávidos de carne putrefacta asoman la cabeza por los poros abiertos y te encuentran en las aristas de mi mente mi instinto reclama el consuelo de tu abrazo la ternura tu voz cálida cantándome una nana y tengo miedo de detenerme en la certeza de saber que me perdonas.

PERSISTENCIA Espigas de piedras alineadas tapiza el paso incierto por la casa vieja silla de anea abandonada al costado de la puerta muro encalado geranios que renacen por costumbre y un cuadro de la virgen hay inocencia en las arrugas de los ojos la cabeza se pierde en un tiempo en retroceso repliega la memoria huyendo de la jauría del presente las manos no descifran el afán de guisar para el marido olvidan ingredientes, confunden condimentos crean sabores desiertos que asustan a los jóvenes y subyugan mi alma un racimo de uvas se resigna en la palma de tu mano y yo espero borrajas en cada primavera para destilar tu recuerdo.

BALAUSTRADA Tiene noventa años nublados los oídos y las piernas asomada a un balcón con lirios no recuerda el ayer pero sí el hace tiempo callando a gritos sus certezas yo fui mujer con hijos estas manos barrieron estas manos guisaron estas manos mecieron estas calles rebosaron de mulos de pastores estos oídos oyeron a labriegos cantar coplas a la siega hoy su mundo se ajusta a la cuadratura de un mirador que florece en primavera de un pueblo que despierta en los veranos vocifera su realidad avara velada de sonidos y de pasos y a veces, solo a veces por complacerte pregunta: ¿de quién eres?

PÁRAMO Ay, latido de corazón abandonado pulso de muerte venas frías tormento de pecados inconcretos luna que bate el parche de las postergacio-nes en cada fase oculta el vientre no perdona lo inconcreto del paisaje despoblado de caricias ignorado de manos y de bocas vientre inconexo inhóspito paraje donde el amor no ha pernoctado pradera yerma de huellas digitales… (¿dónde está quien debe repoblarte de verdes y de agua?) desde el hondo azul del viento surge la mano que asfixia tu garganta gritas el nombre que no descifras que no sabes y tus ojos se ciegan a la luz cuando el rostro que nunca has conocido fragmenta la retina.

IDENTIDAD “Sou um homem sou um bicho sou uma mulher…” (Mauro Kwitko) Mi mujer interior se insubordina alarido dolor llanto impotencia sueña parir el equívoco colgado en su entrepierna -naturaleza desorientada- liberarse -absurda violación- que una garra brutal me lo desgaje que un bisturí certero me lo extirpe que un mordisco feroz me lo devore me arranque de entre los muslos el martirio un monstruo de vello inexplicable fratricida y verdugo bajo epidermis refinada se revuelve enojo, ira, cólera y espanto conviven bajo piel en una mórbida dualidad adolorida certidumbre y yerro desdoblamiento hendido por un signo de interrogación que el hombre que me habita se convierta en un pantano de esperma y sangre a mis pies.

INCENDIO Capturé el instante cuando cerré los ojos la llama precursora se detuvo en el aire no quise ver los árboles arder calló la luz detuvo el vuelo el pájaro silenció el río su curso sucumbieron las águilas cuando extendí la mirada los vi agitar enmudecidos sus negros esqueletos savia en lágrimas calando el monte bajo el bosque abatido gime un rescoldo de ceniza no diluirá sus lágrimas el agua ni callará sus gritos el paisaje hay un destino de árbol subyaciendo por debajo del miedo.

SOMBRAS SILENTES Miradas subrepticias aguadas por el uso se deslizan por la piel forastera gestan epígrafes que se incrustan, inamovibles en un pensamiento aglutinado menguados los pasos, suben y bajan cuestas aprendidas de memoria sus contornos opacos aprendieron recodos para zigzaguear por un laberinto invisible que atesora el dogma disfraza el miedo y encubre el gozo sus voces son audibles desde todos los puntos cardinales pero se camuflan, indolentes en el secreto retenido que no tiene escapatoria y se confunde con el rumor del viento con las campanas de la iglesia con la piedra que cruje en la inclemencia náufragos de futuro y dopados de tradiciones se aferran al madero de los hábitos raigambre absurda entretejida en mitos maná de la ignorancia heredado por los hijos de los hijos de los hijos sin embargo hay inocencia en el misterio de sus huellas afónicas y breves en los ojos nebulosos, en las manos artríticas en el fondo del pozo de sus nocturnidades vagabundean ternuras reprimidas sobreviviendo igual que brotes frágiles de chopos quebrantados por el rayo grises, marchitas, nubladas, melancólicas anónimas esencias conectadas a un foco luminoso donde van a morir, indefectible (y necesariamente) las mariposas tristes.

COEXISTENCIA La tercera cuerda se nubla en fiero latigazo golpea la caja que vibra agónica las otras cinco tropiezan pierden la brújula canto quebrado el diapasón anciano muestra pájaro afónico su boca desdentada si rasgas oirás el fantasma de la tercera sol al aire mutilada vibrar aún sin ser.

A DESTIEMPO (madre) Se me estranguló el alma de improviso se me hizo jirón como una prenda olvidada en los alambres castigada por soles y vientos mojada de lluvia y vuelta a secar sin consideración, ni piedad ni retaceo sentí como el hilo que ataba la cometa se partía en pedazos y se me va, y no puedo dolor si soy de vos, si estás en cada célula si en sangre me recorrés, y en aire me respirás siento y no siento, estoy y no el tiempo se da vuelta y el reloj avanza sin paréntesis cómo será vivir sin vos no quiero los recuerdos me bastaban los presentes tengo miedo de perder los relámpagos que no quedan en fotos percibo que no cabrán en mi materia tu presencia, tu voz, todo lo tuyo lo que te pertenece lo que huelo y toco cada día y que desde ahora será cada palabra y cada gesto un punzante lamento en las costillas desfasaje de entrañas e intelecto mi corazón golpea, se contrae forja nudo en garganta, sangre en piel mientras la mente acomoda cada pieza y el puzzle no se ajusta faltan fragmentos (o sobran) te busco en tu dolor aquel que padeciste y no hiciste notorio a ver si algo de vos se me despierta para poder andar de ahora en más esperando el momento en que te vayas sin reintegros.

CONTINUIDAD Hubo una vez en que perdí la calma el curso la mirada hubo una vez en que el azul se transformó en borrasca el verde en fango y el amarillo cobró vida en olores putrefactos hubo una vez un espejo desgarrado la luz se abrió en miles de segmentos sucumbieron las sonrisas dejaron de existir las alegrías murió sin expiación la voluntad hubo una vez en que amanecí yerta y desnuda vacía de memoria desmenuzada en lágrimas inversas se abrió la tierra y derramó su sangre la mañana me encerré en un cuarto sin ventanas mordí la llave retrocedí semilla atravesando muros infranqueables rompiendo los acentos vuelta embrión recorrí el camino opuesto hacia un vientre materno que recogía alientos y certezas perdí el control del tiempo y del ahora temblé y rodé me esparcí en desoladas planicies de dolor hubo una vez en que nací hacia adentro vibré en llanto, en vagido primigenio y surgí hacia un mundo superior y luminoso volví a emerger con oídos en los dedos ojos en la sangre y lenguas en la piel.

CODICIA Un mar herido a hachazos se disgrega en sangre destino de mutar colores tercamente en los crepúsculos mujer arena sin ropaje estrellado despliega un muslo translúcido yergue su desnudez de pechos azulados la luna despereza deseos muertos en hálitos morados venas vientre encendido mar mutante sangre de atardecidas se arriesga a desplegar plumas de carbón ardiente enigmática la noche mujer de mil arenas cintura enarcada recibe entre sus piernas lengua salobre con un hambre clandestino de centurias y el deseo se funde arena luna lengua mar la sombra restaña heridas en fragmentos rosáceos y lilas el infinito se hunde salvajemente estremecido por un horizonte sin escrúpulos.

TUMULTO Mi pecho se alza en armas callando a gritos tu nombre sinfónicos derrumbes piedra tras piedra contra el alma herida eterna certidumbre cerca/lejos confusiones de amor te descubro en mis inextricables pulsos latiendo en mi bemol en un concertado vuelo sin escalas resucitan en mi costado paroxismos que suponía extinguidos y tu figura merodea mis rodillas anudando pentagramas.

ORIGEN Y PRINCIPIO El beso nace nace preciso, en el instante en que el deseo de ser -beso- lo impele desde los abismos nace el beso y despierta cuando la lengua se estremece y quiere y aún antes nace cuando no has pensado en el beso sino en la boca la otra boca la comarca inenarrable la boca que podría ser el designio de tu boca descuidado hálito que pre anidaba en tu lengua en tus dientes en tu saliva nace antes el beso cuando se contrae el estómago y piensas en el dibujo perfecto de su boca destino prorrumpe el beso y vuela pájaro extraviado se sumerge y bucea pez alga filamento en un mar inagotable y codicioso y vive el beso cuando es ya tú y yo consciente hacia afuera se convierte en búsqueda aletea en destellos de luz bajo los párpados y es beso al unirse en bocas lengua y saliva dos pájaros y un solo mar.

CITA Me convoca el cielo con sus torrentes azules nubes mutantes osos hipopótamos murciélagos blancos blancos blancos y dorados y malvas cuando al sol se le antojan acuarelas y cuando llueve alargo los párpados dejando que se encharquen con lágrimas de nube que corran por mi piel amapolas de agua y me atraviesen suspiros de nubes enamoradas humedad de intimidades imposibles que lloran los cielos en los atardeceres de horizontes quietos.

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MORSE Punto raya raya raya ¿punto? mesa de bar cómo se escribe sin bolígrafos ni papeles madera cicatrices señales que los dedos reconocen ._ ­_ _ _ _ _ . _. que lean los ciegos y los que no han perdido el sentido del tacto.

FUGACES I después de darlo vuelta del revés quitarle las hilachas y las migas coserle dos agujeros sorprendidos con hilo gris sin iniciales abandoné tu nombre en el recodo del Puente de las Flores II dos manos surgen desde el centro exacto de la tormenta y la conjuran -herejía- con una cruz de sal y dos cuchillos III arena que se evade mar de fondo destruyo las banderas rojas (peligro) y no entiendo por qué no obedece el mar y se empecina en este viento que corta cada intento de acariciar en verde IV un dedo dibuja en el cristal el paradigma empieza con h de hambre o de hombre y termina abruptamente con un grito

V antes era el blanco y la luz quienes me conjuraban los temores ahora me inclino por las sombras es en la penumbra donde recupero la calma con tu imagen delineada libre de sujeciones haciendo acrobacias

MIRADA MADRE (no hay barrotes) Primero aflojar y retener -hilo de barrilete- después… consumida la hebra libre acrobacia -aprendiz de pájaro- obstinación y reflejos instintivos la mirada desde lejos insufla aire para esas alas inéditas. (El libre albedrío de los que amamos se retuerce bajo nuestra propia piel)

MISOGINIA Quien me observa a través de los cristales tal vez la sombra de quien fui o de quién seré me persigue a tramos evitando las luces en los escaparates se perfila con un destello enigmático sonríe partícula de mi yo interior el otro el que existe sin reflejos y que sólo emerge cuando mi existencia necesita dos para ser uno solo.

CUATRO LETRAS Tu nombre fracciona la noche capitanea sueños ondula extendido al viento atado con gemidos al mástil de un velero ascendamos la cordillera virgen caigamos juntos a un valle silencioso para tejer ciento cincuenta y nueve trinos en dos gargantas tu nombre grano de sal vertical acantilado sinfonía quimérica antídoto de mis melancolías tu nombre grito de océano espíritu energético condensación de aguas tu nombre oración letargo movimiento de caracol marino. (el abecedario cabe en cuatro letras)

ECUACIÓN Te divido por seis y te hago niño en las manos promesas en la cabeza pájaros -que ya cantan y sueñan- en la mirada agua -quietud y espera- en los pies un ancla que te aferra a la tierra soñador distraído buscador de imposibles ahora multiplico por seis y observo: nada ha cambiado (y todo)

TARDE DE LLUVIA Y SILENCIOS Cada gota es un píxel que conforma la imagen final. Los ojos se van tras la ventana no tienen riendas ni monturas ni jinete desbocados los ojos irrumpen en un paisaje postergado calle de tierra que desemboca en un verde sin fin dos pinos empecinados en la vereda con empecinadas agujas que zumban instrumentos musicales del empecinado viento del Sur música... una retama desprovista de amarillo moja su verde intenso tarde de lluvia de ventanas cerradas desde el taller alternándose con un tango silbado el golpe del martillo -percusión- música... un largo pasillo te lleva al patio interior ladrillos rojos desparejos charcos ropa mojada olvidada en los alambres agua que se amontona y se escurre por las canaletas música... alguien canta en la cocina aires de otras tierras -peteneras- ronca voz de mujer trigueña

música... silencio música que rompe el silencio silencio que ignora ecos exteriores y que se desmenuza, se desarticula, y resbala se dilata, se incorpora a los rincones a los ángulos de los suelos, donde la limpieza se refugia a las esquinas de los techos, en donde las arañas se refugian detrás de los espejos, en donde las imágenes se refugian debajo de las mesas, en donde las niñas buenas se refugian silencio con un libro silencio rimas silencio llueve... (...y esas ganas tremendas de llorar que a veces nos inundan sin razón y el trago de licor, que ayuda a recordar, si el alma está en orsai, cHé bandoneón...)

ACERCA DE LA AUTORA

Nieves Granero Sánchez nace en Rafaela, Argentina, el 10 de marzo de 1.956. Hija de españoles emigrantes de origen andaluz. Su amor por la lectura la lleva a leer cuanto cae en sus manos, bebiendo de las fuen-tes de la literatura iberoamericana desde niña. Bien protegida bajo los faldones de la mesa o alumbrándose con una linterna en su cama, su madre la buscaba para que se entregara al descanso o a jugase con los demás niños, temiendo que fuera una obse-sión. Asimiló, de ese modo, gran profusión de palabras y expresiones que se vieron aumen-tadas, ya en su juventud, por la lectura de escritores y poetas de la Generación del ’27, una constelación de autores que surgió en el panorama cultural español, quienes influyeron de manera especial en su poesía. El amor, que la llevó a la tierra de sus padres, y la nostalgia de su propia tierra, fueron los detonantes que hicieron brotar esa lava recóndita que pujaba con fuerza en su in-terior, haciendo que su corazón fluyera en versos, versos de amor y de vida, que hoy nos ofrece en este su segundo libro de poemas: ABSTRACTO.

ABSTRACTO

NIEVES GRANERO SÁNCHEZ

2014

Una publicación de LetrasKiltras

Ars longa, vita brevis