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ANÁLISIS DE LA GESTIÓN DE RESIDUOS DE CONSTRUCCIÓN Y DEMOLICIÓN EN LA COMUNIDAD AUTÓNOMA DE ANDALUCÍA

Trabajo Fin de Carrera. ETSI

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6. CLASIFICACIÓN DE LOS RESIDUOS Y DE LOS RCD’s

6.1. Clasificación de los Residuos

Los residuos en su generalidad, se pueden clasificar de múltiples formas, debido a la gran diversidad que presentan, atendiendo a su peligrosidad, a su origen, a su estado físico, al lugar de producción, dependiendo de su composición, sus características, según las alternativas de valorización, alternativas de eliminación…

A continuación se presenta la clasificación propuesta por Avanzini de Rojas, en la publicación “Los Residuos Urbanos y Asimilables”.1

6.1.1. Atendiendo a su fuente de producción, los residuos se pueden clasificar en tres grandes grupos:

Residuos del sector primario.

o Mineros o Agrícolas o Forestales o Ganaderos

Residuos del sector secundario.

o Industria o Actividades de transformación

Residuos del sector terciario.

o Actividad domiciliaria y urbana o Actividades de distribución o Actividades de servicios

6.1.2. Atendiendo a la naturaleza de su origen:

Agrícolas

Forestales

Mineros

Industriales

…..

1 (Azanzini de Rojas, J.M. y otros, 2003, p.40)



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6.1.3. Atendiendo a su estado físico:

Sólidos (Urbanos, agrícolas, ganaderos, industriales,…)

Líquidos (Aguas domiciliarias, aguas pluviales, aguas industriales, agro-ganaderos…).

Gaseosos (Procesos de combustión, procesos industriales, eliminación de residuos…).

6.1.4. Atendiendo al lugar de producción:

Domiciliarios

De clínicas y hospitales

Procedentes de la limpieza viaria

Obra de construcción.

6.1.5. Dependiendo del tipo de materiales:

Orgánicos

Metálicos

Papel-cartón

Plásticos

Textiles

Envases y embalajes

Neumáticos

Vehículos

Enseres

Escombros y restos de obras

6.1.6. Por su grado de peligrosidad:

Peligrosos

No peligrosos

Inertes

Destacar también la clasificación de los residuos que establece el Decreto 73/20122, que clasifica los residuos atendiendo a su naturaleza, atendiendo a su origen y atendiendo al ámbito de las competencias de gestión. La dos primeras clasificaciones ya se han detallado anteriormente, mientras que la última tipología de clasificación no se contempló en la clasificación anterior, de Avanzi Rojas y por lo que se detalla a continuación.

2 (Decreto 73/2012, p.82)



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6.1.7. Atendiendo al ámbito de las competencias de gestión:

Municipales.

No municipales.

Este mismo decreto, define que residuos se consideran municipales y cuáles otros se consideran no municipales.

Residuos municipales, “son aquellos cuya gestión es de competencia municipal en los términos regulados en las ordenanzas locales y en la normativa básica estatal y autonómica en la materia. Tendrán consideración de residuos municipales:

o Residuos domésticos generados en los hogares. o Residuos domésticos procedentes de actividades comerciales y del resto

de actividades del sector servicios. o Residuos procedentes de limpieza de vías públicas, zonas verdes, áreas

recreativas y playas, los animales domésticos muertos y los vehículos abandonados.

o Asimismo, podrán tener la consideración de residuos municipales, los

domésticos procedentes de actividades industriales y los comerciales no peligrosos, cuando así se recoja expresamente en las ordenanzas municipales y en los términos en ellas indicados y sin perjuicio de que los productores de estos residuos puedan gestionarlos por sí mismos en los términos previsto en el artículo 17.3 de la Ley 22/2011, de 28 de julio”.

Como residuos municipales, también se van a considerar los residuos de construcción y demolición generados en las obras menores de construcción o reparación domiciliaria.

Residuos no municipales: “son aquellos cuya gestión no compete a las administraciones locales. Se consideran incluidos:

o Los comerciales. o Los industriales.

o Los agrícolas.

En particular serán residuos no municipales, entre otros:

1. Los neumáticos fuera de uso (NFU) que no estén en posesión del

usuario o propietario del vehículo que los utiliza.



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2. Los residuos de construcción y demolición (RCD) generados en las obras mayores.

3. Los lodos residuales de depuración. 4. Los vehículos al final de su vida útil (VFVU). 5. Los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) no

domésticos. 6. Los residuos sanitarios de los grupos III, IV y V definidos en el artículo

109, del presente Decreto. 7. Los residuos producidos en explotaciones agrícolas y en particular, los

plásticos agrícolas”.

6.1.8. Según la Lista Europea de Residuos.

Es interesante destacar la “Lista Europea de Residuos”3, incluida en la Orden MAM/304/2002. En esta lista los diferentes tipos de residuos se clasifican atendiendo a la fuente de generación.

A los residuos pertenecientes en esta lista se le asignan códigos de seis cifras, y de cuatro y dos cifras a los subcapítulos y capítulos respectivamente. A continuación se muestra la lista de los capítulos por el cual se clasifican los residuos:

01 Residuos de prospección, extracción de minas y canteras y tratamientos físicos y químicos de minerales.

02 Residuos de agricultura, horticultura, acuicultura, silvicultura, caza y pesca; residuos de la preparación y elaboración de alimentos.

03 Residuos de la transformación de la madera y de la producción de tableros y muebles, pasta de papel, papel y cartón.

04 Residuos de las industrias del cuero, de la piel y textil.

05 Residuos del refino del petróleo, de la purificación del gas natural y del tratamiento pirolítico del carbón.

06 Residuos de procesos químicos inorgánicos.

07 Residuos de procesos químicos orgánicos.

3 (Orden MAM/304/2002, Anejo 2. Consultar el Anexo VI del presente proyecto)



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08 Residuos de la fabricación, formulación, distribución y utilización (FFDU) de revestimientos (pinturas, barnices y esmaltes vítreos), adhesivos, sellantes y tintas de impresión.

09 Residuos de la industria fotográfica.

10 Residuos de procesos térmicos.

11 Residuos del tratamiento químico de superficie y del recubrimiento de metales y otros materiales; residuos de la hidrometalurgia no férrea.

12 Residuos del moldeado y del tratamiento físico y mecánico de superficie de metales y plásticos.

13 Residuos de aceites y de combustibles líquidos (excepto los aceites comestibles y los de los capítulos 05, 12 y 19).

14 Residuos de disolventes, refrigerantes y propelentes orgánicos (excepto de los de los capítulos 07 y 08).

15 Residuos de envases; absorbentes, trapos de limpieza, materiales de filtración y ropas de protección no especificados en otra categoría.

16 Residuos no especificados en otro capítulo de la lista.

17 Residuos de la construcción y demolición (incluida la tierra excavada de zonas contaminadas).

18 Residuos de servicios médicos o veterinarios o de investigación asociada (salvo los residuos de cocina y de restaurante no procedentes directamente de la prestación de cuidados sanitarios).

19 Residuos de las instalaciones para el tratamiento de residuos de las plantas externas de tratamiento de aguas residuales y de la preparación de agua para el consumo humano y de agua para uso industrial.

20 Residuos municipales (residuos domésticos y residuos asimilables procedentes de los comercios, industrias e instituciones), incluidas las fracciones recogidas selectivamente.

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6.2. Clasificación de los RCD’s

En cuanto a los Residuos de la Construcción y Demolición, destacar que existen múltiples formas de clasificación, dependiendo la fuente consultada, debido principalmente a la gran diversidad que presentan los mismos.

6.2.1. Según su procedencia



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Romero Tornero en la publicación “Residuos Urbanos y Asimilables”4, realiza un exhaustivo análisis de los RCD’s, clasificándolos según su procedencia en residuos de derribos, residuos de nueva construcción, residuos de obras de rehabilitación y residuos procedentes de obras públicas.

Destacar que en esta clasificación no se recogen los residuos procedentes de excavaciones de suelos, calles, carreteras o infraestructuras, que se consideran materiales para la restauración de suelos degradados, graveras, vertederos o similares.

RCD generado por tipología de obra [II PNIRCD]

A continuación se expone la clasificación que propone Romero Tornero.

Residuos de derribos.

Se consideran residuos de derribos a aquellos residuos que se obtienen como resultado de las operaciones de desmontaje, desmantelamiento y derribo de cualquier edificación. Algunos de los principales residuos obtenidos en un derribo son:

o Piedra o Hormigón o Cerámica y mampostería o Madera o Metales, en especial acero o Vidrios o Plásticos y aislantes artificiales o Yesos, cal, residuos mezclados, etc.

Los principales materiales que forman estos residuos son de origen pétreo, (hormigón, restos de ladrillos, cerámica) representan el 85 % del los residuos de construcción y demolición en un derribo.

4(Romero Tornero, J.M. y Otros, 2003, p.262 )

Tipo de Construcción RCD producido por m2 de edificación

Obras de edificios nuevos 120,0 Kg/m2 construido

Obras de rehabilitación 338,7 Kg/m2 rehabilitado

Obras de demolición total 1129,0 Kg/m2 demolido

Obras de demolición parcial 903,2 Kg/m2 demolido



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Tipo Demolición Nueva

construcción Reformas

Ladrillos y hormigón 85% 59% 59% Materiales no combustibles 1% 22% 20%

Madera 13% 13% 20% Materiales combustibles 6% 6% 1%

Composición RCD’s generado en una demolición [Romero Tornero, J.M.]

Para conseguir buenos resultados en el reciclaje de los residuos de demoliciones, es necesario fijar unos requisitos pre-derribo así como un pre-programa para los materiales recuperados antes de iniciar el proceso de derribo. La técnica a emplear para ello se denomina demolición selectiva y se establece en cuatro niveles:

1. Inventario de los residuos, fijando sus cantidades y destino. 2. Uso de técnicas de derribo adecuadas para poder separar los

componentes contaminantes así como los destinados a la reutilización o reciclado.

3. Evitar mezcla de fracciones ya separadas en zona de derribo. 4. Empelo de maquinaria adecuada, móvil o fija.

Con frecuencia se utilizan técnicas intensivas basadas en maquinaria pesada, adecuada para edificios muy antiguos, por sus características constructivas (pocos materiales diferentes y poca resistencia), pero estas técnicas intensivas contrastan con las indicaciones anteriormente enumeradas.

Aunque la cantidad de RCD’s generados con una demolición selectiva se reduce notablemente, hay que resaltar, que siempre habrá una fracción que no será posible separar para reaprovechar de alguna manera, debido a la alta dificultad, para realizar la separación.

Residuos de construcción.

Se consideran residuos de la construcción los productos originados en el proceso de ejecución material de los trabajos de construcción, tanto si es de nueva planta, como pequeñas obras de reparación. Algunos de los residuos más usuales que se generan en una obra de nueva construcción son:

o Restos de hormigos en masa, de revestimientos y otros. o Restos de gravas y arenas. o Maderas de encofrado o Acero o Residuos de envases, pales, plásticos, cartón, etc.



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Cabe destacar dos grupos claramente diferenciados de RCD’s, por un lado los que proviene de la acción misma de construir, donde entrarían los hormigones, morteros, ladrillos, etc. Y los embalajes de los productos que llegan a la obra, envases de madera, cartón, papel o plásticos.

Hoy en día se observa una fuerte tendencia de incorporar a la obra de construcción productos cada vez más acabados, que están aumentando notablemente la generación de residuos de embalaje en detrimento de los residuos originados por los trabajos hechos en origen, sobretodo materiales pétreos.

El porcentaje de residuos pétreos (hormigón, restos de ladrillos) en obras de nueva construcción, desciende considerablemente si los comparamos con las obras de demolición de un 81% a un 59%, en cambio se puede observar un aumento del resto de residuos excepto en residuos de madera, donde la cifra se mantiene inalterable.





Composición RCD’s generado en una obra nueva [Romero Tornero, J.M.]

Si comparamos la generación de RCD’s dependiendo de la tipología de construcción, hay que destacar que en los edificios no residenciales (industriales y oficinas) se emplean elementos constructivos y prefabricados de mejor calidad que generan menos cantidad de residuos pétreos, aunque si generan mayor cantidad de residuos de envases y residuos peligrosos. En cambio en las obras de edificios residenciales, se generan mayor volumen de residuos pétreos y menor volumen de residuos de envases.

Y si se realiza un análisis de la generación de RCD’s a lo largo de las distintas fases que forman parte del proceso de construcción de forma cronológica, hay que destacar que en la fase de cimentación, se generan pocos residuos, que se pueden reutilizar en la obra, siendo los principales residuos los fluidos procedentes de la limpieza de los hormigones y restos. En la fase de estructura y realización de cubierta, los residuos que se generan son muy heterogéneos, de origen pétreos, aislantes, cerámicos, mortero, etc. Y por último en la fase de acabado se generan una gran cantidad de residuos y muy heterogéneos, yesos, mortero, pinturas, barnices, cerámicos, etc.

Residuos de obras de rehabilitación.

Las obras de rehabilitación o reformas se caracterizan porque se producen una mezcla de residuos de carácter muy heterogéneo, con abundancia de cerámicas y yesos, pero también de maderas, hierros, metales, envases a los que incluso con frecuencia se añaden muebles y enseres.



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El porcentaje de residuos pétreos (hormigón, restos de ladrillos) en obras de rehabilitación, desciende considerablemente si los comparamos con las obras de demolición de un 81% a un 59%, pero se mantiene igual respecto a las obras de nueva construcción. En cambio se puede observar un aumento del resto de residuos comparándolos con las obras de demolición y un repunte en los residuos de madera respecto a las obras de nueva construcción.





Composición RCD’s generado en reformas [Romero Tornero, J.M.]

Residuos de Obras Públicas.

Son de gran importancia y tienen unas características propias, ya que no se producen gran cantidad de RCD’s, y estos en la mayoría de los casos son reutilizados en la propia obra de construcción.

6.2.2. Atendiendo a la naturaleza y composición. Otra clasificación de los RCD’s muy interesante, es la que propone la “Guía de

Divulgación en Materia de Residuos de Construcción y Demolición”, redactada por “CIMAS Innovación y Medioambiente” y publicada por la Consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria.

Esta clasificación se realiza desde un punto de vista de la naturaleza y composición del residuo, y divide los RCD’s en peligrosos, no peligrosos, envases y residuos de envases, residuos urbanos y por último en tierras y rocas. A continuación se profundiza más sobre cada tipología de residuo.

Residuos peligrosos5:

Son residuos que contienen sustancias peligrosas o tóxicas para el ser humano o contaminantes para el medio ambiente. En las obras de demolición y rehabilitación es donde mayor cantidad de residuos peligrosos se generan, como por ejemplo, pilas, baterías, tubos fluorescentes, luminarias con mercurio y gas, electrodos de berilio para soldadura, envases vacíos contaminados de sustancias peligrosas como pintura o barnices, aerosoles, telas asfálticas, bajantes, elementos con amianto, etc.

5 (Se profundiza más sobre los residuos peligrosos en el Capítulo 7 del presente trabajo).



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Los residuos peligrosos, como tales, no se pueden eliminar junto con el resto de RCD’s, sino que deben de ser separados y gestionados mediante una empresa autorizada a dicho fin.

Residuos no peligrosos:

Estos residuos son los que no presentan ningún tipo de peligrosidad y se pueden clasificar en residuos inertes o residuos pétreos y en residuos no inertes o no pétreos.

o Residuos inertes.

La mayoría de los RCD’s son residuos inertes o asimilables a inertes, que son los residuos que el Real Decreto 105/2008, define como “residuos no peligrosos que no experimentan transformaciones físicas, químicas o biológicas significativas, no son solubles ni combustibles, ni reaccionan física ni químicamente ni de ninguna otra manera, no son biodegradables, no afectan negativamente a otras materias con las cuales entra en contacto de forma que pueda dar lugar a contaminación del medio ambiente o perjudicar a la salud humana. La lixiviabilidad total, el contenido de contaminantes del residuo y la ecotoxicidad del lixiviado deberán ser insignificantes, y en particular no deberán suponer un riesgo para la calidad de las aguas superficiales o subterráneas”6.

No se considerará residuo inerte aquel que esté contaminado con sustancias peligrosas, ni revestido o pintado con materiales que contengan sustancias peligrosas en cantidades significativas.

o Residuos no inertes: Son residuos no peligrosos pero que a diferencia de los inertes experimentan algún tipo de transformación por ser solubles, combustibles, biodegradables, etc.

Envases y residuos de envases:

La Ley 11/1997, define los envases como “todo producto fabricado con materiales de cualquier naturaleza y que se utilice para contener, proteger, manipular distribuir y presentar mercancías, desde materias primas hasta artículos acabados, en cualquier fase de la cadena de fabricación, distribución y consumo. Se considerarán también envases todos los artículos desechables utilizados con este mismo fin”.

Esta misma ley define los residuos de envases como “todo envase o material de envase del cual se desprenda su poseedor o tenga la obligación de desprenderse en virtud de las disposiciones en vigor”7.

Actualmente son una gran mayoría los materiales que se distribuyen a los distintos centros de trabajo paletizados y envasados en cajas de cartón o plastificados, como piezas cerámicas, ladrillos, sacos de cemento, etc. Producen una gran cantidad de

6 (R.D.105/2008, Art. 2).

7 (Ley 11/1997, Art. 2)



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residuos muy heterogéneos, formados por plásticos, maderas, papel y cartón, que deben de ser separados en origen y clasificados en distintos contenedores, para su posterior incorporación a los circuitos de materiales recuperados, favoreciendo el tratamiento de los RCD’s. Si los envases hubieran contenido sustancias peligrosas, dichos envases también se consideran residuos peligrosos y tendrán que gestionarse como tales.

Tipología y destino final de los RCD’s [Guía gestión RCD Cantabria]

Residuos Urbanos:

Todo residuo que se genere en una obra tendrá la consideración de residuo de construcción y demolición, independientemente de sus características y sin perjuicio



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de las legislaciones específicas que sean de aplicación a cada una de las tipologías de residuos. Y entre los residuos que se generan en una obra, hay que destacar los residuos urbanos, que corresponde con restos de comidas y bebidas generados por los operarios, así como los residuos generados en las oficinas ubicadas a pie de obra. Este tipo de residuo se gestiona a través de los servicios municipales de recogida.

Tierras y rocas:

Las tierras y rocas no contaminadas por sustancias peligrosas, podrá considerarse un residuo dependiendo de su destino final. Si se reutilizan en la misma obra o en otra distinta, como una actividad de relleno, restauración, o acondicionamiento, no se considera un residuo8.En cambio si no se reutiliza y se deposita en un vertedero se considerará un residuo de tipo inerte.

6.2.3. Según la Lista Europea de Residuos

En la normativa de ámbito nacional cabe destacar la clasificación de los RCD’s que realiza la Orden MAM/304/2002, en la que se publica la “Lista Europea de Residuos”9. A continuación se muestra el índice del Capítulo 17, perteneciente a los “Residuos de la construcción y demolición (incluida la tierra excavada de zonas contaminadas)”.

17 01 Hormigón, ladrillos, tejas y materiales cerámicos.

17 02 Madera, vidrio y plástico.

17 03 Mezclas bituminosas, alquitrán de hulla y otros productos alquitranados.

17 04 Metales (incluidas sus aleaciones).

17 05 Tierra (incluidas las excavadas en zonas contaminadas), piedras y lodos de drenaje.

17 06 Materiales de aislamiento y materiales de construcción que contienen amianto.

17 08 Materiales de construcción a partir de yeso.

17 09 Otros residuos de construcción y demolición.

8 (Real Decreto 105/2008, Art. 3 y 13)

9 (Lista Europea de Residuos, Anejo 2)

6. clasificaciÓn de los residuos y de los...

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