1.2 el zoológico de tucson

4
EL ZOOLÓGICO DE TUCSON Ln cIENCIA obtiene la mayor parte de su información por el proceso del reduccionisffio, explorando los deralles y luego los detalles de los detalles, hasra que quedan al descubierro las rnenores porciones de la esrrucrura o las partes más Pequeñas del mecanismo, p ara conrarlos y escudriñarlos. Sólo cuando se ha hecho esro puede extenderse la investigación para ab arcar al organismo entero o a rodo el sisrema. Así decimos. A veces parece que traboiamos a pura pérdida. Gran Parte de Ia ansiedad pública de hoy ace rca de la ciencia se debe al temor de que d"iemos pasar inadverrido para siempr€, el todo, €n virtud de nuesrra obsesiva e interminable obsesión por las parres. Tuve una breve experiencia personal de esta preocupación en Tucson, dt¡nde una tarde en qge tenía tiempo de sobra, visité el zoológico, situado fuera de la ciudad. Los proyecrisras del luga Í trazaron en él un camino entre dos pequeños estan- ques artificiales con paredes de cristal transparenre, de modo gu€, colocado uno en pie en el centro áel carnino, puede mirar a las Profundidades de cada esranque y al mismo tiempo contemplar la superficie. En un esrangu€, a la derecha del camioo, vive una familia de nurrias i, ^l otro lado, una familia de castores. A uno y orro lado, a unos Palmob de distancia de la cara del observador, cas- tores y nutrias juegan bajo el agua y en la superficie, nadan haci a la cara de uno y luego se alei^'r más lienos de vida que cualesquiera orras criáturas que haya yo visro antes en toda mi vida. A no ser por el cristal, uno hubiera podido alcanzarlos y rocarlos. Quedé absorto. Según lo evoco ahtxa, sólo había una 1t

Upload: jobbanii-stgo

Post on 28-Sep-2015

215 views

Category:

Documents


1 download

DESCRIPTION

Teoría general de sistemas

TRANSCRIPT

  • EL ZOOLGICO DE TUCSON

    Ln cIENCIA obtiene la mayor parte de su informacin porel proceso del reduccionisffio, explorando los deralles yluego los detalles de los detalles, hasra que quedan aldescubierro las rnenores porciones de la esrrucrura o laspartes ms Pequeas del mecanismo, p ara conrarlos yescudriarlos. Slo cuando se ha hecho esro puedeextenderse la investigacin para ab arcar al organismoentero o a rodo el sisrema. As decimos.

    A veces parece que traboiamos a pura prdida. GranParte de Ia ansiedad pblica de hoy ace rca de la ciencia sedebe al temor de que d"iemos pasar inadverrido parasiempr, el todo,

    n virtud de nuesrra obsesiva einterminable obsesin por las parres. Tuve una breveexperiencia personal de esta preocupacin en Tucson,dtnde una tarde en qge tena tiempo de sobra, visit elzoolgico, situado fuera de la ciudad. Los proyecrisras delluga trazaron en l un camino entre dos pequeos estan-ques artificiales con paredes de cristal transparenre, demodo gu, colocado uno en pie en el centro el carnino,puede mirar a las Profundidades de cada esranque y almismo tiempo contemplar la superficie. En un esrangu,a la derecha del camioo, vive una familia de nurrias i,

    ^lotro lado, una familia de castores. A uno y orro lado, aunos Palmob de distancia de la cara del observador, cas-tores y nutrias juegan bajo el agua y en la superficie,nadan haci a la cara de uno y luego se alei^'r ms lienos devida que cualesquiera orras crituras que haya yo visroantes en toda mi vida. A no ser por el cristal, uno hubierapodido alcanzarlos y rocarlos.

    Qued absorto. Segn lo evoco ahtxa, slo haba una1t

  • 16 EL ZOOL(}ICO DE TUCSONsensacin en mi cabeza: jbilo.puro me zclado conasombro ante ral perfeccin. Curno i *i, pies no rocaranel suelu, flotaba yo de u n lado al urr,r, el cerebrogirndome en la cabe zt, contempiando asombrad, a loscastores Y luego a las nutrias. O voces que affavesabanmi cuerpo calloscl, de un hemisferio crebral al orro.Recuerdo haber pensado, con lo que de mi conciencialob* quedado, que no queru parre utguna de Ia ciencia delos castores y las nutris; no qu era l'"go, a saber nuncacmo rea lizaban sus maravillas; rro desaba noricia sobrela f is iologa de sLr respiracin, la coordinacin de susmsculos, de su t'ista, sus sistemas endocrinos ni suscpsratos digestivos. Esperaba no tener que pensar nuncaacerca de ellos como conjuntos de cluias. Todo Io queped a era la comple ta y vellosa complej idad de casrores ynutrias en movimiento, enteros e intactos, &h , tnte misojos. ----' -**Dur, larne.r? decirlo, slo unos cuanros minuros, yluego regfes a fines del siglo xx, reduccionisra corno

    srempre elucubrando ace rcae los deralles por fuerza delhbitcl, ounque, por una vez, no acerca de los deralles delas nutrias y los castores, sino sobre m misrno. Algodigno de recordar haba ocurrido en mi menre; estabaseguro; tendra gue pon.erlo en algun a parte de mi rroncocerebral; qu iz fuera esro mi sisr.*a lmbicc, en funcin.Me convert en un cientfico de la conduca, uo psiclogoexperimental, un etlogo, y en ese insranre desuparecie-ron por completo el prcldigio y Ia sensacin i. esrarabrumado. Qued aplanado

    It{o obstante, me alei del zocllgico con algoo uotrocito de noticias sobre m mismor"*-runa forma,estoy codificado, Para las nutrias y los casrores. Manifesrcomportamiento instintivo en su presencia, cuand

  • 4a:,'7ra]g:l@

    EL ZOOLCICO DE TUCSgN 17Para esta exhibicin. Los castores y las nutrias poseen un"liberador" para m, en la terminolo ga de la rolog a; yla liberacin fue rni experiencia. Qu se liber?Co*Portarniento. Qu comportamiento Esrar en pie,tarnbaleante, asornbrado, sintiendo regocijo lr un mperude amisrad, No podra, como resultao de io ru.*ido,decir nada ms acerca de los castores y las nurrias de loque ya se sabe. Nada nuevo aprend ace rca de ellos. Sloacerca de ffi, y presumo que tambin acerca de ri, qu iztsobre los seres humanos en general. Estamos prorrirro,de genes que codifican nuestra reaccin a los casrores ylas nutrias f, tal vez,tambin nuestra reaccin a cadaunade ambas especies. En nosoqros estn impresos modelosde reaccin estereotipados, inalterrbl*r, presros aliberarse. Y la conducta liberada en nosorros por ralesconfrontaciones es, esencialmente, un afecro sorpre-dido. Es una condu$a compulsiva y slo podl*o,evitarla, esforzndonos con ioo el poder d; nuesrrarnente consciente, elaborando .*c,rsur conscientes eneodo rnomnto. Deiando a nsso[ros misrnos, rnecanicis-gs y aucn*ffI*s, aruhelannos arsrigos.

    Tcdo el enundo dice que rlss manrengamos alejadosde las harmigas. No tie+n bcciones para nosorros; sonpeque*s instruments l*cos, inhumnos, incapaces decontrolarse & s mismos, faltos de buenas maneras y sinalrna. Cuarrdo estn aglorneradas,

    ft rnuruo contaffonintercambiando fragmitrros de informacin, sosrenidaesl $us mandbulas como mernorandos, integran unanimal nico. Atendamos a ello. Es un envil*.1*ienro,una prdida de individualidnd, una violacin de lanaturaleza huma fri, un acto no natural.

    Hty Personas que abogan en pro de esre punro devista con seriedad y profunda reflexin. EI mensaje rnraPor los individuos, solitarios y egofsras. Alsruirffio,palabre de ierga Fere lo flu '**olrumbraba llarnarse

  • 18 ELz;cp,L&I@ DE TUCSON".Tor;, es peor que la debilidad, es pecado, es una viola-cron de ra naturareza. permaneced separados. No seisanimales sociales- pero este es un argumento que difcil-menre convencer si tenemos en cueta que deiendemos*,1 L.:ry 1, !,?' ^ expo ne rlo. Se r a ;;; rl;'tr"p ii _ ,rolreros o pubricar ribros, venderlos y enviarros a'todaspartes; se tendra que.aparecer en teievisin y.ii, l,arencin de millones ddotros seres humanos ;;;..,decirles a todos ellos, a todos

    "l -ir*o ,p",'i"a*reunidos y arenros:.sed solitarios; no a.p."ii!,rrro, .otros. No se puede hacer esto y, al mismo tiep,r,manrener una expresin facial dlcrada

    Quiz sea el alrruismo nuesrro arributo msprimitivo, lejos de nuestro alcance; ms all de nuestrocontrol. O tal v33 lo.tengamos a mano, disponible,esperando a ser liberado, disfrazado

    "hor., .i.""orr":iyili:*Ti9r:.9-g afecto, "mistal o vinculacin. No veopor qu habra de ser irracional el que il";il;;.;humanos tuvisemos cadenas de aoN enrolladas encromosomas, que codificasen nuestros instintos para lautilidad v ta soridaridad. I utilidaq ;;'rdlfi;;fuera Ia prueba ms dura a.

    "priiua para la superviven-cia, ms importante .que t" .gr.r;,;;il:;i; Ilar*a, que la usurpaci" uot.r.. Si sra .,l" .r"r. . Iinformacig.n gy. l-a ciencia Uiofl,[i." nos depa-r, O"rrli futuro, aplicable ranro . ,rorotroi como a las hormigas,

    Eenr,orrces.esroy por completo del lado de la .i.;;l;.. rray algo que me gustara saber ms que nada: *"ndo $aquellas hormigas consrruyeron su h",il**;;; *todas en l aglomeradas ,orrdor" ycambiando noricias. Fy la masa entera empreza a cornportarse como,r* .ri"lril &ranica y enorme y pientlrqu ,ryo, es ese p.rrr..i.i: Eto? Y, ya que.rt"-os en edo,

    -.gu'rrrri. ,.U.r.tjo.* , Ecuando eso sucede saF atgo aceri. de e'o

    "ffi;;i;;;,_ Ega en partiarlar? se le ponen los pelo"Je"pun;;t"" $KEtrgE