Módulo V. Identidad: arte y multiculturalismo1. El multiculturalismo ¿reconocimiento o asimilación de

identidades?

Alumna: Beatriz López Gómez

Podemos comenzar por resolver o desmembrar como inicia este discurso del colonizador y descolonización del pensamiento, sí pero a partir de ese pensamiento creativo de las artes plásticas , periodo que también se denomino arte global, en el pensamiento de Guasch, Anna Maria (2005). “El multiculturalismo”, en El arte último del siglo XX

¿Y que se piensa de la multiculturalidad? Todo comienza cuando se descubre que no somos los únicos

en cuestión de cultura; es en este momento que surge el reconocimiento del fin de una especie de monopolio cultural, sea este ilusorio o real, nos sentimos amenazados con la destrucción de nuestro propio descubrimiento. Como menciona Guasch, Anna María (2005) “De repente, resulta posible que existan otros, que nosotros mismos seamos otro entre otros

Al mismo tiempo, Guilbaut constata la transformación radical del canon estético, el cual “integra voces y culturas diferentes” en los nuevos circuitos de bienales y otras instituciones “deslocalizadas” que forman parte de una suerte de circuito de turismo cultural y donde podemos mencionar como primer ejemplo de Exposición de multiculturalismo. The «Magiciens de la Terre», inaugurada en el Centre Pompidou de París en 1989, o «Cocido y crudo», que se pudo ver en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS), en 1994, supusieron un punto de inflexión para el sistema artístico, controlado hasta entonces por artistas europeos y norteamericanos (hombres, mayoritariamente)

¿Qué se pretende con la descolonización a través de las diferentes bienales y otros proyectos de descolonización?

Intentan vertebrar y articular una cultura de la diferencia no occidental, como puede ser la de arte africano, una cultura de descentramientos y desfiguraciones no excluyentes, sino incluyentes que tiende, como plantea Horni K. Bhabha, a diluir las fronteras en experiencias intersubjetivas y colectivas

Guiada por 0. Enwezor, la Bienal de Johannesburgo exploro como los imperativos económicos de los últimos quinientos años habían producido fusiones culturales y disyunciones resistentes, y como en un mundo en transición, Ia cultura y el espacio habían sido desplazados por los conceptos de colonización; migración y tecnología

La exposición que recreo los horizontes propios de los objetos del arte que se podría llamar etnográfico, horizontes indispensables para interpretar las distintas tradiciones culturales. En la curaduría de los artistas y de las obras el encardo fue Jean-Hubert Martin, en el Museo Georges Pompidou en 1989 “Les magiciens de la Terre”, cuyas repercusiones no se hicieron esperar. No solamente por lo que implicó en la conceptualización de una nueva relación entre la producción artística y la línea casi imperceptible entre la creación y la acción creativa en relación a otras experiencias que Occidente no había clasificado como arte propiamente; primo mas la representatividad, e1 aura, la originalidad y la inventiva en relación al contexto de partida que las cualidades formales de las obras: En lugar de una simple colección de objetos, la ex posición retine obras y objetos duraderos o efímeros realizados por artistas ya descubiertos

La mirada euro-céntrica está sujeta a problemas distintos, en ocasiones espantosos !Claro desde su mirada! Colonizadora; cuando se fija en lo que culturalmente se considera otro , o el otro. Es ala vez una ilusión y un error histórico el pensar que por el simple hecho de organizar una exposición conjunta se pueda hablar de igualdad en la arena cultural por ejemplo: la obra del “mexicanismo” muy en boga en los años 80’ de Julio Galán y una instalación de José Bedia que hacía referencia a Mamá Kalunga de la tradición de Palo Monte en Cuba, todos ellos conviviendo con artistas claramente occidentales. Para otros significaba un agotamiento del arte contemporáneo occidental y la necesidad de mirar al Tercer Mundo, hacia “afuera” de sus paradigmas. Mientras que para muchos de estos artistas de formación académica o de arte tradicional, los que eran considerados artesanos o inclusive no artistas, era mirar desde “adentro” a Occidente.

Podría mencionar que en las dos décadas donde se genero la idea del colonialismo artístico ya estaba siendo planteada por los artistas y los teóricos del Tercer Mundo, por lo que transformaron la posición sobre el enfoque del arte; desde una mirada etnográfica, el conceptos de otredad, multicultural, entidad, identidad, apropiación, entre otros, cobran una nueva significación o contemporaneidad podríamos hablar en un momento de re-significación de lo empoderado, o hegemónico . Aunque el propio Jean-Hubert Martin dijo tiempo después en una entrevista “Que si a él se le permitía escoger qué era arte en África, un africano no podía hacer lo mismo, que todavía no se lograba esa reciprocidad refiriéndose a los Exposición de los

“Magos de la Tierra”