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# 89 diciembre 2015
- Transmutación: Hacia una conciencia de participación universal
- Radio Vuelos: Relato de una construcción conjunta
- Camino hacia la paz y la plenitud del alma
de búsqueda interior Revista Vuelos | Diciembre 2015. Nro. 89
StaffDIRECCIÓN EDITORIAL Y REDACCIÓN
Lic. Virginia Beduino
ASISTENTE DE REDACCIÓN Y CORRECCIÓN
Lic. Silvana Caletti
DISEÑO GRÁFICO
DG Verónica Rositto
IMPRESIÓN
Acquatint. Alem 2254 | Rosario | Argentina
Vuelos
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DPTO. DE SUSCRIPCIONES
COLABORAN EN LA DISTRIBUCIÓN
Perla Herrera (Catamarca)
Nidia Bonino (Córdoba)
Edna Agostini (Jujuy)
Nestor Frezzi (Mar del Plata)
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Roberto Giunta (Santa Fe)
Augusto Wottitz (Stgo. del Estero)
Alejandra Cabrera (Resistencia)
Oscar Alberto Abregu (Tucumán)
Diego Iglesias (Salta)
Indice
03. “Hagamos emerger todo el potencial de bien
que albergamos en el corazón”
06. Resignificación del trabajo.
08. Reflexiones Conceptuales.
12. Poesía: Te Veo
16. Actividades de Extensión
19. Hacer Silencio
21. Reflexiones: La vocación de Renuncia.
Abrazar un método y cumplirlo fielmente hasta el final es lo que nos permitirá pasar todas las pruebas y
triunfar. Nuestro triunfo es sobre nosotros mismos, sobre nuestros condicionamientos; es lograr sobrepo-
nernos a las debilidades propias de la naturaleza humana, a los momentos en que nuestras elucubraciones
mentales nos confunden. El Reglamento de Cafh brinda un Método que da dirección y un sentido a la vida
de quien lo elige, al recordarnos los parámetros dentro de los cuales hemos elegido movernos. Nos llama a
seguir un procedimiento determinado y, si lo cumplimos, nos capacita para hacernos dueños de nosotros
mismos, ya que nos permite conocer nuestros límites y trascenderlos.
El Método que propone Cafh, más que referirse al modo de conseguir algo determinado, nos llama a elegir
conscientemente la intención con que impregnar la totalidad de la propia vida. Muchos se preguntan: ¿Qué
puedo hacer con mi vida, mi pequeña vida dentro de la vastedad del universo? ¿Qué espero de mí y qué se es-
pera de mí? ¿Cómo responder a las necesidades del mundo? El hecho de participar nos permite resolver estas
y muchas otras inquietudes. Al estar orientados por un método buscamos en nosotros mismos la solución a
los problemas del ser y de la existencia, no esperamos de los demás y de la vida las respuestas.
Contamos con un Método que nos allana el camino con una orientación clara, sencilla, que abarca todos
los aspectos de nuestra vida. No necesitamos gastar nuestras energías buscando qué hacer y cómo hacerlo.
Desde el momento del despertar hasta el de descansar, y aun durante el sueño, tenemos a nuestro alcance
una guía sistemática, practicable y efectiva para desenvolvernos plena y libremente.
Estudiemos detalladamente los sabios y medidos consejos de nuestro Método. Practiquemos con fidelidad,
profundidad y constancia lo recomendado y construyamos de ese modo el mundo que anhelamos para bien
de todos. Apliquemos nuestra creatividad en establecer nuevos hábitos que nos permitan salir de viejos mol-
des, renovarnos y espejar en todo nuestro quehacer actitudes de renuncia a nosotros mismos.
El Método es armónico y de desarrollo integral. Si lo estudiamos cuidadosamente, veremos que abarca todos
los aspectos de la vida y nos induce a desenvolvernos equilibradamente.
Se trata de una excelente herramienta para ubicarnos. Nos enseña a no darnos ni más ni menos importancia
de la que realmente tenemos en relación con las almas, la vida y el cosmos. Nos induce a detenernos, a hacer-
nos dueños del momento en lugar de ser arrastrados por él y nos lleva a tomar conciencia de dónde están
nuestros sentimientos y pensamientos.
(*) Fragmentos extraídos de Alocución de Clausura Sr. José Luis Kutscherauer- Asamblea Cafh 2015
Reflexiones sobre el Método de Cafh (*)El camino de la vida no es un sendero llano, parejo, siempre igual. Tiene tramos
más fáciles y otros más difíciles, planicies y pendientes escarpadas; a veces se
encuentra despejado y otras, lleno de obstáculos. ¿Cómo lograr perseverar frente a
estos cambios sin desanimarse y sin echarse atrás?
De un enfoque personalista a una conciencia de participación universal
En el marco del Ciclo “Encuentros”, que se realizó durante
todo el año 2015 en la Sede Cafh Rosario, Carlota Werbin
brindó una conferencia titulada “La transmutación”.
COMPARTIENDO SIGNIFICADOS: Transmutación
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Como disparador inicial, la disertante mostró en pantalla las diez palabras del desenvolvimiento espiritual: Callar, escuchar, recordar, comprender, saber, que-rer, osar, juzgar, olvidar, transmutar, junto a la imagen de un sol naciente.
Esa imagen marcó el inicio de la siguiente charla:
Vemos un sol naciente sobre el planeta como símbolo del despertar a una vida más luminosa, más conciente. Por eso decimos, despertar al sentido de la vida.
Tenemos las 10 palabras, y vamos a trabajar sobre el último de los pasos de esta sucesión, aunque debemos recordar que lo importante es tomar en cuenta el contexto dentro del cual se desarrollan estas charlas, que es el desenvolvimiento a través de las actitudes y estados interiores que definen esas palabras.
A su vez, vamos a relacionar callar con escuchar (solo se puede escuchar callan-do) recordar con comprender (nuestra memoria hace posible la comprensión como experiencia), saber querer, solo la sabiduría nos permite querer con con-ciencia y osar, juzgar y olvidar (atreverse a juzgar con ecuanimidad dejando a un lado la carga emocional de nuestro pasado. Y después de este vuelo de pájaro sobre el proceso, llegamos a la transmutación que lo cambia todo.
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Tengo un gran dilema y preocupación: ¿Cómo haré para transmitirles lo que mi mente no alcanza a racionalizar y llegar al nivel de un estado (la transmu-tación) que intuyo en toda su grandeza sin empequeñecerlo, dándole todo el alcance y la amplitud que le corresponde y al mismo tiempo llevarlo a nuestras posibilidades cotidianas?Y es tan amplio el concepto, tan evanescente cuando no queremos limitarlo con palabras, con conceptos, ya que escapa a toda racionalización dentro de los pares de opuestos, que cuando hago una afirmación la niego al mismo tiempo y sólo con metáforas creo poder arrimarme a la idea de la transmuta-ción.Y lo digo porque cuando afirmo que hemos llegado al final del camino, lo cual es verdad, al mismo tiempo pienso que no hay final, que el horizonte de lo conocido se va corriendo a medida que lo alcanzamos y nuevos campos y posibilidades se abren para nuestras vidas.Dentro de este contexto puedo decir entonces que los que han asistido a las anteriores conferencias saben que hemos llegado al final de la larga trayectoria en el desenvolvimiento espiritual, guiados por la conducta a que nos han indu-cido las diez palabras, hasta llegar a la transmutación.Y también que este proceso no es lineal sino circular, es decir que no es necesa-rio atravesar todas las etapas para lograr el desenvolvimiento sino que se sigue callando (haciendo silencio) por ejemplo a lo largo de todo el proceso y la transmutación se va dando a cierto nivel en todas las actitudes y momentos de nuestra vida.Después de esta introducción vamos a desarrollar esta charla tratando de defi-nir y entender primero qué es el desenvolvimiento espiritual.
Desenvolvimiento espiritual1-Expansión de la conciencia2-Renuncia En la segunda imagen que expuso la disertante, un camino simboliza la trayectoria de la búsqueda conciente del desenvolvimiento. Todos en la vida se desenvuelven y adquieren experiencia en algún sentido. Pero el desarrollo conciente implica un trabajo interior y exterior que acelera y da sentido a ese trabajo. Por eso se habla de camino de desenvolvimiento.Podríamos decir que el desenvolvimiento espiritual es el desarrollo de todas las potencialidades, a través de un trabajo interior y exterior que comienza cuando comenzamos a preguntarnos cuál es el sentido de nuestras vidas, para qué vivimos, como si quisiéramos mantener viva la conciencia acerca de por qué
estamos aquí.Es un continuo llegar a ser acompañado de la plenitud de cada descubrimiento que hacemos desde el contexto en el cual estábamos ubicados, desde donde partimos. Lo cual es lo mismo que ser ahora, en el eterno presente.
Uno no puede esperar que la vida le dé respuestas. Nosotros damos respuestas a la vida.Uno comienza a hacer cosas porque hace falta hacerlas, y hace falta responder a las exigencias de la vida. Por supuesto aprendiendo a gozar de lo que hace falta.Hablamos también de expansión de la conciencia.Podemos definir primero qué es un estado de conciencia. Nuestro estado de conciencia es lo que en realidad somos, como la síntesis de nuestras emociones, pensamientos, comprensiones, anhelos, esperanzas, en qué nivel se mueven, se expresan. La expansión de la conciencia es un proceso en el cual vamos incorporando dentro de nosotros espacios cada vez más amplios, como lo que realmente nos importa, cual es nuestro mundo, nosotros, nuestra familia, nuestra ciudad, los hombres, el planeta, la vida del universo.La idea fuerza sobre la que se sustenta este trabajo continuo de expansión de la conciencia es la renuncia. Vivir es cambio permanente y el cambio nos cuesta, nos apegamos a lo que “tenemos” a lo que “estamos viviendo”; pero inexora-blemente todo termina. Por ello, si cambiamos la actitud de querer que todo perdure por la de aceptar lo que viene y que se vaya lo que tiene que ir, podemos vivir el presente con ple-nitud, con conciencia, “tomando y dejando sin mirar atrás”. La única plenitud que uno puede lograr y que no depende del tiempo es cuando en el fondo uno no quiere nada, no es que no tenga proyectos u objetivos, pero conoce la relati-vidad del valor de las cosas. Es como aquel que camina tranquilo en estos tiempos porque no le pueden sacar nada, porque no tiene nada. O lo que tiene lo dejó en casa.
La mayor parte de nosotros pasa rápido por el encuentro con uno mismo, para no ver.
Qué es la transmutación: Cambio cualitativo que tenemos de nosotros mismos y de nuestro entorno.
Después de estas consideraciones generales sobre este proceso que estamos estudiando, vamos a ver qué es la transmutación.En la transmutación se produce un cambio cualitativo en la noción de ser que te-nemos de nosotros mismos y de nuestro entorno, la expansión de nuestro estado de conciencia.
No hablamos de cambio solamente sino de transformación, a eso alude la expre-sión, más allá de una mutación. De ahí la imagen, una crisálida transformada en mariposa, que no es solo un cambio, es una transformación total.
En la mutación están implícitas todas las palabras: desde el comienzo solo aca-llando nuestros preconceptos podemos transmutar en conciencia las enseñan-zas que nos brinda la vida.¿Cómo enfocamos la vida? En forma personalista. Nos sentimos seres separa-dos e independientes . Basándonos en nuestra percepción sensorial, no es evi-dente que nuestros actos repercutan directamente sobre el medio y sobre la vida de los demás. Así es que tendemos a ser concientes solo de lo que nos importa, el bienestar de nuestras familias y de nuestros intereses personales. Sólo nos importa alcanzar nuestras metas particulares, nuestra felicidad personal. No solemos darnos cuenta de que vivimos en relación, lo sepamos o no; lo que-ramos o no y que estamos influyendo y siendo influidos constantemente por lo que acontece, en nuestro pequeño entorno y en todo el contexto de la humani-dad y del cosmos.En la transmutación transformamos ese enfoque personalista y lo reemplazamos por una conciencia de participación universal, nos abrimos a las necesidades de los otros, a la realidad de la vida, del mundo, del universo.
¿Por qué a este proceso lo llamamos transmutación?Hacer de la materia mente y de la mente materia
Vemos ahí un alquimista (precursor de los químicos). La transmutación alude metafóricamente a sus manipulaciones que desde los tiempos de la alquimia creían posible: la transmutación de elementos de la naturaleza en otros de dis-tinto peso atómico, sobre todo desde que se conocía que la densidad del oro y el plomo eran muy semejantes.
La transmutación implica la alteración de los núcleos atómicos; para cambiar un
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elemento en otro hay que modificar el número de protones que hay en el núcleo. El plomo tiene 82 protones y el oro 79. Así que, para transformar el plomo en oro debe perder tres protones. No sólo es teóricamente posible, también se ha hecho en la práctica, pero para hacerlo se necesita consumir mucha energía, tanta que el oro resultante es más caro que comprarlo en el mercado.La búsqueda de la piedra filosofal, la alquimia, que consiste en hacer de la mate-ria mente y de la mente materia, expresa metafóricamente hacer de la experien-cia conocimiento y del conocimiento creatividad.La similitud es evidente: en este estadio transformaremos el enfoque personalista (el plomo) con que vivimos por una conciencia universal. Y esta transformación no es simple: implica una permanencia constante y conciente en una conducta participativa.
Antes y después de la transmutación
Imaginemos dos caminos que se bifurcan. Uno parece un camino recto, el otro parece sinuoso. Hay un momento de nuestras vidas en que aparece la posibili-dad de elegir, es como un despertar a una nueva posibilidad.Podemos elegir vivir nuestra vida como en un sueño, con una visión estereotipa-da y fija de los hechos o iniciar un proceso de discernimiento, coherencia, res-puesta a la comprensión en el contexto mayor que puedo abarcar y es expresión de libertad, de compromiso y responsabilidad.Decimos proceso de discernimiento porque nuestras elecciones no serán el fruto de un impulso solamente sino responderán a una elección conciente.De coherencia porque nuestros actos responderán a nuestro pensamiento y nuestro sentir más profundo.También podemos decir que permanecemos en la renuncia cuando en cada momento elegimos la respuesta a las circunstancias en el nivel más elevado que podemos abarcar.Somos más libres cuanto menos respondemos a impulsos inconcientes y mayor es el campo con el cual nos comprometemos y nuestra visión alcanza una mayor amplitud.
Egoísmo: sentimos que somos personas separadas e indepen-dientes de los demás
No podemos ocupar dos lugares en el mundo, solo uno, el nuestro.Hablando metafóricamente, vemos seres pesados como el plomo, atrapados en sus ideas hechas, sus prejuicios, sus valores envejecidos, sus deseos, sus hábitos, sus pasiones, sus amores y sus odios, que miran la vida y las relaciones humanas a través del lente distorsionado de su enfoque limitado y personal.
¿Qué sentido tiene la vida para ellos? Tal vez el triunfo de sus ambiciones. Al-guien me dijo una vez, ya no es el afán de riqueza, sino el poder, el dominio sobre el otro, el hacerle agachar la cabeza, humillarlo y destruirlo, si es necesario. Los veo arrastrando pesadamente el plomo de su carga personal.Estamos acostumbrados a escapar de nuestra propia imagen, no queremos ver-la. Mejor mirar hacia fuera, ver qué hacen los otros, juzgarlos, criticarlos, ocupar nuestro tiempo y nuestra mente en la vida de los demás.También escapamos al pasado o al futuro. Perdemos el precioso momento del huidizo presente, este precioso momento que nos concede la vida para Ver, para Comprender, para comunicarnos, para Amar. Aquí y ahora es cuando se nos dan todas las posibilidades, no hay otro momento, no hay otro instante.´Egoencia: expandimos la conciencia hasta valores universales
La disertante Carlota Werbin eligió para ilustrar este fragmento, la imagen de un arreglo japonés. “La elegí porque me pareció expresión de equilibrio, de belleza y silencio”, explicó al auditorio.
Y prosiguió: Transmutamos el egoísmo en lo que llamamos egoencia, una indivi-dualidad identificada con la conciencia cósmica. ¿Qué queremos decir con eso? Llegamos a ser personas identificadas con la vida universal, con las necesidades de aquellos que están cerca nuestro, con la naturaleza, con el planeta, con el mundo. Al mismo tiempo nos desarrollamos plenamente como personas, que viven con plenitud y serenidad las circunstancias que les toca vivir.Su vida resplandece como el oro que con sus destellos ilumina y vivifica. Enton-ces, el desenvolvimiento espiritual es un proceso de expansión permanente de la noción de ser, que también podríamos decir sucede por etapas, la última de las cuales es la transmutación de los valores personales en universales.Y aquí cabe una pregunta: ¿cuáles son los valores personales y cuáles los univer-sales? Creo que son los mismos porque siempre son valores humanos pero su alcance es totalmente distinto. Me pregunto entonces: ¿Qué cabe dentro de mi conciencia? ¿Cuáles son mis preocupaciones? ¿Cuánto de mi mundo abarca? Solo yo, mi familia, mi barrio, mis vecinos, mi ciudad, mi país, el planeta, el dolor del mundo? Reconozco al otro con sus necesidades, su pensamiento, su cultura? O estoy tan cerrada a mi propio yo que sólo percibo mi alegría, mi dolor, mi necesidad?¿Estoy atrapada en Mi verdad, Mis opiniones, Mis conceptos, veo la vida con el lente distorsionado de mi pequeño mundo personal?
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Quiero una vida que sea valiosa, que tenga sentido, con un objetivo que me tras-cienda. Que no se pierda en resentimientos, deseos no cumplidos, inquietudes, búsquedas inútiles. Que no haya violencia ni pasión destructiva en mi corazón.
Callar y escuchar: la transmutación a través del silencio
Hay algo muy importante. La transmutación de los valores no es solo el resulta-do final de un estado de unión con lo divino desconocido, sino que se va dando tomando diferentes modalidades a través de todo el proceso.A través del callar y escuchar dejamos a un lado una actitud inconsciente de aferrarnos a nuestras ideas hechas, a nuestra interpretación de la realidad, a las expectativas que tenemos acerca de los demás y de la visión acerca de cómo son, y la transmutamos a través del silencio interior que nos permite escucharlos.
Vemos a una persona que tal vez no veíamos durante mucho tiempo, pero de la que teníamos ya una idea de cómo era, qué pensaba, cómo actuaba. No le damos la posibilidad de que tal vez en el tiempo haya cambiado, que ya no sea la misma persona. Y con esa idea rondando en nuestra cabeza, no la escuchamos porque con nuestro discurso interno no hay silencio en nosotros. Con el silencio logramos una actitud abierta y expectante ante los sucesos y las personas para percibirlas tal como son. Podemos así responder a sus necesi-dades y lograr una mejor comprensión del mundo, de los demás y de nosotros mismos.
Recordar y comprender Consideramos varios contextos en nuestra comprensión de la realidad.El contexto individual, el de nuestro medio, el del medio humano y el gran con-texto de la totalidad de la realidad.Vemos en la cabeza todo ordenadito, los libros son lo aprendido, lo hecho expe-riencia. Recordamos nuestro pasado sin volver a experimentar los sentimientos que lo afectaron y lo entendemos y comprendemos con mayor discernimiento. Veremos qué pasa en los diferentes contextos, cómo se realiza la transmutación de nuestros valores.Dentro de nuestro contexto individual transmutamos nuestra tendencia a jus-tificarnos y a criticar, por una actitud de comprensión de nuestras situaciones cotidianas y de nuestra interacción con nuestro medio inmediato a través de la participación.
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Dentro del contexto del medio humano transmutamos una posición de intran-sigencia y de separatividad por los diferentes pueblos, por la comprensión de su cultura y de su historia.Dentro del contexto de la totalidad de la realidad, el universo, transmutamos todo dogmatismo sobre nuestras creencias por una ubicación en la inmensidad de la vida, estableciendo una relación armónica entre nuestra limitación y tem-poralidad con lo infinito y eterno.
Saber querer
“Elegí la cabeza con una luz como símbolo de la sabiduría que va más allá de la comprensión”, explicó la disertante para continuar…
Transmutación de nuestras comprensiones inestables afectadas por nuestros estados de ánimo y nuestros impulsos, deseos y pasiones, por una conducta prudente alimentada por la reflexión y el autocontrol.La comprensión se transforma en saber que es prudencia, sentido común, acep-tación, fortaleza ante la adversidad y sabiduría que se transforma en amor.
Osar, juzgar, Olvidar
Venid al borde, dijo la vidaTenemos miedo, contestaron ellos.Venid al borde, dijo la vida. FueronLos empujó…. Y volaron.Apollinaire
Transmutamos los límites que ponemos a nuestro desenvolvimiento por nues-tros miedos, nuestro deseo de seguridad, nuestra ilusión de vivir un futuro sin incertidumbre por la osadía de vivir este presente con toda conciencia y profun-didad, este presente efímero que ya dejó de ser. Este presente continuo que es la eternidad. Conservo la conciencia de mí en este estar en el presente continuo.Decimos vivir al borde porque el futuro es incierto, desconocido, solo hay apa-riencia de continuidad con este instante presente pero cualquier circunstancia puede cortar con esa continuidad de sucesos predecibles.Transmutamos nuestros juicios negativos que no se ajustan a nuestros gustos, nuestros hábitos o nuestros dogmas por un juicio ecuánime que toma distancia de nuestra manera de sentir y de pensar, pudiendo así discernir lo temporario de lo permanente, los hechos de las opiniones, las evidencias de las creencias.
Recuerdo haber dado con vehemencia una definición, y me respondieron, es solo una opinión. Y haber repetido la idea de mis maestros segura que estaba en la verdad, cuando ellos ya tenían otro concepto.Transmutamos nuestras ataduras a nuestro pasado con sus logros, sus miedos y sus rencores por una visión lúcida y desapegada de los hechos vividos, recupe-rando así nuestra verdadera historia.
Transmutar
A lo largo de la vida penetran en nuestra mente diferentes comprensiones y visiones de la realidad, de los móviles propios y de los que nos rodean, que con-forman un estado de conciencia que nos es propio. Somos como somos, según nuestro estado de conciencia. Pero nuestra vida es un proceso y cuanto menos nos atemos a una visión estereo-tipada y fija de los hechos, propios y ajenos, cuanto más rápidamente podamos cambiar expansivamente, se expresará en nosotros más libertad para ser, para entender, para comprender, para saber, para transmutar.Hoy pienso y siento de determinada manera, pobre de mí si mis pensamientos y sentimientos son los mismos en el tiempo. Me dirían estructurada, porque el armazón que me sostiene sería más importante que el contenido, no entendería la necesidad de los cambios, las necesidades de los otros y mi propia necesidad de desenvolverme.
¿Queremos repetir incansablemente las mismas experiencias, vivir los mismos errores, las mismas angustias de no ir hacia donde tenemos que ir, adonde el nivel más elevado de nuestra conciencia nos sugiere para dar las respuestas más adecuadas a las situaciones, o queremos transmutar esa conducta?
Así las experiencias que vamos viviendo nos enseñarán, nos harán recorrer el trecho que nos guía hacia el horizonte que ahora percibimos, para que desde allí descubramos otras posibilidades de libertad y de amplitud. Antes que las posibilidades que nos da la vida desaparezcan para siempre.
“Elegí como imagen unas cadenas rotas, como símbolo de libertad”, expresó la disertante, mientras explicó las razones de su elección: “Porque la transmu-tación de los valores personales en universales es también alcanzar la libertad de ser uno mismo, libre de apegos, de impulsos inconcientes, de dependencias sensoriales y pasionales. Así nuestra mente y sensibilidad abrazarán la vida con plenitud y aceptación”.
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Conductas que expresan la transmutación de los valores
Lo que conversamos sólo se valoriza sí podemos transformar en conductas nues-tro enfoque personal, transmutado en un enfoque más universal que expanda nuestro estado de conciencia.
• Nos integramos a acciones conjuntas en lugar de sentirnos personas separadas con intereses particulares.• Desarrollamos una actitud de colaboración, de compartir, de participar.• Trabajamos en forma mancomunada en función del bien común.• Compartimos significados.• Trabajamos en equipo en la familia, la sociedad, el país con miras al bien de la humanidad.• Nos abrimos a las ideas de nuestra cultura y de otras culturas.• Validamos en lugar de descalificar• Colaboramos en lugar de rivalizar• Dialogamos y tratamos de comprender en lugar de discutir.• Ayudamos en lugar de criticar o enojarnos• Incluimos en lugar de excluir o excluirnos.
Nuestro desenvolvimiento no consiste en tirar por la borda el conocimiento o la comprensión que hemos alcanzado para asirnos a algo diferente, sino en trans-mutarlo en un proceso de realización continua que nos abra a una posibilidad nueva con cada paso que demos.
Como dice la enseñanza de Cafh, osar amar con un amor tan profundo que po-damos transmutar el dolor y el gozo de la experiencia en alimento espiritual para nosotros y para todos los seres humanos.
Desde el silencio te invoco,
Y todo suena a hueco.
La vida es un río
Corriendo en la llanura,
Despacio, sereno,
¡Tan lleno, tan lleno!
Rodando entre las piedras,
Saltando, saltando.
¡Señor! a Ti te pido
Ser fuerte en el Camino,
Mantener abierto
El lecho de mi río,
Así Tú te reflejas
Con tu infinita paciencia,
Desatando mis nudos,
Abriendo mis corazas…
-desatando-
Descubriendo el sentido
De la vida que pasa.
Ayúdame a brindarte
Mi renuncia cotidiana,
Buscando Tu presencia
En las almas cercanas.
Poesía
Buscando a DiosElena TruneckaParticipante del taller de escrituraPcia. de Mendoza
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¿Por qué la radio?“En relación con otros medios de comunicación, la radio
genera una situación comunicativa muy particular en
la que emisor y receptor se ven sin ser vistos, en la que
se perciben espacios sin ser percibidos, en la que, sobre
la “nada”, se dibujan mares, ríos, montañas, animales,
rostros, sonrisas, tristezas... La radio, como muchas veces
se ha dicho, es un medio ciego pero también es, al mismo
tiempo, un mundo a todo color”.
Esta descripción, en la actual experiencia que compar-
timos en Radio Vuelos, se percibe tal como describe la
cita: las voces comienzan a relacionarse con los oyentes
y armamos entre todos un círculo en el cual los temas se
comparten, se construyen y se disfrutan. Desde nuestra
experiencia destacamos el diálogo y las opiniones de los
oyentes que se comunican durante el programa en vivo
y en diferido por teléfono y por Facebook. Ellos nos dan
herramientas e ideas para continuar con la diagramación
de temas. Los programas también se suben a la página
web y hay muchos oyentes que los escuchan en otros mo-
mentos de la semana. Radio Vuelos también es un medio
de difusión de las Actividades de Extensión que se realizan
semana a semana en distintos lugares de la Argentina y
de otros recursos con los que cuenta la Fundación Cafh,
como la Revista Vuelos, publicaciones y libros.
Cada semana, una aventura de búsquedas y concreciones.
Elegir un tema y pensar cómo desarrollarlo es la aventura
de cada semana. Imaginarnos qué puede interesar a nues-
tros interlocutores y, además, propiciar su participación.
Ahora bien: ¿cómo se llega a conformar un programa
de una hora? Se organiza una actividad de producción,
en la que participamos todos los integrantes del equipo,
asumiendo la responsabilidad individual de los ítems
asignados, para luego, en un análisis conjunto dar el
marco a desarrollar. Es muy interesante el recorrido que
realizamos cuando tenemos la oportunidad de entrevistar
a personas relacionadas con la temática propuesta, ya que
nos permite de antemano generar un clima de confianza y
fluidez que logrará que los oyentes disfruten de este nuevo
contacto.
Es oportuno detenerse y reflexionar sobre la referencia que
el director de Cafh, Sr. José Luis Kutscherauer hace de las
actividades de extensión en la Alocución de Apertura de
la Asamblea 2013: “Si bien entre todos hemos ido dando
forma y afinando el sentido que queríamos darle a las
Actividades de Extensión, necesitamos acotar más aún su
función específica. Sin duda, es largo el sendero recorrido
y grande la riqueza que esta experiencia nos ha dejado. A
todos nos ha beneficiado, ya que hemos tenido que apren-
der a sintetizar las ideas, a dominar con mayor precisión
la técnica de la meditación, a desarrollar creatividad a la
hora de explicar las enseñanzas. En otras palabras, hemos
tenido que profundizar en nuestra doctrina para exponer
las ideas de Cafh a personas que no están en nuestro
Camino. Esto nos deja una gran enseñanza que, dada su
sencillez, podríamos pasar por alto: para poder transmitir
nuestros bienes interiores a otros, tenemos que alimen-
tarlos primero en nosotros”
En nuestro caso, al ser un medio abierto a todo público,
la responsabilidad se expresa en la selección adecuada del
material a difundir y en el sostén semanal de nuestra pre-
sencia en el estudio para llevar a cabo la tarea asumida.
Para ello, debemos trabajar a la par en la construcción
del equipo de trabajo dando lugar a las diferencias para
potenciarlas y que las mismas se conjuguen para el logro
de un noble producto. También, implica estar dispuestos a
aprender, subordinando el entusiasmo propio, a la posibi-
lidad más operativa para que la transmisión llegue, clara
y precisa, a quienes se disponen a compartirla.
En el presente ciclo contamos con el valioso asesora-
miento de Jeremías Spetz, un joven operador experto, que
desde su propia búsqueda, nos guía a precisar y ajustar
cada vez más el formato del programa.
Relato de una construcción conjunta, creando un camino hacia los otrosEl proyecto Radio “Vuelos” comenzó a gestarse y se puso en marcha en
octubre de 2013, con el objetivo y asumiendo el compromiso hacia el inte-
rior del equipo de difundir las ideas de Cafh a través de nuestra palabra;
“es por esto que tenemos que ser muy concientes de que lo que da fuerza a
nuestro mensaje es el testimonio de la propia renuncia”, tomando las pala-
bras del Mensaje de la Asamblea Cafh 2013.
RADIO VUELOS
Podés escuchar Radio Vuelos ingresando a www.radioalacalle.comLos sábados de 16:00 a 17:00 hs (ARG). Busanos en Facebook: Vuelos Cafh, Fan Page: Radio Vuelos. E-mail: [email protected], Página de YouTube: https://www.youtube.com/channel/
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Equipo Radio Vuelos
En la transmisión en piso y
producción:
Ana y Florencia Yuvero
Ricardo Lewitan
Cristina Quadrelli
Columnistas colaboradores:
Fabiana Mastrángelo
Colaboradores en la
postproducción:
Sandra Murad
Eduardo Campelo
Operador técnico:
Jeremías Spetz
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Compartimos con ustedes, en esta edición de la Revista
Vuelos, un recorte de uno de los programas emitido
este año, el 26 de septiembre, en el que trabajamos
sobre la relación entre “Arte y espiritualidad”.
Nuestra frase inicial fue: “El arte es una vía de cone-
xión entre el corazón del mundo y el corazón del ser
humano. Cuerpo, mente y alma son expresiones de un
Espíritu unificado que habita el universo y que puede
tomar vida y manifestarse de un modo trascendente y
resplandecer en las pequeñas cosas de la vida” (María
Tersa Pozzoli)
El arte es un símbolo y define a una cultura, repre-
sentando un diálogo permanente con el pasado; y es
un medio de comunicación porque ha permitido a
nuestros antepasados comunicarse con el futuro, in-
formando sobre su historia, su geografía, sus pasiones,
sus costumbres, sus trabajos y sobre los detalles de su
vida cotidiana. La expresión artística permite materia-
lizar nuestra imaginación y crear otros mundos, otras
realidades, otras formas de vivir y otras sensaciones y
ayuda a recuperar el equilibrio del alma cuando está
torturada por imágenes internas que la acosan.
El arte despierta el mundo interior que está dormido
y que guarda nuestro ser esencial, ansioso por ser
descubierto (extraído de El Arte y la Espiritualidad | La guía de
Filosofía http://filosofia.laguia2000.com/filosofia-y-arte/el-arte-y-la-
espiritualidad#ixzz3m8fRm9hk)
Hegel sostiene: «El arte es una forma particular bajo la cual el espíritu se mani-fiesta»
En uno de los Mensajes en ocasión de la Asamblea
de Cafh leemos: “ El permanecer dentro del ámbito
de una idea trascendente impregna la intención que
da dirección y sentido a nuestras vidas. Esta fijación
espiritual se traduce en estabilidad interior. Cuando
más apoyamos la actividad exterior en esta estabilidad
interior mayor es la trascendencia de nuestro hacer”
Aquí cabe tomar la palabra de los entrevistados en este
programa:
Héctor López. Artista plástico
RV- “¿Quién pinta en tus obras?
HL- Uno nunca está muy seguro acerca de quién es el
que está haciendo las cosas. Yo creo que, en el arte y en
cualquier otra actividad que emprendas, cuando uno
está trabajando interiormente en su vocación espiritual
lo que uno realmente anhela es que se manifieste eso en
todo lo que uno hace; yo creo que en la mayoría de mis
obras, ese ser espiritual es el que pinta”
RV- “¿Cómo planteás la posibilidad de este entrecruza-
miento de lo espiritual y las manifestaciones artísticas?
HL- No necesariamente se da la simultaneidad de las
dos inquietudes. Hay personas que no desarrollan
jamás una actitud artística y sin embargo tienen una
gran vocación espiritual y viceversa. Hay artistas que no
tienen la más mínima vocación espiritual pero sí tienen
un don natural. Lo que hace la espiritualidad es darle
una profundidad a la inquietud artística. Cuando uno
comienza le parece que todo tiene que ser pensado,
todo tiene que ser analizado, uno está más atado a
la técnica, más o menos lo mismo que sucede con la
vocación espiritual”
Arte y EspiritualidadFragmentos del programa emitido el 26 de septiembre
Cristina Migliozzi. Artista plástica. Dirige el taller de
niños en Tortuguitas, Buenos Aires:
RV -“¿Cómo surgió la idea de un taller de arte para
niños?
CM- La idea de un taller surgió hace mucho tiempo
para incentivar a los niños a usar su creatividad y que
expresen sus emociones, que a veces no pueden expre-
sar en palabras. Me gustaría destacar sobre todo el ob-
jetivo principal de este taller que es despertar, mantener
y desenvolver la creatividad. Se trabaja con los cuatro
elementos de la naturaleza: agua, tierra, fuego y aire, se
les pone a su alcance una gran gama de materiales: pin-
turas, papel, madera, hojas, semillas, desechos, arcilla.
Algo muy importante: no hay nada planeado, no hay
indicaciones, los niños tienen la libertad de expresarse
en sí mismos. Aprenden valores jugando como compar-
tir, el respetarse, a respetar la naturaleza, a respetar a
los padres”
RV- “¿Cómo nos podés describir tu relación con el arte
como canal de transmisión de lo Divino?
CM- El arte es la llave que me abre la puerta a otros
mundos, a otras realidades y a otra forma de vivir; es
una detención antes de recorrer un camino donde vuel-
co toda mi imaginación creadora en múltiples formas
y colores. En la tela expreso y transmito mi interior
exteriorizando mi sentir, mi forma de ser al tomar un
pincel y plasmar una idea.
Cristina Silva. Dirige junto a su equipo el taller de niños
en Villa Mercedes, San Luis
RV- ¿Qué valores espirituales surgen en este espacio
para los niños?
CS- Lo más hermoso que se realiza en los talleres de
niños es que ellos sienten su espacio, su tiempo de re-
unión donde se enseña a compartir el respeto, a incor-
porar horarios, y me gustó mucho lo que se relaciona
con la creatividad porque los chicos son realmente seres
creativos y cuando uno les da esa posibilidad se arma
un arte maravilloso.
RV- ¿Qué materiales utilizan para estimular la participa-
ción y la creatividad?
CS_ Hace cuatro años que realizamos estos talleres.
El primer año teatralizamos cuentos y empezamos a
actuar primero los adultos y después los niños quisieron
ser actores entonces nos dimos cuenta de que la posibi-
lidad estaba en ellos. El otro año creamos instrumentos
para luego formar un coro; crear instrumentos y a su
vez esos instrumentos utilizarlos y así fue que al final del
año interpretamos canciones. El año pasado fue todo
de canciones, donde ellos aprendieron las letras y se
sentían felices de cantarlas y este año hemos incorpo-
rado títeres que realizan en la Comunidad de Embalse;
nosotros damos la obra y ellos también la hacen desde
su apertura.
A modo de corolario:Abrimos ventanas, para que entre la luz y con ella, las
palabras, también, para que las nuestras vuelen hacia
los escuchas, y juntos, entonces, construimos una red,
donde el anhelo de lo Divino es el impulso constante,
que nos lleva hacia un horizonte cada vez más amplio y
diáfano.
Ciclo de conferencias en San Luis y Villa Mercedes :
Sede Cafh Villa Mercedes :
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ACTIVIDADES DE EXTENSIÓN
San Luis, Villa Mercedes
Inauguración Sede Cafh San LuisEl pasado 21 mayo de 2015 se inauguró en San Luis una
nueva Sede de Cafh. En este marco se realizó una recep-
ción a cargo del director de Cafh, Sr. José Luis Kutsche-
rauer, luego los asistentes compartieron un almuerzo,
recorrieron las nuevas instalaciones y se presentaron los
proyectos de reforma. Se desarrolló una presentación
a cargo del Sr. Kutscherauer y se realizaron actividades
festivas y artísticas.
“El Valor de la Mística”, una mirada pro-funda a nuestra cotidianeidad” A cargo de José Fadda, miembro de Cafh desde hace más
de 42 años.
El disertante brindó charlas y conferencias en forma
conjunta e individual en el marco de las Actividades de
Extension de Cafh en distintas provincias del País y en
Lima – Perú.
La idea central del trabajo fue revisar juntos a los asisten-
tes, conceptos, acciones y conductas para que si hiciera
falta “darles valor” y en ello encontrar “Lo trascendente,
Lo divino”.
“Semillas de serenidad interior”, ideas y prácticas para su realización.A cargo de Fabiana Mastrángelo, miembro de Cafh desde
hace más de 30 años, es historiadora (Universidad Nacio-
nal de Cuyo), autora de la biografía del fundador de Cafh,
Santiago Bovisio, la obra fue declarada de interés cultural
y presentada en diversas provincias argentinas y en diferen-
tes países. Entre las conferencias dictadas: “El desenvolvi-
miento espiritual tradicional y la mística contemporánea”,
“¿Cómo desarrollar las potencialidades plenas del Ser
Humano?”, “Un aprendizaje integral en valores humanos
trascendentes”, “Saber amar para un mundo mejor”.
Reunión de almas la propuesta de Cafh Reuniones abiertas, un espacio para meditar, dialogar y
crecer juntos. Estas reuniones
Taller para niños En agosto se realizó una obra de títeres denominada
“Escuelita de campo”. Autor: Carlos J. Durán. Adaptación:
María Cristina Medawar.
Objetivo del espacio: Acompañar y despertar la creativi-
dad, el entusiasmo y el compañerismo.
Palabras de Don Santiago Bovisio recuerdan que “el niño
necesita más libertad que nadie porque su mente va des-
pertando y sus sentimientos se van expandiendo”.
“La sartén por el mango”A cargo de Ester Casenave, miembro de Cafh desde hace
más de 30 años. La disertante brindó diversos Talleres,
Cursos y Retiros Espirituales. Es ingeniera agrónoma, ex
profesora e investigadora en la Universidad Nacional de
Santiago del Estero. La charla-taller donde indagó en el
conocimiento de uno mismo y en la revisión de actitudes y
creencias limitantes. Se aportaron algunas herramientas
para analizar la propia vida y descubrir cómo asumir la
responsabilidad y libertad.
El espacio motivó que los asistentes compartieran instru-
mentos que nos acercan a la vida interior, a ejercicios de
meditación y oración.
Córdoba (embalse y Ro IV)
“Más allá de las palabras, es la fuerza de nuestra ofrenda,
traducida en hechos palpables, lo que nos lleva a ser
factores de desenvolvimiento. Más fructífero que soñar en
un mundo mejor, es crear ese mundo”...
Mensaje Asamblea Cafh 2015.
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ACTIVIDADES DE EXTENSIÓN
Sede Cafh Mendoza Sede Cafh Tunuyán
Sede Cafh San Juan
Durante 2015, en la Sede Cafh Mendoza se desarrollaron
las siguientes actividades
Taller de Escritura Coordinado por Marta Ibáñez. Este taller se desarrolla por
5to año consecutivo en la ciudad de Mendoza.
Grupo Lectura Reflexiva Coordinado por Teresa Columna. Este taller se desarrolla
por 3er año consecutivo en la ciudad de Mendoza.
Charlas con perfume de Té – Este espacio se desarrolla por
6to año consecutivo, coordinado por Teresita Soloa.
Mate con amigos y algo más Este espacio informal y distendido se desarrolla por 4to
año consecutivo. Coordinado por Rubén Rodríguez, Ma-
rio Persia, Mirian Rueda, Teresita Soloa, Mónica Debaris-
ta y Graciela Contreras.
Taller Las Mujeres de hoy. Este taller tiene lugar en la ciudad de San Juan y en Jachal,
y es coordinado por Selva Martínez, Cristina Vergara,
Liliana Adrover, Rosa Sánchez, Estela Riveros.
Seminario Taller de Diálogo Coordinado por Edgardo González. Este taller se desa-
rrolla por 6to año consecutivo en la ciudad de Mendoza.
El espacio se despliega a partir de la participación en dos
módulos: “Diálogo Espiritual” y “La mística del corazón”.
El objetivo es trabajar al diálogo como instrumento de
comunicación grupal para la expansión de la conciencia,
estableciendo relaciones armónicas que nos permitan
unirnos y trabajar en plenitud, sinergizando la riqueza de
la diversidad.
Seminario – taller: “Aprender a Orar, aprender a vivir.Estos espacios son coordinados por Beatriz Migliozzi,
Héctor Verti, Clara Molina, Ricardo Migliozzi, Teresa Pelle-
grina y Juan Joulie
Reuniones abiertasComenzó el 2 de septiembre de 2015. Coordinado por
Beatriz Migliozzi y Juan Joulie. Aquí se trabaja en medita-
ción, enseñanza y diálogo.
Grupo de Oración a cargo de Beatriz Migliozzi y Juan
Joulie. Comenzó el 9/9/15.
Reuniones con amigos de Cafh. Coordinado por Edgardo Gonzáles por 3er año consecuti-
vo. Este espacio trabaja teniendo como guía el libro “Vida
Espiritual”, cuyo autor es el Sr. Jorge Waxemberg.
Cambiando para cambiar En proceso, coordinado por Laura Luján y Leo Fatela.
sección
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Camino hacia la paz y la plenitud del almaPor Víctor BullaudeYerba Buena, Tucumán
Desde mi punto de vista, no hay ser humano sobre la tierra que quiera vivir sin paz y sin
plenitud en su alma. Aún aquellos que no distinguen éstos términos sueñan con ellos.
Tal vez usted estará pensando en aquellas situaciones patológicas en las que, quienes las
padecen, solo desean la posesión, el poder para someter y una imagen que les permita
sostenerse en ese rol. Que los hay los hay y no estaría en nuestras manos modificarlos.
Aquí estamos proporcionando una idea que amplíe y profundice la mirada de aquel ser
humano que aspira a la paz en sí y en el mundo. De aquel ser humano que siente y sabe
decir: “Yo importo tanto como los demás me importan”. De aquel ser humano que quiere
vivir en sí lo que desea realizar fuera de sí. De aquel ser humano que conoce y acepta sin-
ceramente su actual y transitoria condición humana: ser incompleto y ser ignorante.
De aquel ser humano que está aceptando el desafío de ser un APRENDIZ EN SU EXISTEN-
CIA y el artesano que se diseña a sí mismo.
• Evitar el afán de posesión que genera pobreza y miseria.
• Evitar el afán de dominio sobre los demás que genera violencias.
• Evitar el afán por ocultar nuestro verdadero SER, detrás de máscaras sociales.
• El logro del Amor Divino: incluyente, compasivo, incondicional.
“La Paz y la Felicidad que el ser humano tanto busca sobre la tierra
solamente la logrará por el apartamiento de los bienes transitorios y el logro del amor
divino”
Aquí estamos: proporcionando una idea que amplíe y profundice la mi-
rada de aquel ser humano que aspira a la paz en sí y en el mundo. De
aquel ser humano que siente y sabe decir: “Yo importo tanto como los
demás me importan”
(S.B: Santiago Bovisio – Fundador de Cafh)LAS ANSIAS DE POSESIÓN
“Las ansias de posesión, como imagen mental y como estado emotivo, son las que han
separado siempre a los seres humanos en facciones y clases” (S. Bovisio), generando
violencias que desbordan toda medida imaginable.
Al decir “ansias de posesión” nos estamos refiriendo también a aquel deseo desmedido e
incontrolado de querer retener en nuestro poder un bien que
- siempre y en cualquier momento - la vida finalmente lo tomará: produciéndonos dolor y
confunsión.
Habitualmente, no percibimos que estemos desencadenando este proceso de dolor y de
violencia en la comunidad en que vivimos: LA HUMANIDAD.
Es esta una onda mental y anímica que irradiamos con nuestra conducta posesiva y con
la que generamos violencia en el mundo. Hoy está más claro que nunca que esta onda
de violencia está ya presente en nuestros niños, en las escuelas, en los padres y maestros.
Es una violencia que ya no se limita a los campos de batallas de las clásicas guerras entre
ejércitos entrenados con tanques y misiles. Hoy la vemos en nuestros propios hogares, en
las calles de cualquier ciudad. Es un “síntoma” cuya causa reside en nosotros mismos.
LA VIOLENCIA que hoy experimentamos no es ya privativa de ninguna clase social, ni de
personas con diferentes niveles de instrucción. La vemos manifestarse en aquellos que os-
tentan títulos de grados universitarios y aún de una larga trayectoria de vida. La podemos
ver con distintos grados de impunidad: a cara descubierta y apañada también por los
poderes de turno.
Volvamos al origen de toda esta situación. Lo que hicimos hasta aquí es describir
superficialmente los “síntomas” que padecemos: La violencia en nosotros que germina
como semilla indeseable en todo el mundo. Estamos confundiendo el fenómeno con su
explicación. Hasta aquí lo que hicimos es solo explicar y “combatir” el síntoma, más no
prestamos atención al enfermo que propaga la enfermedad: NOSOTROS MISMOS.
Alentamos por todos los medios y todo el tiempo (inconscientemente) nuestras ansias de
posesión. Los medios de difusión masiva se han especializado en alentar y atrapar nuestra
atención golpeando nuestro lado más débil. Escuchamos decir en anuncios:
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“¡POSEAN!……. CUANTO MÁS TENGAN …..MÁS IMPORTANTES, MÁS PODERO-
SOS….. Y MÁS DIFERENTES …..SERÁN”. ¡Y nosotros compramos todo!, sin darnos
cuenta cuán alto es el costo que estamos pagando.
Con esto creemos adquirir un certificado de garantía para nuestra supervivencia en
este mundo, mientras estamos gestando con la misma fuerza una ola de violencia agita-
da por la separatividad que alentamos en nuestras almas.
El drama no está en tener, sino en desear RE-tener acumulando y ocupando dos luga-
res en el mundo en lugar de uno: privando a los demás.
Las ansias por prevalecerNos estamos refiriendo a nuestros “deseos desmedidos” por imponernos sobre los
demás y aún más: deseamos que las leyes de la vida obedezcan a nuestro arbitrio. Es el
afán de querer siempre terminar primeros, ganando en toda situación. Tamaña sober-
bia es desequilibrante de cualquier sistema nervioso y/o social.
El deseo de imponernos viola el sagrado “derecho que todo ser humano tiene de ejercer
su libertad de pensar, sentir y decidir en su vida sin la interferencia de otros”(1). Toda
violación de este derecho conlleva violencia y toda violencia nos separa y nos enfrenta
hasta destruirnos mutuamente.
Prevalecer es adjudicarse un valor que supone que estamos por encima de los demás.
Incluye también desprecio por el otro. Supone en definitiva una ignorancia suprema al
no poder reconocer lo que “no sabemos”.
Prevalecer es querer estar en el podio de los ganadores, requiriendo admiración y ser
premiado siempre. Requiriendo privilegios que lo distingan de los demás. Es esta una
genuina expresión de separatividad, fuente de dolores y rechazos entre los seres huma-
nos.
El afán de ganar siempre, ostentar seguridad y poder sobre los demás, alienta también
el deseo por SER ALGUIEN.
El afán por ser alguienAl no saber quiénes SOMOS, los seres humanos, nos afanamos por adquirir una iden-
tidad que nos destaque sobre los demás. Una identidad preciada por todos y míni-
mamente por nosotros para sentirnos seguros y pertenecientes a un conjunto que nos
reconozca.
En un principio, es mucho más cómodo adquirir una “máscara social” para representar
a un personaje querible, que ocuparnos de saber quiénes somos.
Vivimos identificándonos con una máscara social. Así vivimos insatisfechos con noso-
tros mismos y en consecuencia con los demás.
EL ANHELO DE LIBERACIÓN INTERIOR: de la plenitud y el amor.En algún momento nos revelamos frente a nuestra falta de autenticidad. Nos vemos
actuando como marionetas: construidos y manejados por los demás (sobre todo mane-
jados por ideas hechas y adquiridas por nosotros mismos), agregándose a esto las burlas
de los que miran nuestras grotescas personalidades. Heridos de muerte, comienza nuestra
agonía. La insatisfacción nos sume en la tristeza y posteriormente en una sincera búsque-
da de liberación interior. Deseamos liberarnos de los condicionamientos inconscientes,
heredados y adquiridos por la necesidad de la experiencia.
No se trata de renegar de lo heredado ni de lo adquirido hasta aquí. Se trata de des-
identificarnos de todo ello: reconocer que no somos lo que creímos ser y que equivocada-
mente llamamos “nosotros mismos” (mí mismo).
Así comenzaría en forma deliberada nuestro Camino de desenvolvimiento espiritual. Es-
taríamos en el umbral que da comienzo al proceso de búsqueda de nuestra LIBERACIÓN
INTERIOR.
Toda vez que planteamos un imposible, CREAMOS obstáculos que CONSTITUÍMOS en
“sólidos barrotes” de nuestra “cárcel interior”. Así nos encerramos insensibles e incons-
cientemente privándonos de nuestra libertad original.
El anhelo de libertad interior – solo por amor a ella – nos impulsa a abrirnos: buscando
una orientación y un método de vida eficiente que nos sirva para descubrir lo que SO-
MOS y expandir nuestro Amor. Esto es lo que encontré en Cafh: un Camino de desenvolvi-
miento espiritual, que transito hace ya 56 años.-
Sede Buenos AiresTucumán 1321 5o piso(1050) Buenos AiresTel. [email protected]
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Sedes de Cafh Argentina
La Fundación Cafh es una organización sin fines de lucro. Su objetivo es estimular el desenvolvimiento espiritual en la
sociedad y para ello realiza actividades vinculadas al desarrollo de la cultura en sus diversos aspectos y también obras de
asistencia social que atienden a las necesidades de crecimiento y expansión espiritual.
Estas actividades están abiertas a la comunidad a través de los centros que auspicia Cafh en distintos lugares del país.